Fictober2018

Tear

05 Tear -Lágrima.

Por eso odiaban los vuelos comerciales... la espera interminable, la gente que comenzaba a ponerse nerviosa después de un tiempo. Ni Shun ni Hyoga eran muy afectos a eso, pero si había un día en que necesitaban hacer de tripas corazón, era ese.

Hyoga se aferro a sus auriculares y a una pashmina que Shun siempre llevaba en su bolso para cubrir sus ojos, con solo un gruñido de 'levántame cuando pisemos tierra' cuando por fin estuvieron en sus asientos.

Shun solo se limitó a reírse de él, pero lo cierto es que no estaba mucho mejor que su compañero. Si no fuera porque era necesario que hicieran las cosas de esa manera, hubieran recurrido a uno de los aviones privados de la fundación Graud.

Claro que Hyoga se removió todo el vuelo y se quejó mas de lo que logró conciliar el sueño. Y no podía dejar de decirle a su compañero todo lo que pensaba acerca de Shiryu. Con lujos de detalle.

"Tiene suerte de que me hayas arrastrado hoy"

"Te hubiera matado de otra forma, Hyoga"

"No te creo"

"Pruébame, Cignus"

El rubio gruñó, pero decidió no tentar su suerte.

Shun se aseguró de que su amenaza flotara constantemente sobre la cabeza del rubio, mientras corrían por el aeropuerto, recogían sus mochilas y comenzaban la subida por una montaña que ninguno de los dos conocía.

Afortunadamente, las flores les dieron un seguro empujón a su sentido de orientación.

"¡Shun, Hyoga!"

"Sí, Shiryu llegamos... la pregunta es, ¿Qué tan tarde?"

"Estan a tiempo, incluso con quince minutos de holgura para que se vistan"

Shun asintió, empujando a Hyoga hacia el lugar que Shiryu les había indicado como adecuado para cambiarse de ropa.

El Santo de Andrómeda acabó de ajustar la corbata y botones de la camisa del rubio, incluso bajo sus continuas quejas.

"Es un casamiento en medio de las montañas Shun, nadie se fijará en el nudo de mi corbata."

"Créeme que lo harán, Hyoga"

Un empujón basto para sacarlo de la habitación, sin que llegara a hacer ningún comentario... pero no pudo dejar de notar que Shun no estaba justamente llevándolo hacia el esto de los invitados.

"¿Tengo que preocuparme de que me estés llevando hacia un lugar apartado?

"No te estoy llevando hacia ningún lado, Hyoga... Pero si haces esto bien, yo mismo me dejo guiar por ti hasta donde quieras"

El Cisne estuvo a punto de preguntar que era lo que quería decir su amigo, pero antes de que lo hiciera, Shun dejo en sus manos una pequeña caja de terciopelo rojo.

Un leve movimiento de su cabeza consiguió que el rubio mirara a través de las ventanas de la casa rural.

Una muy hermosa Shunrei esperaba sentada, su vestido adornado de forma tradicional.

"Shiryu no te lo dijo, pero siempre quiso que tu tuvieras este lugar. Te eligió para llevar a Shunrei al altar con él."

Hyoga miro los anillos en su mano y asintió hacia Shun.

"Me engañaste"

"No, solo omití tu verdadero papel en la boda. No es lo mismo."

El rubio Santo gruño, pero no podía exactamente enfadarse con ninguno de sus amigos.

Shunrei salió cuando ellos aun se miraban buscando que mas decir. Shoryu se abrazó rápidamente a las piernas de Shun.

"Estas hermosa" aceptó Hyoga con un increíble nudo en la garganta.

"Gracias... a los dos por estar aquí."

Shun solo negó, Shoryu ahora acomodado en su cadera.

Desde allí todo fue idílico. La celebración no seria jamás muy ostentosa, pero sí algo realmente sublime para ellos.

Pero lo que mas golpeó a los santos, fueron las palabras del Dragón... dedicadas a su maestro, y a los otros Santos que hoy no estaban allí.

Claro que los tres acabaron llorando... Shun de forma abierta, Hyoga tratando de esconder sus lagrimas rápidamente.

"Están llorando." Murmuró el Santo del Cisne cuando el pequeño discurso acabo con un tímido beso entre ellos.

"Sí, pero son lagrimas de felicidad."

Final del día 05

Notas Finales: Día complicado... aun estoy en el trabajo, escribiendo desde mi tablet, pero tengo que seguir con el reto, así que creo que lo maneje bien, porque hasta las doce de la noche no llego a mi casa... y ciertamente esto no era lo primero que quería escribir.

Ahora, voy a ver como lo subo.

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