Mi Canela |J.C|

VIII

Han pasado tres meses, y no he vuelto a ver a Ángel Camarena, casi tengo ocho meses de embarazo, y todo va muy bien, como quería, el bebé será niña, y voy a llamarla María Violeta, María por la virgen, y Violeta, por la mamá de Alan. Mi mamá me está enseñando a tejer para hacerle ropa, le compramos ya varias cosas, y muchos regalos, la mayoría de los que me han regalado mis hermanos son de color azul.
-Un color no define tu sexo, tampoco tú sexualidad. -Dijo mi hermana; Marián y reí, siempre nos dijeron eso, desde que somos pequeños, a mi hermano le encanta el rosa, y es heterosexual.
-Gracias hermana, me encanta. -Sonreí, era un traje muy bonito.
-Y mi sobrina, ¿cómo está? -Preguntó mi hermano acercándose a mi vientre ya crecido.
-Yo bien hermano, ¿y tú cómo estás? -Dije sarcásticamente, reímos.
-Perdón hermana, ¿cómo estás? -Besó mi mejilla en forma de saludo.
-Bien, más pesada que nunca, pero voy bien.
-Que bueno. ¿Esta princesa tiene hambre?
-No, creo que no.
-¿Estas bien?
-Si, gracias.
-Me encontré a Jos en la entrada. -Suspiré cansada.
-Iré a ver qué quiere. -Me levanté del sillón verde manzana de la sala de la casa de mi mamá y fuí a la puerta. -Hola. -Lo saludé, estaba volteado, dio media vuelta, se veía... guapísimo, se cortó el pelo, y tiñó su cabello a un color más claro, era café, pero uno oscuro.
-Hola, ¿puedo...puedo pasar? -Me preguntó y rió un poco, yo hice lo mismo.
-Vamos al jardín mejor, toda la familia Robledo de Castro está adentro y... -Él volvió a reír, pero asintió, fuimos a donde le indique.
-¿Cómo están?
-Bien, el parto está programado para dentro de seis semanas, te llamaré cuando se desprenda la placenta.
-Mi papá quiere que vayamos a visitarlo, antes de que nazca la pequeña, quiere verte embarazada.
-¿Puedes mañana?
-Queria llevarte ahora mismo. -Rió un poco, algo estaba raro, José no reía mucho, no después de que sus padres se separaron, tampoco veía tanto a su papá desde lo mismo de su separación.
-Tambien quería decirte que estoy llendo a una terapia, con un psicólogo, un primo de Alonso.
-¿Como se llama? Talves yo también vaya, necesito terapia, vaya que cambiar mi cuerpo por un hombre, que idiotez. -Reí, él se puso serio. -No quería decir... -Me interrumpió.
-No, tranquila, tienes razón. ¿Vas a quitarte los plásticos cuando el bebé nazca?
-Creo que si, tengo que analizar la situacion.
-Al parecer ya te acostumbraste a ellos.
-Un poco.
-¿Vamos?
-¿A donde? -Pregunté, no le estaba prestando demasiada atención, solo veía su nueva persona, rió, me perdí aún más
-Con mi papá.
-Ah, si, claro, va...vamos -Reí. Entré a la casa solo un poco para tomar mi bolsa, fuimos en su auto, ya de camino le envié un mensaje a mi mamá explicándole a donde iba.
"Iré a casa del padre de José Miguel, quiere verme antes de que nazca la bebé, volveré pronto, te amo mamá."
Pocos minutos después de estar en el tráfico llegamos a una casa, era grande, y tenía un jardín precioso. Entramos juntos.
-¡Mi hijo pródigo! -Saludó un hombre bajando las escaleras, claramente era su padre, el aún mi suegro. José se acercó a él y se abrazaron en forma de saludo.
-Hola papá.
-Huy, ella debe ser tu esposa. -Me miró y sonreí amable, él también lo hizo.
-Si, papá, ella es mi hermosa esposa,____ Robledo de Castro.
-De Canela -Agregó el señor.
-En dado caso sería la señora Mariana, la madre de Jos.
-Ella y yo ya nos separamos. -Jos dejó de sonreír, era un duro capítulo en su vida, y no quería incomodarlo diciéndole a su padre que también nosotros estábamos en eso.
-Entonces creo que si soy la señora de Canela. -Reí un poco y tomé del brazo a José, lo miré y él a mí, sonreía.
-Ya está lista la comida, ¿Pasamos a la mesa? -Preguntó el señor, asentí, José también. Comimos y conversamos de las cosas que hacía José Miguel de pequeño.
-No, espérate, cuando tenía 7 años, me dijo que le gustaba una niña, era una niña muy bonita, siempre llevaba un listón en sus dos coletas. ¿Y sabes que hizo para "conquistarla"? -Negué con la cabeza. José ya reía, seguro era una anécdota graciosa. -La empujó de la resbaladilla que terminaba en un charco de lodo. -Reimos los tres. -Después mandaron a traer a sus mamás y, lo demás es historia. -Reimos, era gracioso.
-Bueno, bueno. No eh contado lo de esa niña Fernanda. -Bebió de su copa con agua. -Eran novios cuando tenían 10 años, y el hermano de ella casi mata a mi hijo cuando se enteró que eran novios. El pequeño Jos no sabía defenderse, pero lo hizo bien.
-Lo empujé, calló al suelo y salí corriendo a mi casa. -Dijo Jos con una risa, yo reí igual. -Pero no importa, ya ninguna mujer importa, solo tú. -Me dijo y tomó mi mano, la besó y sonrió. Más horas pasaron, y nos quedamos a dormir en casa de su padre, quería compañía, vivía solo, todas las amantes que tuvo después de la mamá de José lo dejaron. Dormimos en la misma habitación, aunque José lo hizo en el suelo, no podía dormir, no sabiendo que estábamos en la misma habitación y no en la misma cama.
-Niñita... -Llamó mi atención.
-¿Qué pasa?
-¿No puedes dormir?
-No, no logro acomodarme, el bebé no me deja. -Mentí, pero era una buena excusa.
-Puedo ir por más almohadas, para que te acomodes y puedas dormir.
-No, no... Había pensado en que subieras a la cama.
-No quiero incomodar
-Te lo estoy pidiendo, sube, porfavor. -Le pedí, podía jurar que estaba sonriendo, se levantó del suelo, desinflaria el colchón, pero llamé su atención.
-Dejalo, ya lo haremos mañana. -Me senté en la cama. Se acostó y me dió la espalda.
-Buenas noches. -Dijo y se cubrió con las cobijas.
-Buenas noches. -Le respondí y fui al baño, esto de estar embarazada era complicado, tengo que hacer del baño cada 15 minutos. Total, nos dormimos cada quien por su lado. 6:39 AM, desperté por el movimiento de la cama. -¿Que pasa?
-Nada, duerme.
-Dime. Es Domingo, no tienes trabajo. -Suspiró, me senté recargando mi espalda en la cabecera de la cama, él lo hizo igual.
-Tengo miedo. -Me sorprendí, nunca quería hablar de sus emociones.
-¿Porqué?
-De ti, de mi... De nosotros.
-¿A qué te refieres?
-No quiero divorciarme de ti, te amo.
-No me amas -Afirmé.
-¿Entonces que siento? ¿Lástima?
-No sé.
-¿Sabes que es el amor exactamente? Nadie lo sabe.
-Alan me ama, desde niños.
-Eso ya es una obsesión, lo mío es amor, pasamos del odio a esto, a amarnos.
-Yo no eh dicho que te amo.
-¿Cómo?
-No, lo que Alan siente por mí es lo que yo siento por ti.
-Me estás volteando las cosas
-Si, Alan conmigo es el espejo de tu y yo. Dí muchas cosas por ti, igual que él por mí, intentó olvidarme y yo lo intenté contigo. Esperé años para que me amarás, y Alan esperó por mi.
-¿Me dices que estarás con él? -Alzó la voz un poco y se levantó de la cama, yo hice lo mismo.
-Talves.
-No,tu me quieres a mi, ¡me amas a mi!
-Talves.
-¿Es lo único que vas a decir? ¿"talves"?
-Talves.
-No juegues con esto, con nosotros
-El que comenzó jugando fuiste tú, yo solo fui una Barbie de carne y hueso, querías que hiciera todo lo que quisieras
-¡No!, te amo, desde siempre, desde niños cuando te molestaba diciéndote "fea", cuando te gritaba que eras más fea que una lombriz. -Recordé como me decía todo eso, cuando él y sus amigos le lanzaron huevos a la casa de Alan después de que me robó un beso. Cuando le aventaron sangre de cerdo en el baile de graduación para que no entrara al baile conmigo. Cuando sus amigos pusieron un pequeño tiburón en la piscina cuando las de natación no me aceptaron. Cuando a el profesor de artes plásticas de tercer semestre que me reprobó le poncharon todas las llantas y además pusieron un mapache muerto en su auto ese mismo día. Todo había sido... ¿por mi?
-José Miguel... -Fue lo único que le dije, no sabía que decir.
-Te amo, en verdad.
-¿Porqué tu mamá me dijo que yo te daba asco? ¿Porqué tienes una amante? ¿Porqué me tratabas tan mal?
-No...no sé, el terapeuta me dijo que era porque me hacía el fuerte, que no quería que me lastimaran, que me lastimaron tanto en el pasado que ya no lo soportaría, era como un escudo.
-Canela, porfabor...
-Amo cuando me dices "Canela", ¿pero sabes que sonaría más bonito? -Se acercó a mí, no pide alejarme, no quería.
-¿Que?
-"Mi Canela", recuerdo que cuando nos hicimos novios me decías así, pero, nos casamos y todo cambió.
-No cambió por mi, créeme.
-Talves yo tuve la culpa. Si te hice algún daño quiero pedirte perdón, un perdón sincero, en verdad.
-Yo ya te perdoné, pero, ¿tu ya te perdonaste?
-No puedo perdonarme que le hice tanto daño a la única mujer que eh amado desde niño.
-Perdonate José...
-Mis amigos me dicen Jos, puedes decirme así.
-No sé si me acostumbre
-Es de cariño, si me tienes siquiera un poco de cariño, llámame así. -¿Un poco de cariño? Te amo más que nadie en el mundo.
-Seguro. -Dije indiferente. Nos quedamos despiertos viendo una pelicula, y otra hasta que dieron las 9:20 y desayunamos con su padre. Fuimos ahora a visitar a su madre y hermana, era "Domingo familiar", Fernanda no vivía con su mamá, iba con su esposo y su suegra a visitarla.
-¡Mi niño! -Saludó a Jos con alegría, Fernanda también salió junto con su esposo. Él me saludó muy amable, simpre nos llevamos bien, decían que él quería ser mi novio en la universidad, pero yo ya era "novia" de José...Jos. Él le presentó a su hermana para que "me dejara en paz", además, compartimos que la mamá de los "Canela Rivera" nos odia, dice que "no somos buenos para sus hijos" y que "vamos a engañar a sus hijos" Y yo lo hice, pero después que él.
-Hola linda.
-Hola Dave.
-Te ves bien embarazada.
-Gracias, tu te ves bien con cabello largo.
-¡___! -Me saludó su mamá feliz (la mamá de Dave) me abrazó. Ella es amiga de mi mamá, pero hace mucho no la veía, desde que me casé con Jos, desde la boda.
-Hola Gemma
-Estas preciosa, mírate tan embarazada y llena de vida. -Me dijo sonriente, sonreí igual.
-Gracias, tu también te ves muy bien, ¿adelgasaste?
-¿Lo notaste?
-¡Claro! Te ves divina
-Fueron 14 kilos, casi 15
-Estas muy bonita.
-¿Y tu? ¿Cuántos has subido con el embarazo? -Reí un poco
-Los mismos que tú bajaste
José Miguel Canela...
-¡Mi niño! -Me saludó mi mamá y me abrazó, la extrañaba, lo admito, la abracé más fuerte. -¿Que pasa mi bebé?
-Te extrañaba ma'
-¿Seguro?
-Si, bueno...le dije a ____ lo que sentía por ella, que la amaba.
-¿Y?
-Creo que ya no me ama. -Me aferré más a ella.
-¿Como no va a amar a un niño tan hermoso como tú?
-La lastimé demasiado en el pasado, ya le pedí perdón, pero me dijo que debía perdonarme yo a mi mismo.
-Perdonate y ella te perdonará.
-Sé que no la quieres como nuera, pero si te dieras la oportunidad de conocerla verías que es una hermosa mujer.
-Te hizo daño, y yo sé que la amas desde pequeño, eras divino cuando niño, ¿porqué no fueron novios entonces?
-Cosas de niños, la trataba mal, pero cuando alguien la trataba mal... ellos resultaban más afectados.
-Yo sé, te metiste en tantos problemas por ella
-Y nunca lo supo.
-Por eso me cae tan mal. Creí que con Fernanda la habías olvidado, por eso me agradaba tanto.
-Amo a ____ mamá, en verdad.
-¿Quieres que hable con ella?
-¿Lo harías?
-Por ti daría mi vida mi amor, hablaré con ella, ¿si?
-Tratala mejor mamá, porfa.
-Lo haré por ti hijo.
-Y a Dave también
-Está bien. Lo intentaré.
-Él ama a mi hermana, sino lo hiciera te juro que yo mismo lo trataría mal.
-Vamos adentro. -Nos separamos del abrazo. Miré a ____, sonreía, era hermosa.
-¿Que pasa? -Me preguntó al notar que la veía
-Nada, eres muy bonita. -Rió apenada un poco.
-Mentiroso.
-No, en verdad. ¿Porqué crees que no te pedí que te hicieras ningún cambio en el rostro?
-Solo en mi deforme cuerpo. -Rió de la misma manera.
-No, no quise... -Me disculpé, pero ella me interrumpió.
-Tranquilo, era una bromita. -Sonreí, ella también.
-¿Me ayudas con la comida? -Le preguntó mi mamá a ella.
-Te habla tu mamá. -Me dijo ____, reí un poco.
-Te dijo a ti. -Le respondí.
-¿Vamos? -Volvió a preguntar mi mamá
-Si, si claro. -Fueron a la cocina juntas, seguro hablaría con ella.