Memoria de Amor

XXXIV

Cuando Kara termino su frase unos helados se aparecieron frente a ellas, y Sebastián dijo —acaso escuche que están hablando de mi, Stephanie se quedo sorprendida al verlo y casi nerviosa, ella dejo caer el helado con su mano, sin darse cuenta. Stephanie le ayudaba a limpiarse mientras Kara se carcajeaba, Stephanie dijo —lo siento—

entre una risa nerviosa Sebastián dijo —descuida no pasa nada—

mientras se limpiaba su camisa, con unas servilletas, Sebastián agrego —y cuéntenme ¿como pasaron la mañana sin mi?—

Kara comenzó ha hablar de todo lo que había hecho al lado de Stephanie, pero ella estaba distraída completamente y pensaba en lo que Kara había dicho, su cabeza retumbaba con cosas como «Sebastián, es imposible, o ¿no?, ¿una foto mía?, solo debe estar confundida»

Sebastián dijo después de varias veces al fin Stephanie escucho —¿es cierto? Stephanie—

ella reacciono y pregunto —¿que?— volviendo al presente.

—¿pasa algo Teff?

—no, perdona es que estoy algo... emocionada ya vámonos— dijo ella tomando a Kara de la mano y tomo camino, Sebastián noto que ella estaba extraña, pero las alcanzo llevándolas hasta el automóvil.

Al llegar al acuario, Kara estaba mas que emocionada, ella corría por todas partes, veía lo hermoso que era el lugar y gritaba que quería ser una bella sirena para convivir con los hermosos peces, habían criaturas de todos tamaños Stephanie le sonreía y hacia ciertos comentarios,

Sebastián sentía que algo andaba mal.

Kara la había pasado increíble, y cayo rendida cuando estaba en el auto de regreso a casa, Sebastián la cargo y la llevo hasta la habitación, Stephanie tomaba agua en la cocina y Sebastián salió de la habitación y dijo —cayo como tronco—

—si, ella parecía estar feliz— dijo Stephanie viendo a la pequeña en la cama

—y eso fue gracias a ti, creo que ella ya te ama mas que a mi— dijo su novio

—no fue nada Kara es una niña increíble

—si lo es, es muy lista

—tienes suerte de tenerla, yo siempre quise tener un hermano

Sebastián se quedo en silencio mientras se acercaba a tomar agua de la refrigeradora,

Stephanie dijo —creo que hubiese sido mas sencilla mi situación si hubiera tenido a alguien conmigo—

Sebastián cerro la refrié y dijo —yo estoy aquí para ti, y lo estaré siempre

—lo se— Sebastián la abrazo y Stephanie agrego —si tu me hubieses conocido antes, te hubieses quedado conmigo ¿verdad?—

—yo desearía haber estado para ti en ese momento, te prometo que estaré para ti siempre