MARATÓN / 2

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Había alrededor de 15 de mis hombres parados esperando mi llegada , un hombre estaba sentado en  mi silla favorita donde adoro torturar a todo tipo de personas , la silla era de metal y tenía corriente de electricidad , cuando me aburría de torturar los termino matando con electricidad y mueren como si estuvieran convulsionándose , es divertido a mi punto de vista .

-Lo descubrí hablando con el maldito de Owen , le estaba pasando información de su mujer ,  también de sus hijos ,  de Anne y sobre su viaje de mañana.

Me acerque aun mas furioso al hombre que me miraba con miedo y entonces sonreí.

Nadie tocara a mi mujer ni a mis hijos ni un  solo roce , me volvería loco si eso pasara .

-Hablaste sobre mi familia con alguien que me quiere joder , sabes como se tiene que pagar eso , no ? - me quite mi camisa negra , no quería mancharla de sangre y que mis hijos la vieran.

-Lo siento , pero el me amenazó , me dijo que si no le daba información mataría a mi familia - solté una risa y mire a Santiago miraba  divertido la escena.

-Todos dicen eso y no te preocupes a tu familia nadie la matara - se tranquilizó , sus facciones se relajaron pero el temblor en sus manos no cesó - mas que yo - y entonces en sus ojos se instaló el miedo - Santiago pasame la mas a filada que tengas , - se acerco y me entro un cuchillo afilado - cual es tu nombre - cuestione jugando con la punta del cuchillo dando varias vueltas a este .

-M-manuel - lo escuche tragar saliva , adoraba esto , sentir el miedo de las personas era la gloria

-Tranquilo no te haré nada- por el momento - dime manuel que es lo que mas odiabas de tu rostro cuando eras niño - mis hombres conocían mis formas de torturar pero no esta , esta era nueva y quería estrenarla para que todos observaran que nadie se mete conmigo .

-Mis ojos

-Por que

-Son iguales a los de mi padre - Un hombre con traumas , eso es mas que fascinante , me recargue en la pared para escuchar las ultimas palabras que saldrían de su boca .

-Te escucho

-El golpeaba a mi madre y yo no podía hacer nada para ayudarla - pero que patético - No quería ver mas eso , llego un momento que no quería mis ojos , cada ves que miraba a mi padre veía que teníamos los mismos ojos no lo soportaba, pensaba que era yo el que golpeaba a mi madre o mi madre lo pensaba .

Tape su boca con cinta para que no se escuchara sus gritos , la verdad su historia estaba interesante pero quería pasar a la acción.

-Santiago pon tu mano en su boca - no era suficiente con esa cinta se escucharían sus gritos a un así , lo que le voy hacer es demasiado doloroso, Santiago colocó su mano como lo ordene y lo siguiente que hice fue pasar lentamente la punta del cuchillo en sus ojos que trataban de cerrarse , mis hombres entendieron lo que quería hacer y se pusieron pálidos , por lo regular pedía cuchillos para clavarlos en una parte de su cuerpo pero no para sacar algo de du cuerpo .

Enterré con fuerza el cuchillo en su ojo , este grito , la mano de Santiago no era el mejor silenciador .

-Pongan música y cierren la puerta con llave , den la orden de que mis hijos y mi mujer  no se acerquen aquí - algunos hombres salieron rápidamente, otros hombres pusieron música con volumen alto y 2 hombres cerraron la puerta.

Y entonces saqué el maldito ojo y después el otro .

-Es hora , bajen la palanca

La electricidad paso por todo su cuerpo durante 40 segundos suficientes para haberlo matado .

ANNA © {2}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora