Vaya dulzura!
Te pregunte una vez que podía decirte que no te hubiera dicho?
Mi pregunta vuelve a ser la misma, pero con otra luz.
Que puedo decirte, que no te haya dicho ya?
Eh crecido como un niño cansado de el mismo sermón católico todos los domingos.
Me eh vuelto aburrida. Cuando curiosamente, el aburrimiento es la mejor táctica de tortura frente a mi.
Estoy cansada y hastiada que las causas imposibles.
Estoy cansada de querer someterme ante ti. Sobre todo porque a ti no te interesa.
Y estoy bien con eso.
Y me gusta eso.
Que carajos quieres? Que demonios te falta? Porque? Porque no me sueltas de una jodida vez?
No.
Si...
Pero no. No esto no es todo tu culpa.
No, es cierto. Yo fui la terca. La que quería tener una gran historia de amor. Y tal vez la tuve.
Las palabras fueron buenas.
Las pajas excepcionales
Los sueños fueron tan dulces como la miel.
Pero carajo. Las partes malas fueron las peores.
Pero hasta lo peor fue bueno. Lo suficiente.
Me arrodille y me espose para ti. Expuse mi cuello y te di un cuchillo. Te roge que me mataras. Y no note que eras la persona incorrecta. Me nege a verlo.
Estoy cansada muñeca. Y no voy a seguir este juego mas. Pero tu tampoco deberías. Nadie es tan fuerte.
No guardes fantasmas.
