Ya ha pasado unos cuantos días desde la carrera, mis amigos siguen recordando ese acontecimiento. Quieren que volvamos a competir, pero según Bruno, el chico misteriosos se va a su ciudad esta noche y no podremos correr.
La verdad es que tampoco tengo muchas ganas de hacerlo, hace ya unos días que me siento sin muchas energías. No tengo ganas de hacer nada, ni siquiera de correr. Lo único que hago es ir a trabajar unas horas a la empresa, luego universidad y vuelvo a mi casa. Ya ni ganas tengo de juntarme con Babi, estoy extraña y lo peor de todo es que se el motivo, pero no pienso decirlo en voz alta.
-Serena, te estoy hablando -mi tío Brando, me saca de mi limbo.
-Lo siento, Brando. Me lo puedes repetir -sonrío débilmente, observándolo.
-¿Qué sucede Sere? -nos encontramos en su haciendo unos balances.
-No es nada, solo me quede tildada -soy pésima mintiendo.
-A tu tío no le mientes -corre su computadora de la mesada y me observa a mis ojos. Hago una mueca.
-Si te soy sincera, no es toy muy segura de lo que me está pasando.
-¿Acaso tiene que ver con un chico? -observo el gigante ventanal.
-Quizás...
-¿Lo conozco? -joder, no le puedo decir.
-No creo -mentira, lo conoce y se llevan jodidamente bien, como él dice.
-Es Dante -JODER. Intento ocultar mi asombro.
-¿El hijo de Sammy? -intento restarle importancia.
-Ese mismo.
-¿Qué sucede con él? -Serena, sos pésima para estas cosas, tia.
-Te vi en el almuerzo del fin de semana. Mientras te observaba, recordaba las barbacoas de los viejos tiempos, nuestras conversaciones y simplemente tuve que observar como lo miras, para darme cuenta de que estas coladita por el muchacho.
-Esto queda entre tu y yo -lo amenazo con mi dedo.
-¿Me estas amenazando princesita?
-Joder, si.
-Esa es mi chica, ahora dime ¿Por qué estas con esa carita? -su semblante serio, cambio y me observa con ternura.
-No lo se, joder, no lo se -refriego mis manos en mi cara.
-Tranquila cariño, todavía sos chica. Ustedes fueron muy buenos amigos en su infacnia, muy compañeros. Ahora ya no se ven como antes, sos una mujer hermosa y él es un jodido muchacho, ya no tiene más esos aparatos en los dientes y los granos, está lleno de musculos y tatuajes. Me hace a cordar a mi cuando tenía su edad, joder.
-Lo se, coño, lo he visto. Lo he visto en la maldita pileta el fin de semana, ¿Acaso viste sus abdominales? ¿Su espalda?.
-Para ahí muñeca, suficiente, joder, que soy tu tío. Y estoy siendo muy comprensible, pero tampoco hagas esos comentarios.
-Lo siento, pero son inevitables. Igual nunca pasará nada entre nosotros, casi que somos como primos, nuestras familias son muy unidas. Y un detalle importare, él tiene una jodida novia.
-Joder -susurra mi tío.
-Eso mismo.
-Bueno cariño, ya veremos que hacemos. Ahora quiero que nos concentremos en esto y luego vamos a merendar nosotros dos y seguimos hablando de esta situación.
-Si tito Bando.
-No empieces.
-Lo siento -ambos reímos y continuamos con nuestro trabajo. Que para mi sorpresa, pude focalizarme bastante.
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WANT
RomanceCuarto libro de la #SAGABONITA Serena es una joven de 23 años, ella vive en España. Estudia, diseño de modas. Pero tiene un hobby que pocos conocen... Dante, amante de los autos. Su padre tiene la mejor cadena de talleres de autos de toda Europa. De...