Maggie Lindemann - Pretty Girl
No había tenido más deseos de desaparecer de la faz de la tierra como en ese mismo instante. Ya había pasado las vergüenzas suficientes que cualquier humano estaría dispuesto a soportar.
Tal vez mi yo pasado en su vida anterior hizo algo realmente malo para que el karma se desquitara conmigo de esa manera.
- Oh Dios...- murmuro muerta de la vergüenza intentando tapar el agujero con mi mano aunque es posible que Zeus se haya llevado una buena vista de mi trasero en ese instante.
- Tranquila, puedo prestarte mi saco - dice mientras se acerca hasta donde me encuentro.
- ¿Sabes que técnicamente ya no importaría porque ya has visto mis pantis y además ya hemos llegado a mi casa?
- Estas en lo correcto - una pequeña sonrisa se dibuja en sus labios mientras entramos a mi apartamento.
- Colocate cómodo yo.. iré a cambiarme de ropa y por el botiquín - trago saliva y lo veo sentarse en el mueble.
Sigo mi camino hasta mi habitación y saco de allí unos shorts junto a una camisa blanca holgada. Tomo el botiquín en mis manos y me dirijo de nuevo hasta la sala en donde lo encuentro mirando fijamente una de mis fotografías para un evento social que hizo hace dos años mi padre.
- Acá está el botiquín - me siento a su lado y saco las cosas de allí.
- ¿Es tu padre? - enarca una ceja.
- "Era" mi padre - lo corrijo en ese momento.
- Lo siento no debí mencionar ese tema.
- Ya da igual, ahora déjame curar la herida - saco los algodones y los impregno con un poco de alcohol mientras los paso por la zona afectada.
- ¿Porque no estudiaste algo relacionado con la medicina?
- Mi padre escogio la carrera por mi,nunca le intereso lo que mi hermana y yo quisiéramos, organizaba ese tipo de eventos para conseguirnos un esposo millonario, como si pertenecieramos a la época antigua, realmente ridículo.
- ¿Nunca le hablaste de lo que realmente querías en tu vida?
- Hablar con papá era como tratar con un penpano de hielo, él estaba encerrado en su mundo de normas y vida perfecta. Nunca se dedicó a nosotras como una familia normal.
Descubrir que papá era ese hombre me costó mucho, aveces tenía pesadillas pensando en que nos haría daño a mi y a mi madre tal como lo hizo con Aless. Fue un momento difícil para todas, al final mamá no soporto y ella misma decidió buscar solución a sus problemas de salud.
En cuanto a mí tuve que dejar la vida que lleve años en esa casa y empezar a creer que las personas no siempre aparentan lo que son.
- Dalila vales más que cualquier otra cosa.
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PLACER GRIEGO
RomancePor una venganza Zeus Areleous decide buscar a la candidata perfecta para ser su esposa, y así vengarse de la mujer que años atrás le rompió el corazón convirtiéndolo en el hombre frio, arrogante y poderoso que es. La familia Areleous es una de las...