Capítulo 7: Honky Tonk

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Lamento haber tardado tres días en actualizar, pero fue el cumpleaños de un amigo, y después vino a quedarse  mi mejor amiga a mi casa y no me dio tiempo de nada más x3

Espero que les guste, muchas gracias por seguir leyendo y tenerme paciencia 

***

Habían pasado unas semanas desde el concierto, las sesiones de rehabilitación habían finalizado, y todo regresaba a la normalidad en la vida del rubio, a excepción de que a pesar de todo no podía olvidar a Ban. En ese tiempo no lo vio, en realidad no supo nada de él...

–¡Ginji! –gritaba por cuarta vez Shido mirando como el rubio no le hacía caso

–¡No me grites! –exclamó mientras hacia un puchero

–Podrías traer al perro Alaska de ayer – dijo Shido acercándose a él. –Concéntrate, tenemos clientes –le susurro dándole la espalda y regresando al mostrador donde estaba la familia del perrito.

Ginji asintió y disculpándose fue por el perro. Regreso con él y lo dejo sobre la mesa.

–Ya está mejor, –Shido acaricio la cabeza del Alaska –le darán estas pastillas en su agua, y lo traerá para que lo revisemos en una semana –explicaba Shido a la dueña.

–En verdad muchas gracias –decía la niña feliz de ver a su cachorro bien.

–Cuidalo mucho –le dijo Ginji con una sonrisa.

Cuando se fueron Shido volteo a ver a su amigo

–¿Qué diablos te pasa? –preguntó mientras metía sus manos en los bolsillos.

–Nada, sólo estoy cansado –respondió Ginji.

No quería preocupar a su amigo, ¿Cómo podría decirle que no dejaba de pensar en Ban porque le gustaba?

–No me engañas Ginji, estás pensando en aquel sujeto –exclamó, desde el día del concierto su amigo se había comportado de esa manera.

–Shido... ¿qué es lo que me pasa, porqué no puedo olvidarlo? –preguntó mientras se acercaba a su amigo

–No me gusta verte así por ese tipo –respondió Shido, el rubio paso sus brazos por el cuello de su amigo mientras recargaba su cabeza en el pecho de este.

–¿Por qué no mejor cerramos temprano? –propuso mirándolo con una sonrisa – y te invito a cenar en Honky Tonk –ante esto la expresión del rubio cambio.

–Ohh, gracias Shido –decía un chibi Gingi colgado del cuerpo de su amigo.

–Ahora a trabajar.

El rubio se separó de él mientras empezaba a darles de comer a los animales.


Cuando por fin ya habían cerrado se dirigían al restaurante de Paul, como era de esperarse el rubio iba feliz, a su lado Shido estaba igual de serio que siempre. Llegaron al lugar y se sentaron en las mesas del fondo, una chica se acercaba a ellos.

–¡Hola señor Ginji, señor Shido! – saludo Natsumi mientras sacaba una libreta de su mandil.

–¡Holaaa Natsumi! –saludo el rubio mientras Shido sólo inclinaba la cabeza en señal de saludo.

–¿Qué les voy a servir? –preguntó mirándolo de uno a otro.

–Yo quiero una pizza especial –pidió el rubio con ojos de borrego

–Un café para mí, y tráele una soda –respondió Shido mientras pasaba un brazo por arriba de la silla.

La chica vio esto y dejo salir una risita, desde otra perspectiva eso se vería como si Shido lo estuviera abrazando.

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