»❥ Forty Six ♡ɞ

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-Ya es septiembre y mi celo recién está llegando...- marcó una "×" en su calendario, estaba consciente de que, al estar ligado a Shoto, su celo tardaría más, pero nunca había demorado tanto. De seguro era por los altos niveles de estrés a los que se habían expuesto durante esos meses. -Tendré que pedirle a Recovery Girl que me dé un certificado para justificar mi ausencia en clases por mi celo-

Se dejó caer sobre su cama, preparándose para sufrir un doloroso celo. Todo era más difícil por lo que había ocurrido en la mañana, si el semi albino no hubiese besado su frente, quizás no se sentiría tan deprimido. Tal vez si dormía, podría tener un celo más corto. Aquella fue su peor idea. Por su cabeza pasaron varios escenarios en los que aún se encontraba con Shoto, saciando su deseo sexual. Llevaba tanto tiempo sin ser tocado, sin autocomplacerse, necesitaba demasiado sentir algo así.
Mordió su almohada, cerrando los ojos con fuerza, a través del lazo podía sentir a Shoto, también sufriendo por el celo. Ya no podía controlarse más.
Sus pies lo guiaron hasta el ascensor y luego hasta la habitación de su alfa, en donde no necesitó llamar a la puerta, sino que este ya sabía que su omega llegaría a ese lugar. Apenas entró a la habitación, se abalanzó sobre el semi albino, atrapando sus labios con los propios, estremeciéndose cuando sintió las manos del más alto apretar su trasero. Todoroki mordió el labio inferior del pecoso, llevando una de sus manos hasta su cadera mientras que la otra la mantenía en su trasero, guiándolo hasta la cama donde lo hizo sentarse sobre su erección. Las caderas del joven de rizos se movieron contra el duro miembro del alfa, simulando una penetración sobre la ropa, aferrándose a sus hombros. El aroma que desprendía del cuerpo del omega volvía loco al semi albino, necesitaba entrar en contracto con su piel, hacerlo suyo nuevamente. Luego de que Midoriya enredase sus dedos entre su cabello bicolor, ambos se dejaron caer sobre el colchón, siendo el menor el que quedase arriba. Se incorporó para quitarse la camiseta, dejándola a un lado sin dejar de frotar sus erecciones, notando como el lubricante comenzaba a empapar su ropa interior. Su cuerpo se estremeció varias veces, hasta que finalmente decidió llevar a otro nivel de placer a su alfa. Besó sus labios cortamente, dejando besos por su cuello y pecho hasta que llegó a su abdomen. Shoto se incorporó en ese momento, ya sabiendo las intenciones del omega.
Su pantalón y bóxer fueron bajados, dejando a la vista su hinchado pene, el cual comenzó a ser estimulado por la mano del pecoso para que su boca se una poco después. La lengua de Izuku recorría toda la extensión del semi albino, para terminar centrándose en su glande. Los suspiros y jadeos del alfa no tardaron en salir, convirtiéndose en débiles gemidos al sentir como su miembro ingresaba en la boca caliente del joven de ojos verdes. Casi no recordaba lo bien que se sentían las felaciones por parte de su omega.
Empujó la cabeza del pecoso, haciéndolo meter toda su erección en su boca, provocando más placer en su ser. Sin poder contenerse más, eyaculó en la boca de Izuku, jadeante y bastante agitado por el reciente orgasmo. Su omega tragó lo que tenía en la boca, poniendo una de esas caras lascivas que excitaban a su alfa.
Terminó quitándose lo que le quedaba de ropa, recostándose en la cama después, abriendo las piernas para que el alfa pudiese ver lo húmedo que se encontraba. Los dedos del semi albino se colaron en su interior sin compasión, follando ese lugar y provocándole distintas sensaciones, sacándole también gemidos que inundaron la habitación rápidamente. Arqueó la espalda, no podía pensar en nada que no fuese ser follado por el alfa, necesitaba más de él, sus tres dedos empapados acariciaban ese lugar delicioso en su interior, provocando grandes espasmos que lo llevaron finalmente al clímax.
Sin poder recuperarse del orgasmo, Todoroki entró en su interior, haciéndolo soltar un grito por el repentino intruso. El semi albino no se movió de inmediato, abrazó al rizado y besó su cuello, llegando hasta la mordida, abriéndola nuevamente. Pasó sus manos por la ancha espalda del alfa, jadeando por los chupones que este estaba dejando en su cuello. Cuando comenzó a moverse, el omega se aferró a su cuerpo, marcando también su cuello y clavículas con chupones, evitando así también que sus gemidos sonasen muy fuerte. No pudo evitarlos por mucho tiempo, las estocadas del semi albino le hacían gritar de placer, sintiéndose completo una vez más. Todoroki presionó uno de los pezones de su omega, estimulándolo con su pulgar, robándole un beso mientras aumentaba la velocidad y profundidad de sus movimientos. No podía creer lo bien que se sentía, estaba cerca del orgasmo, pero no se detendría, necesitaba saciarse, saciar a su omega y sabía muy bien que con sólo una vez no bastaría.
Midoriya clavó sus uñas en la espalda de Shoto, apretando su interior e impidiendo que su alfa se moviese de forma correcta. El hinchado miembro del semi albino creció gracias al nudo, haciendo que el pecoso arquease la espalda ante la gran presión que sentía en su recto. El nudo terminó de formarse, provocando que el joven con heterocromía soltase todo el semen acumulado en el interior del rizado, el cual sentía como sus entrañas eran llenadas con esa especia caliente que le hacía gemir.
El nudo tardó en deshacerse, y cuando eso ocurrió, aún ambos en celo, comenzaron otra ronda, intentando distintas posiciones con cada una que pasaba.

Izuku's Dilemma 「ABO!Tododeku AU」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora