XXVIII

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Al día siguiente…
-Buenos días chicos. Ustedes ya me conocen, soy Hernán Téllez, soy el director de la obra, me presento porque tenemos una nueva compañera que es ¡Danna Paola! —Me apuntó y todos aplaudieron.
-Gracias, en verdad muchas gracias por permitirme estar aquí. No sé qué piensen ustedes, pero para mi es una gran oportunidad, es lo único que me faltaba por hacer. —Y en parte si, ya había sido locutora, actriz en una novela, le presté mi voz a Rapunzel, fuí un meme, actué en una película, y obvio lo más importante, ya fuí mamá. Además de productora en uno de mis discos. -Y en verdad, voy a hacer mi personaje tan bien que ni siquiera van a notar que soy nueva en esta obra. —Sonreí y volvieron a aplaudir.
-Él va a ser uno de tus compañeros principales; Roger González, me dijo que ya se conocían.
-Si, ya nos conocemos de unos años. —Le dije y saludé a Roger con dos besos en las mejillas.
-El día que me dijiste que ibas a participar no me la podía creer, pero sé que vamos a hacer un gran trabajo.
-Sé que así será Roger. —Le sonreí amable. Hicimos los ensayos, las coreografías, las escenas de drama, todo como si se tratara de la obra y no de un ensayo, todos llevaban sus años en la puesta en escena, así que no se les dificultó tanto como a mi un par de escenas. Pero al final el director se levantó y aplaudió.
-Muy bien todos, y… wow, Danna, para ser tu primer ensayo general lo hiciste muy bien. —Me felicitó.
-Gracias, Hernán.
-Tomense 15 minutos y otra vez la hacemos. —Nos señaló, escuché suspiros de cansancio, yo también estaba cansada.
-¿Que te pareció? —Me preguntó Roger y asentí bebiendo de mi botella de agua.
-Muy bien, la verdad no me imaginaba que sería así de… —No sabía que palabra usar.
-¿Cansado?
-No, explosivo, genial, mágico.
-Lamento informarte que estás enamorada del teatro. —Dijo y reí un poco, él también lo hizo.
-Gracias por la información. —Reí mientras lo decía.
-¿Y como está Jos?
-Me dijo que vendría a acompañar a un amigo que viene a ver a un "amigo".
-En pocas palabras te viene a ver a ti.
-No, dijo que tenía una amiga aquí, y que la vendría a ver a ella. —Intenté sonar lo más simple, pero estaba muriendo de celos por dentro, desde que me lo dijo.
-Oh, vaya. Míralo ahí está. —Dijo y vió a la puerta del teatro, yo no lo miré, le dije que no me hablara. -Iré con él si no te molesta.
-No, claro que no. Voy con Xavier, debe estar en el camerino. —Le dije y sonreí, tomé mi botella con agua y mi pequeña toalla para el sudor y me fuí al camerino. Ahí estaba Xavier platicando con la maquillista, ella era tímida, pero mi amigo español era buenísimo para quitarle la timidez a las personas.
-¿Necesita algo señorita Danna?
-No linda, sólo necesito que me dejes a solas con este tío. —Le dije amable, ella se fue y cerró la puerta del camerino. Me acosté en el sillón que había ahí.
-¿Cansada?
-Mucho, pero en diez minutos debo regresar, y quiero descansar siquiera esos 10 minutos.
-Está bien. ¿Quieres algo?
-¿Me masajeas aquí? —Le pregunté y reí un poco, él asintió y se acercó a mí, comenzó a masajear mis hombros y la parte entre el cuello y el hombro.
-¿Ahí?
-Mjm.
-¿Lo hago más fuerte?
-No, así vas bien. Este talento no te lo sabía. —Le dije con una risa y me quejé, dolía un poco.
-Perdón, lo haré más suave.
-Y más lento.
-Estas muy dura. —Dijo y masajeo. Comenzó a besar mi cuello lento. Me separé de él.
-No Xavier, eso no.
-¡Vamos! Sólo un poco. —Me dijo y se acercó a mí, caminé para salir, ví a Jos llendose, no creo que me buscara a mi, sino a su amiga. Fuí de nuevo al ensayo, Jos hablaba con una risada, ella rió y él también, ella jugó con su pelo. Saqué mi teléfono y lo llamé, era el de _____, no el de Danna, arruinaría su conversación. Vió su pantalla y sonrió, le dijo algo a la chica y asintió, se puso el teléfono en el oído, en seguida colgué. Regresó con la risada, le dijo algo y pude ver que rió un poco. Volví a sacar mi teléfono pero para hacer una transmisión en vivo.
-¡Hola! Estoy en el teatro ensayando mi papel para la obra de teatro que les dije, pero no estoy sola, miren quien está aquí. —Grabé a Roger que estaba entretenido en su teléfono, reí.
-¡Hey Roger! Saluda. —Le dije y saludó, bebió de su botella con agua. -Es en vivo, por si te interesa. —Le dije y rió un poco, yo hice lo mismo. Se acercó a mí.
-¡Hola! Perdón la facha, pero estamos en ensayos y ya llevamos como cuatro. —Reí un poco, pero no quería desmentirlo.
-Te ves galán. Mañana no se olviden de enviarme todas sus preguntas con el hashtag; hashtag DannaResponde. Voy a contestar sus preciosas preguntas. ¿Algo que decir? —Le pregunté a Roger.
-Nada, sólo que vengan a ver la obra cuando esté en cartelera, es muy importante apoyar el teatro para que se siga haciendo… y para que yo no me quede sin comer, al igual que todo este bello elenco.
-Siganlo en sus redes sociales y… ¿que? —Me pregunté a mi misma, Roger rió y me miró, yo hice lo mismo. -No, nada, solo no olviden enviarme las preguntas, un beso y adiós. —Mandé un beso y terminé la transmisión.
-¿Te invito a comer? —Me preguntó Roger y asentí.
-¿Solo tu y yo?
-Si, o puedes llevar a Xavier para que te sientas más cómoda.
-No, confío en ti. —Le dije y sonreímos. Seguimos con el ensayo, terminamos justo antes de la hora de la comida. Xavier fue a comer con la maquillista y yo con Roger. Me contó cosas sobre su mamá y que no quería que se viniera a la Ciudad de México, pero después de tiempo Roger la mandó a traer. Yo le conté como me divorcié, pero no sabía que me casé con Jos.
-Intentamos volver a empezar, pero todo nuestro pasado nos perseguía. Un día Xavier se quedó a dormir conmigo, yo ya tenía a la niña, y su papá fue a verla, entonces me dijo que si me gustaba y tonterías así. Terminamos.
-¿Y estas con Xavier?
-No, sólo somos amigos, y vivíamos juntos, pero después de que mi hija se desmayó y de que me enteré que ya lo había  hecho anteriormente y Xavier no me dijo nada dejamos de vivir juntos.
-¿Ni sexo?
-No le dirás a nadie, júralo.
-Lo juro. —Dijo y levantó su meñique, lo junté con el mío, lo solté.
-No, la noche anterior a el día que terminé con el papá de mi hija, fue la primera y la última, pero él nunca se enteró de que estuve con Xavier.
-¿Como se llama? Siempre te refieres a él como "el papá de mi hija" "El papá de Violeta" o "Mi ex" ¿te duele tanto recordarlo?
-No, porque hay algo que no sabes.
-Dime.
-Jos y yo nos casamos, pero él no sabe que yo soy Danna.
-¿No te llamas Danna? —Negué con la cabeza.
-Soy _____ Robledo de Castro, soy la ex esposa de José Miguel Canela, y mamá de María Violeta Canela Robledo de Castro.
-Wow…! ¿Jos por qué no sabe?
-Me hubiera quitado a la niña, talves él no, pero su familia si, lo sé.
-¿Por?
-No le gusta nada del espectáculo. A un primo suyo que es bailarín no le dirigen la palabra, le quitaron todo, ellos no me pueden quitar nada, exepto lo más importante para mí que es mi hija.
-Puedo hablar con él.
-No, no quiero decirle.
-¿No le dirás?
-A su tiempo, todo a su tiempo.
-¿Entonces por que sales con él?
-Creo que está enamorado de Danna.
-¿Y tu? ¿Sigues enamorada de él? —Suspiré cansada y asentí.
-Más que nunca, tengo una cena con él hoy.
-¿Danna o ______?
-______, no sé qué quiere decirme.
José Miguel Canela…
-Ahí está mi amigo, iré con él. —Me dijo Alonso y asentí.
-Seguro. —Alonso se fue, ví a Danna platicando con Roger, él me miró y me saludó, ella ni siquiera volteó a verme, Danna se fue.
-¡Hola Jos! —Me saludó Roger.
-Hola, ¿como estas?
-Bien, un poco cansado por el ensayo, y eso que llevamos apenas uno. —Rió.
-¿A donde fue Danna? —Le pregunté, él rió un poco.
-A su camerino, con Xavier.
-Iré con ella, ¿puedo?
-Ve por atrás, no podemos recibir  visita. —Asentí y palmee su espalda. Fuí por atrás a las habitaciones, encontré la suya, decía "DANNA PAOLA" sobre una estrella dorada. Tocaría, pero escuché ruidos.
-¿Ahí?
-Mjm.
-¿Lo hago más fuerte?
-No, así vas bien. Este talento no te lo sabía. —Le dijo con una risa y se quejó, seguro se la estaba cogiendo, y yo aquí buscándola como idiota.
-Perdón, lo haré más suave.
-Y más lento.
-Estas muy dura. —Se quejó ese imbécil, comencé a caminar para irme, escuché que abrieron la puerta, seguí sin mirar atrás. Fuí con una bailarina que estaba ahí, sola.
-Hola. —La saludé.
-Hola, tu eres Jos.
-¿Soy famoso? —Rió ella un poco, yo hice lo mismo. Jugó con un mechón de su pelo, pero por timidez, no por seducción.
-¿Eres nueva?
-Si, algo hay de eso, mi amiga no pudo venir hoy por enfermedad y le hice el favor de suplirla.
-Oh, ya veo. Por eso no hablas con nadie.
-Exacto, si. —Rió nerviosa. Mi teléfono sonó, era una llamada, era _____, sonreí contento.
-¿Me permites? Es una llamada importante. —Ella asintió, me alejé un poco de ella y contesté. -Hola linda. —Dije saludandola, pero no escuché ruido. -¿Hola? —Vi la pantalla del teléfono, había colgado. Regresé con la chica. -No era nadie, o creo que era el señor mudo de mudolandia. —Le dije y rió. -¿Es la única vez que estarás aquí?
-Si, además, sólo estoy de vacaciones en México. Hago la misma obra de teatro, pero en Broadway.
-¿En verdad?
-Si, vine a visitar a mi mamá, ambas somos de aquí.
-Listo, ¿nos vamos? —Me preguntó Alonso.
-Si, un gusto linda. —Me despedí. Alonso se fue a su trabajo, y yo fui a visitar a una persona.
-¡Jos! ¿Como estas hijo? —Me preguntó mi padre, me dió un abrazo.
-Bien papá, necesito un favor.
-Claro hija, vamos a sentarnos. —Me indicó, así lo hicimos.
-¿Aún eres amigo del piloto?
-Si, Augusto Cervantes. ¿Por qué?
-Bueno, pues…necesito un favor.
-Claro hijo, ¿que necesitas?
-Necesito un jet.
—Segundos, minutos y horas pasaron y fuí por ella a casa de su madre.

¿Para qué creen que Jos quiere un jet privado? ¿Volará junto a su cita?
Voten y comenten!!
¡¡LAS AMO CON TODO ESTO QUE LA GENTE LLAMA CORAZÓN!!

Mi Canela |J.C|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora