Fictober2018

Childhood

Resumen: Hyoga es el niño gaijin, el que no pronuncia bien el japonés... pero, aun así, él es el niño con un nuevo amigo.

Serie: Saint Seiya.

Personajes: Hyoga, Shun, Ikki.

Pareja: ---

Género: Amistad. AU (Universo Alternativo)

Rating: K

Advertencia: -

Capítulos: Viñeta

Palabras: 947

Notas: Primera entrega del Fictober 2018.

Fecha: 01/08/2018.

Beta Reader:

Disclaimer: Todo lo referente a Saint Seiya pertenece a Masami Kurumada y a la Toei.

01. Childhood – Infancia.

No era la primera vez que Hyoga se veía relegado a solo quedarse sentado en los pilotes de cemento alrededor del parque de juegos. Él no tenia muchas posibilidades de jugar si el lugar estaba lleno de otros niños... niños más grandes que al parecer, estaban bastante a gusto con el hecho de meterse con los mas jóvenes, y hacerse dueños de todo el parque. Incluso cuando ninguno de ellos usaba exactamente los juegos.

Al principio, Hyoga había pensado que se metían con él por la misma razón que siempre destacaba. Su cabello rubio y sus ojos claros, era lo primero que lo delataba como un gaijin, y su torpe pronunciación del japonés tampoco le era de ayuda alguna.

Desde que él y su madre habían llegado a este barrio, Hyoga jamás había podido jugar, ni una sola vez. Y si había algo que el pequeño ruso amara de los juegos, eso definitivamente era columpiarse.

Solo que después del segundo día de sufrir empujones y golpes, simplemente había dejado de intentarlo. Y no porque les tuviera miedo, sino por que no solo eran mas grandes que él, sino que también siempre eran muchos de ellos al mismo tiempo.

Quizás, si era realmente paciente, tendría la oportunidad de que solo fueran pocos, como para que él pudiera...

—¡Hola!

La voz aguda pero suave lo saco de su pensamiento vengativo, haciéndolo girar hacia la voz un tanto asustado. Tal vez por ello, Hyoga no llego a responder el saludo ofrecido, y solo se dedico a observar al niño parado a su lado, con el ceño profundamente fruncido.

—Mi nombre es Shun... ¿Quieres jugar conmigo?

Hyoga parpadeo sorprendido, y le tomo casi un minuto entero el darse cuenta de que efectivamente estaba dirigiéndose a él. Mucho menos tiempo de lo que le tomo a su cuerpo el traicionarlo con una demasiado efusiva negativa. Incluso antes de que su mente buscara las palabras correctas en su limitado lenguaje para aceptar la increíble invitación ofrecida.

El chico se derrumbo un poco al ver la negación, pero aun así le sonrió mientras se alejaba en dirección a los juegos, como si nada más importaba.

De golpe Hyoga entendió que ese era un panorama destinado a un trágico final. El chico, incluso mas pequeño que él, caminaba tratando de sortear a los niños mas grandes que no parecían estar muy contentos de su presencia allí.

El rubio se puso de pie de un salto, intentando llegar al niño antes de que en su piel pálida se reflejaran los mismos moretones que Hyoga había lucido meses atrás; pues como él había temido, ese niño -Shun- ahora estaba rodeado de niños más grandes gritándole.

Tomo una piedra, listo para arrojarla si era necesario, y de seguro que lo seria. No podría hacer mucho, pero ya sea a uno de ellos lastimaría.

Aunque, afortunadamente no fue necesaria su pobre intervención.

De golpe un muchacho mucho mayor que ellos, incluso, y de piel morena apareció entre Shun y los otros chicos. Como una gran pared de ladrillos.

Hyoga lo vio asombrado por un instante antes de ver el terror en el rostro de los demás, y se pregunto que tan malo era que ese chico estuviera allí... para ellos o para él.

—Espero que todos ustedes tengan algo mas importante que hacer... lejos de aquí. —dijo, calmado, y solo con sus brazos cruzados sobre su pecho. Y simplemente eso basto para que de pronto el parque quedara desierto a excepción de ellos tres.

—¡Niisan! Sabes muy bien que no debes pelear.

Shun parecía querer sonar vehemente, aunque todo su afan parecía perder intensidad, viéndolo intentar subirse a los columpios mas grandes de los juegos.

—Tu solo procura no caerte. Yo estaré sentado allí... leyendo.

—¡Sí, niisan!

Hyoga casi sintió miedo cuando el chico se giro y le dedico una mirada que lo dejo clavado en ese lugar, aun a contra gusto tuvo que desviar la vista hacia otro lado.

Shun siguió columpiándose como si nada mas le importara en la vida, o como si ese chico no se hubiera enfrentado a casi una docena de otros niños nada mas que con su mala cara... mientras Hyoga no podía dejar de mirarlo atentamente.

El rubio tampoco perdió de vista al chico moreno, mientras comenzaba un acercamiento lento y cuidadoso.

—Hola. —oyó nuevamente, como si ya no se hubieran saludado antes.

—Hyoga. —se presentó, antes de que cualquier otra cosa saliera de sus labios, ganándose una sonrisa enorme de parte del otro niño.

—Mucho gusto Hyoga... Yo soy Shun, y niisan es Ikki. —explico simplemente.

Hyoga se giró hacia atrás, donde el chico –Ikki– los observaba por encima de su libro abierto.

—Me gusta tu nombre, es muy lindo... y el color de tus ojos, Hyoga.

De pronto Hyoga sintió una vergüenza súbita, pero agradeció el cumplido como su madre le había enseñado.

—¿Aun quieres que juegue contigo?

—¡Si! —Shun salto de emoción del columpio, y aunque termino en el suelo algo golpeado, pronto estuvo una vez mas sobre sus pies rápidamente. —Niisan, Hyoga es mi nuevo amigo, y vamos a jugar juntos.

Ikki solo los observó un instante antes de sonreírle a su hermano y volver a su libro.

Hyoga corrió, salto y se arrojó desde lo alto del gimnasio, ante la fascinada mirada de Shun, por lo menos hasta que su hermano lo llamo para que se fueran.

—¿Ya es hora de que regresen?

—Sí, Niisan dice que es tarde. —Shun pronuncio, viendo de reojo a su hermano, antes de sonreír. —Pero mañana podemos jugar de nuevo... ¿no lo crees?

Hyoga asintió con entusiasmo antes de saludar al chico que se alejaba de la mano con su hermano.

Fin del día 01.

Notas Finales: Hasta aquí el primer día... no sé si lo voy a poder terminar, peo que lo voy a intentar lo voy a intentar.

Creo que no será de una sola pareja... o de un solo fandom, así que no sé muy bien como saldrá.

¿Gusto? ¿No gusto?

¡Ya sabes, házmelo saber!