vint-i-cinc°

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Me acerco a él, que aún sigue quieto, y lo beso. Con ganas, tomándolo con fuerza de la cintura y él se tensa, encogiéndose de hombros mientras cierra los ojos y sigue el beso.

Yo por lo contrario, tengo los ojos abiertos, detallando cada gesto, lleno de ira. Siento cómo sus manos se deslizan por mi costado y se quedan en mi rostro, apretando mis mejillas.

El beso sigue siendo rudo, pero me separo con brusquedad por la falta de aire. Me alejo unos pasos y lo miro aún con gesto enfadado, él abre los ojos y pestañea un par de veces.

De repente, noto que su semblante se vuelve triste y sus ojos brillan, pero yo me voy, dejándolo allí, solo. Escucho que me llama pero yo continúo caminando, hasta que salgo de la casa por la puerta principal.

🙈

Tengo un dolor de cabeza flipante. Siento como si me dieran con un martillo en la frente y las sienes. No lo entiendo, apenas bebí poca cosa... Miro la hora en mi teléfono y son las doce del medio día, es lunes, y me da igual. No pienso ir al instituto. Apenas puedo mantenerme con la cabeza en alto cinco segundos. Vuelvo a cubrirme con las sábanas y caigo dormido en seguida.

Pero siento como si solo hayan pasado unos minutos cuando oigo el estruendo de la puerta de mi habitación y sé que es mi madre.

-¿Se puede saber dónde mierda estabas anoche?

-Shhh. No chilles...

-¡Grito todo lo que me de la gana, Joshua, dime dónde estabas!

-En casa de Jenna - murmuro aún bajo las sábanas.

-¿A esas horas?

-Me había hecho una fiesta, te lo dije cuando llegué del instituto el viernes.

-Tú no me dijiste nada.

-Claro que te lo dije, Laura. No es mi culpa que no prestes atención cuando te cuento algo. Ahora déjame en paz, quiero dormir, ya estoy mayorcito y tomo mis propias decisiones.

-¿Ah, sí? Pues mientras vivas en esta casa vas a hacer lo que yo te diga incluso tengas veinte.

-¡Tú no eres mi madre y no me mandas!

-¡Claro que lo soy!

-Haberlo pensado cuando decidiste abandonarme.

-¡Yo no te abandoné!

-¿No? ¿Y qué se le llama a eso que haces cuando te divorcias y no te quieres hacer cargo de TU hijo porque NO LO QUIERES? ¿Eh? - salto de golpe de la cama, importandome poco estar solo con mi ropa interior.
Ella se queda en silencio.
-Ahora sal de mi maldito cuarto.

Y lo hace sin más, gruñendo y cerrando de un portazo. Yo me sostengo la cabeza por el dolor y me siento en la cama, cerrando los ojos con fuerza y suelto un grito de rabia.

Dispuesto a salir de allí, vuelvo a mirar la hora, son las 15:00pm.
Después de estar listo, salgo de casa y camino hasta una farmacia, compro unas pastillas para la resaca y camino hasta un supermercado donde me compro un jugo natural de naranja. Me tomo la pastilla y me dirijo al instituto, a esperar que salgan los chicos.

Sentado en una banca frente al edificio, veo como van saliendo los de primer siclo, es decir, desde primero y segundo de secundaria, y así hasta que empiezan a salir los de preparatoria. Veo a Ashley hablando con un chico y cuando me ve, se despide agitando la mano y corre hasta donde estoy.

-¿Por qué te fuiste sin decir nada? - pregunta nada más abrazarme.

-No me sentía bien.

-¿Y por qué no has venido hoy? - pregunta apoyando su cabeza en mi hombro.

-Me acabo de levantar.

-Tyler te estaba buscando.

-¿Qué? - suelto con tono alarmado -, ¿para qué?

-No lo sé, no dijo nada. Solo llegó, preguntó por ti y cuando le dijimos que no habías venido se marchó y no lo vi más.

-¡Josh, hijo de tu puta madre!

-Brendon, no chilles, cabrón.

-¿Dónde te metiste ayer?

-En mi cuarto bajo mi sábana.

Él me mira con gesto irritado y yo lo imito. Se nos unen Jenna y Sarah, que me miran con preocupación.

-Jish... - murmura Jenn.

-¿Cómo estás, cariño? - pregunta Sarah.

-Con ganas de pegarme el balazo.

🙈

¿De qué querrá Tyler hablar conmigo?

Tyler se fue muy cabreado y llorando anoche. ¿Qué pasó cuando entraste, Josh?

La pregunta de Jenn resuena en mi cabeza haciendo que las sienes vuelvan a doler. Ya casi es de noche y solo recuerdo haber llegado a esa fiesta, charlar con los chicos y beberme unas cervezas y otras cosas. Nada más aparte de lo que me dijo Jenn, claro.

Cojo mi celular y entro a Whatsapp, viendo los mensajes que no he contestado. Brendon, Ashley, Jenna. Y en el grupo, pone "Tyler salió".

¿Qué cojones hice anoche?

Voy a su contacto y le envío un mensaje, pero no le llega avisandome de que me ha bloqueado. Hay que joderse. Decido llamarlo, pero no contesta.

Opto por enviarle un mensaje a Jenna.

Has hablado con Tyler?

No, por qué?

Me ha bloqueado y necesito saber qué pasó anoche

No recuerdo haberle hecho nada

A mí tampoco me contesta los mensajes. Joder, Josh... seguiré intentando y le digo que hable contigo

Gracias, de verdad

Chao

Recostado en la cama mirando al techo, recuerdo el CD de esa banda que le gustaba. Voy hasta el cajón bajo el mueble de la ventana y lo busco. Cuando lo encuentro, enciendo mi portátil y vuelvo a recostarme abriendo el plástico envoltorio. Una vez puesto dentro del aparato, bajo el volumen y dejo que cargue, echándolo a un lado. Las canciones empiezan a sonar y yo cierro los ojos concentrándome en la letra.

-Cameron...
-¡Josh, espera!

Ojos tristes.

Y despierto de golpe, con el solo de batería y guitarra de fondo. Estaba en la fiesta, Jenna gritaba y yo caminaba por el pasillo. Tyler frente a mí con ojos tristes, a punto de llorar. Y no recuerdo más.

Me voy la en menos de dos semanas. Necesito terminar bien con Tyler. No puedo hacerle esto, ni tampoco a mí. Probablemente no lo vea en todo el verano o quizá nunca más...

-Josh... - la suave y tímida voz de Abigail irrumpe en la habitación.

La música se ha acabado.

-Ven, pequeña.

-¿Quieres cenar?

-No, no tengo hambre.

-Son alitas picantes con salsa barbacoa.

-Es que me duele la pancita, y no quiero comer nada - le pongo cara triste.

-Vale... Tú te lo pierdes - dice y sale de la habitación.

Yo vuelvo a reproducir la música del CD en el portátil y conecto los audífonos. Esta vez sí le presto atención a cada una de las canciones y me quedo sin palabras. Es una obra de arte.

Siento la necesidad de llamar a Tyler. Y cuando tomo mi teléfono para hacerlo, vibra y en la pantalla aparece su nombre.

el chico del blog {Jøshler}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora