Mi Canela |J.C|

XXII

José Miguel Canela…
-¿Exageré? ¿Huelo mucho a loción?  Porque eso tampoco es bueno. —Le pregunté a mi mamá.
-¿Bueno para que? ¿Tienes una entrevista de trabajo?
-No ma', voy a desayunar con una amiga. —Dije viéndome al espejo, se acercó a mí con la niña en brazos.
-Mjm, una amiga. —Reí un poco.
-Me gusta, es muy bonita.
-¿Como se llama? ¿La conozco?
-No, es amiga de Jesús.
-¿Jesús?
-López, el del caso del año pasado, el de su amiga la manager y el problema que tuvo con la ropa de su artista.
-¡Ah, ya! Es un buen muchacho.
-Se llama Danna, es muy bonita. —Volví a decir, y es que en verdad lo era.
-¿Olvidaste a _____? —Me preguntó seria, dejé de sonreír.
-No quiero hablar de ella.
-¿Mamá? —Preguntó María jugando con un mechón del cabello de su abuela.
-¿Quieres ver a mamá? —Le preguntó mi madre, ella asintió. -¿Hace cuanto no la ves?
-Mamá, déjala.
-¿Para eso la quiere? ¿Para abandonarla con su madre? Seguro la deja para irse con otros hombres.
-Mamá, no la juzgues, eso estoy haciendo yo en este mismo momento. —Besé a mi pequeña y después a mi mamá. -No vayan a salir solas, porfabor. —Había visto en televisión que los feminicidios habían aumentado un 14.23%, y no quería que le pasara algo a mi mamá, y mucho menos a mi hija.
-Si hijo, no lo haré.
-Gracias, las amo.
-¡Papi! —Me tendió los brazos para que la cargara, lo hice.
-Papi tiene que irse.
-No. —Me abrazó.
-¿Por qué no la llevas contigo? —Me preguntó mi mamá. -No me molesta cuidarla, pero talves tu cita deba saber que tienes una hija.
-La conocerá después. Cariño, hoy no te puedo llevar conmigo, pero cuando llegue te voy a llevar a las hamburguesas que tanto te gustan ¿si? —La pequeña asintió con la cabeza baja.
-No estes triste mi amor, te compraré un helado… no, dos helados. —Ella asintió la cabeza feliz.
-Bueno, te dejo con la abuelita. —La bajé y comenzó a caminar por el departamento.
-Ya vete hijo, es tarde.
-Si, cuídense, las amo. —Me volví a despedir. Fuí en mi auto al lugar de comida cerca de la oficina, 10:34 y Danna no llegaba, le llamé pero me mandó a buzón de voz.
-Hola, perdón por llegar tarde, pero anoche me dormí tarde, no puse la alarma y… perdón. —Rió un poco, y besó mi mejilla en forma de saludo, acto seguido se sentó en la silla frente a mi.
-Si, no importa. No sabía que usabas lentes.
-Casi no los uso, tengo miopía, pero soy independiente. —Bromeo y reí, ella también. -¿Ya pediste algo?
-No, te estaba esperando.
-Ya no esperes más. ¿Y tu hija como es? —Me preguntó y sonreí.
-Es hermosa, tiene unos ojos miel, es lo único que sacó de mi según mi mamá.
-¿Y tu mamá quiere mucho a tu hija?
-Demasiado, dicen que disfrutas más a los nietos que a los hijos, y creo que ese es el caso de mi mamá.
-A la mía también le pasó… —Se detuvo como si hubiera dicho algo malo.
-¿Tienes un hijo?
-Si… bueno, no.
-¿Osea como?
-Es complicado.
_____ Robledo de Castro…
-A la mía también le pasó… —Me detuve, hablé de más, no quería que preguntara mucho.
-¿Tienes un hijo?
-Si… bueno, no. —No quería negar a mi hija, la amo, y mi mamá siempre me dijo "ni a los padres ni a los hijos de les niega"
-¿Osea como?
-Es complicado.
-Explicame, tengo tiempo de sobra.
-¿No vas a trabajar? —Intenté cambiar el tema.
-No tengo muchos casos desde que dejé en quiebra el bufet de abogados de mi familia.
-¿Tenías un bufet?
-Era el presidente, pero los escándalos llegaron, en las noticias sacaron un vídeo donde  parecía que me estaba drogando. —Recuerdo perfectamente ese vídeo, fue el día de mi cumpleaños, cuando estuve en el hospital porque me atropellaron gracias a que lo ví teniendo sexo con otra en nuestra casa.
-¿Y lo estabas haciendo?
-Si, pero fuí al hospital por mezclar alcohol y pasarme de la cocaína.
-Un amigo murió por eso. —Jos nunca supo que Alan murió de una sobredosis.
-¿En verdad?
-Si, yo estaba en otro país dando un concierto y me dieron la noticia. —Recordé como ví a Alan en esa caja, no podía creer que era él, hasta que fuí a una terapia con un amigo de Freddy y llegó la aceptación. ¿Recuerdan a Ángel Camarena? Bueno, pues él también murió, unos enemigos de su "padre" lo mataron como venganza.
-¿Lo conociste es España? Tu eres española, ¿no?
-Si, y si. Lo conocí en Marbella, yo soy de ahí, éramos amigos desde chiquillos.
-¿Y Xavier?
-A él lo conocí en la playa en una excursión de la secundaria, estaba jugando americano con unos amigos. Después fuimos a la misma prepa y… lo demás es historia.
-¿Como conociste a _____?
-Era amiga de Xavi, ellos no sé cómo se conocieron. Pero intenté sacarla a una fiesta, la única vez que logre que saliera se subió a la habitación con Xavier y no salieron hasta el día siguiente, no sé si durmieron, si cogieron o no sé.
-¿Quieren ordenar? —Nos preguntó la mesera. —Miré la carta, aunque la conocía bien, casi todos los días desayuno aquí cuando vengo a la oficina.
-Un sándwich de pan integral, un café y un jugo de naranja porfabor, Gina. —Le pedí
-¿Usted caballero?
-Unos pan cakes, y una malteada, porfa.
-¿De que sabor?
-Vainilla…no, fresa, no, chocolate, no… —Reí.
-Traele una de fresa, y la bola de helado de los pan cakes que sea de menta con chocolate… ¿te parece? —Le pregunté, él asintió.
-Bueno, ¿es todo Danna?
-Si, porfabor. —Le pedí y se fue.
-¿Como sabes que el de menta con chocolate es mi favorito?
-No sé, talves soy una bruja. —Le dijé y le tendí mi mano.
-¿Que? —Preguntó y reí.
-Tu mano.
-Mmm… ¿sabes leer la mano?
-Mi abuela me enseñó. —Dijé y rió ahora él, me dió su mano abierta. No sabía leer la mano, pero él pensaba que era otra persona, así que si le decía todo lo que sé, creería que si sé hacerlo. -Tu línea del amor es larga, has tenido varios amores.
-Eso es obvio, nadie se me resiste. —Dijo y reí.
-Cállate, no me dejas concentrar. Veo dolor en tu infancia, sufriste por alguien… o por algo. —Él dejó de sonreír. -Una separación, ¿que se separó?
-Mi familia, mis papás.
-¿Te dolió?
-Mucho.
-Tambien veo un amor grande, de años, que está destruído. ¿Quien te ama? O mejor dicho… ¿a quien tú amabas? —Quería saber si aún me quería.
-A la mamá de mi hija supongo.
-No supongas. Debes cerrar ciclos, y si ya no la quieres debes decírselo.
-Pero ya no estoy con ella.
-Aun así, debes decírselo. Hace mucho no la ves.
-Cinco años.
-¿Te dejó a tu hija?
-No, me veo con su mamá para que me la dé, yo no eh querido verla, estaba enamorado de ella, hasta hace poco… —Lo interrumpí
-Yo no soy para ti. —No era vidente, pero sabía que después de eso iba a ir un "que te conocí"
-¿Como?
-Soy mala en una relación, y no me enamoro fácil. —Eso era verdad, no era de enamorarme en el primer minuto de alguien, si me gustaba de físico la persona, pero no me enamoraba.
-¿Crees que soy tan malo?
-Esto se va a escuchar estúpido, pero… no eres tú, soy yo.
-¿Estas enamorada de Xavier? —Ese podría ser un buen punto para que Jos no de enamoré de Danna, y si, me arrepentí de mi plan de enamorar a Jos y romperle el corazón. Sólo quería estar cerca de él, y sé que si lo buscaba como ______ se negaría a verme.
-No, pero no quiero un tío, no estoy en busca de un hombre, estoy bien así macho. —Estaba olvidando mi acento español, en toda la conversación era la primera vez que hablaba así.
-Entiendo, amigos entonces, supongo.
-Me parece bien. —Le dije y sonreí. Desayunamos y fuimos a la oficina. Estuvimos horas escribiendo dos canciones.
-Ésta se va a llamar… "Un show", no, "todo fue un show" ¿te parece? —Le pregunté a Jos antes de escribir el título.
-¿Mande? —Me preguntó, reí.
-¿En que pensabas?
-Nada, en la canción, me pasó.
-¿Te mintieron?
-Mentí, fue a mi ex esposa. Fingí que la quería… y si la quería, pero no de esa manera, no se si me explico.
-Si la querías, pero no como se lo mostrabas.
-Exacto, la quería más de lo que le decía, mucho más.
-¿Por qué?
-Tenia miedo.
-¿De qué?
-Que me lastimara.
-Ella te amó por muchos años.
-Yo no lo sabía.
-¡Vamos! Todos decían lo tonta que estaba ella por ti, por eso la hembra se fue a España, para olvidarte, intentó algo con Xavier, pero… —Me interrumpió.
-¿Como? ¿Ese idiota estuvo con ella? —Elevó la voz.
-Con esto sólo demuestras que la sigues queriendo.
-Talves. —Dijo bajando la voz.
-¿Entonces que haces aquí? Ve a su casa y dicelo.
-No puedo.
-Tu orgullo pendejo, ¿verdad?
-No… yo no estoy seguro si ella me sigue queriendo.
-Vale, vamos a su casa, yo hablo con ella. —Le dije y me levanté de la silla.
-¿Qué? No, ella no querrá hablar contigo, se caían mal.
-Me aseguraré que quiera. —Tomé mi bolsa y guardé las hojas en la carpeta que decía "Danna 👑 🇪🇸" y salí del lugar.
-Vamos, que yo no sé dónde vive.
-No, no, no quiero que vayas.
-Está bien, pero hablaras con ella. —El asintió y miró el reloj.
-Es hora de la comida, y le prometí a una reina que la llevaría a comer hamburguesas.
-A mi no me has prometido nada macho. —Bromeé, él rió un poco.
-Hablo de mi hija.
-Oh, claro. Bueno, iré a comer una súper ensalada para que en la noche pueda comer una enorme rebanada de pizza.
-¿Quieres venir conmigo?
-No, iré con una amiga, tranquilo.
-¿Es guapa?
-Le dicen "la sexy Irina", así que creo que si. —Mentí, iría a casa de mi mamá para comer con la familia, Laura se va a casar con su novio, Marián lleva 4 años de matrimonio, Sergio está casado, pero no tiene hijos a comparación de Marián que tiene 3, uno biológico y dos adoptados.
-Oh, bueno, talves puedas presentarmela, talves ella si me va a hace caso. —Reí alto y me volteé.
-Adiós Canela. —Me despedí. Fuí a mi auto y conduje a casa de mi madre. -Hola mamá. —La saludé cuando entré, le dí un beso y un abrazo.
-Hola… Danna. —Dijo un poco extrañada.
-Perdón, no me dió tiempo de cambiarme, vengo del estudio.
-Está bien hija, ayúdame con las aguas, ¿si? —Me preguntó, asentí y fuimos a la cocina.
-Ayer fue cumpleaños de Freddy, el primo de Alan.
-Mjm, le envié un regalo.
-Y salimos en la noche, él, su novio y…Jos. —Dejó de lado la gran cuchara y me miró.
-¿Saliste con él? ¿Volvieron?
-No, él salió con Danna, no con _____.
-¿Pasó algo con Jos estando tú cómo Danna?
-No, pero… le gusta Danna, y yo no quiero gustarle como ella, sino como lo que soy.
-Hija, te lo dije con la primera canción de "Danna Paola", ella saca tu lado más sexy, Danna eres tú, sólo que lo sensual, lo que nunca quisiste aceptar que eres, esa eres tú.
-Ma'… habló de que talves me quiere, pero tiene miedo que lo rechace.
-¿Quieres que hable con él?
-No, no quiero que sospeche algo.
-Tarde o temprano sabrá que eres Danna Paola, que no eres española y como inició todo eso.
-Mejor tarde que temprano.
-Está bien, pero hablaras con él.
-Si mamá.
(…)