Izuku's Dilemma 「ABO!Tododeku AU」

•ू♡Fifty Two

Para año nuevo habían ido a ver las estrellas a uno de las montañas más altas de Japón e Izuku era incapaz de quitarse aquel recuerdo de la cabeza. Habían preferido alejarse de los fuegos artificiales y ver la luz natural que el cielo nocturno les ofrecía. Quizás fue imprudente por parte de ambos puesto que podrían haber muerto congelados, sin embargo, Shoto era una estufa humana y sólo por eso habían logrado tener una de las mejores noches de sus vidas.

Volver no fue fácil, pero lo lograron sin dañar su integridad física. Unos cuantos días habían pasado desde el comienzo de un nuevo año, pero aún tenían tres días antes de volver a la rutina escolar.
Ellos habían estado separados por dos días completos, teniendo como único contacto sus móviles, y aunque estaban conscientes que debían pasar esas fechas importantes con sus familias, necesitaban estar junto al otro. Por suerte ya estaban en la residencia de la academia, compartiendo el amor que se tenían en el salón principal o así había sido hasta que recordaron que debían estudiar para unos exámenes que tendrían al volver a clases.
Sentado en el suelo con su omega entra sus piernas, comenzó a explicarle lo que este no comprendía, tratando de ser lo más claro posible. Shoto no era exactamente bueno en matemáticas, pero por lo menos entendía lo que su pareja no, así se ayudaban mutuamente.
Su sesión de estudios fue larga, incluso otros de sus compañeros se unieron a ellos, pero no fue hasta que Momo y Tenya estuvieron ahí que comenzaron a estudiar en verdad.

-Ah... Estoy cansado mentalmente- murmuró el pecoso, apoyándose contra su alfa luego de que terminasen la sesión. -Y tengo hambre...-
-Vamos a comer algo- el semi albino intentó levantarse, pero Izuku no quería que lo hiciese.
-No tengo ganas de prepararme nadaaa- alargó la última lo más que pudo, demostrando su flojera.
-Te prepararé algo-
-Nooooo, quiero que te quedes conmigo- se aferró a él con piernas y brazos.
-Izuku Midoriya-
-Shoto Todoroki-
-Deja que me levante, Izuku- el rizado negó con la cabeza. -Pastelito-
-Tú ganas- dejó un beso sobre sus labios antes de rodar fuera de su cuerpo, quedando en la alfombra del salón.
-¿Qué quieres comer?-
-Lo que quieras preparme, amor-

════ ❁ ❁ ♡🌹♡❁ ❁════

Febrero trece. Shoto no sabía que regalarle a Izuku. Sabe lo mucho que le gustan las rosas, pero para él aquello significaba cortejo y no necesitaba hacerlo. Podría regalarle algo de All Might como los años anteriores junto a algún chocolate de buena calidad o alguna otra cosa melosa, pero él no era exactamente bueno para distinguir aquello, aún cuando había aprendido bastante con el paso de los años. Quizás debería pedir ayuda a alguno de sus compañeros o quizás debería hablar con su familia. No, no era muy buena idea. No quería molestar a Fuyumi porque no quería causarle algún problema a la joven que esperaba un bebé. Touya tenía unos gustos bastante extraños, era mejor no decirle nada. Enji y Hōku se habían ido de vacaciones "románticas" -lo más probable era que su hija no los dejase disfrutar- unos días atrás y aunque fuesen las últimas personas en el mundo, no les pediría ayuda. Su madre... Era algo inestable aún acerca del tema. La última opción era Natsuo, él tenía detalles bastante románticos con Toshio y podría ser un buen consejero... Si tuviese tiempo para él. Con sus estudios universitarios, su trabajo de medio tiempo y asegurarse de que su omega y su hijo estuviesen en perfecto estado era difícil tener tiempo para algo más.
Suspiró. Aún le dolía la noticia que dos de sus hermanos le habían dado por navidad y aunque no quería parecer afectado, no podía evitarlo. Rápidamente se quitó esas ideas de la cabeza, centrándose en buscar en internet "regalos de último momento para mi pareja en San Valentín".
Encontró varios tutoriales acerca de manualidades preciosas para omegas cariñosos, también habían consejos acerca de como hacer regalos creativos dependiendo de los gustos del receptor, como hacer chocolate casero, ideas eróticas... Nada le convencía. Estaba considerando llamar a su hermano, pero en vez de eso, llamó al omega de este, citándolo en la residencia 3-A. Cuando se reunieron, el joven de cabello rosado le hizo varias preguntas acerca de que le gustaría regalarle a Midoriya por ese día que a muchos le parecía especial.