Izuku's Dilemma 「ABO!Tododeku AU」

♡Fifteen♡

No volvieron a besarse, ni siquiera en la mejilla al despedirse, como si todo lo que había ocurrido entre ellos ese día domingo no hubiese pasado nunca. Aún así, al siguiente día, Shoto se mostró algo más cariñoso, celoso y protector hacia Izuku, demostrando sus celos especialmente cuando el omega quiso cruzar unas cuantas palabras con su rubio amigo de la infancia.
No había mencionado ni una sola palabra sobre ese beso ni a su madre ni a su tutor, ni siquiera a Ochako o Tenya, con quienes tenía más confianza en la clase. Ellos dos eran los únicos que sabían lo que había pasado, pero no entendían el porqué se habían dejado llevar de esa forma. La única opción era culpar a sus dinámicas y sus instintos.

Salió de la academia junto a Todoroki, en completo silencio, con pequeños roces de dedos que trataban de no obviar. El gran héroe y tutor de Midoriya cayó frente a ellos, con la sonrisa que siempre conservaba, apuntando con su dedo índice al joven omega mientras se levantaba.

-Joven Midoriya, es hora de ir a casa, ¿Quieres que te lleve?- All Might había comenzado a comportarse como un padre desde que él e Inko comenzaron a salir, esta vez, oficialmente. Eso incomodaba un poco a Izuku, por no decir que tener al héroe en su casa casi todos los días lo hacía cohibirse con todas sus acciones diarias.
-E-Está bien- balbuceó, dándose vuelta hacia el alfa semi albino. -Mañana es el gran día, Todoroki, ¡Esforcémonos!-
-Si- respondió seco, observando de reojo al gran hombre, volviendo a Izuku en menos de un segundo.
-Joven Midoriya- interrumpió las miradas algo avergonzadas de los adolescentes, haciéndole una seña a su pupilo de que le quedaba poco tiempo.
-Nos vemos mañana, Todoroki- se inclinó para besar su mejilla en un rápido y corto movimiento.

Los brazos del rubio alzaron al joven de cabello verde, y luego de un "hasta mañana, joven Todoroki, ten cuidado en las calles", el héroe y el aspirante a héroe desparecieron de su vista.

Inko estaba llegando al edificio en donde se encuentra su hogar, algo apurada. Había comprado un pastel para sorprender a su hijo y a su nueva pareja e incluso había conseguido permiso en su trabajo para salir temprano. No tenían ninguna festividad o cumpleaños que celebrar, aunque para Inko, hacerle una cena especial a su pequeño antes de uno de los eventos más grandes de su vida, era motivo de celebración. Sacó las llaves del departamento de su bolso con tranquilidad que acabó cuando el suelo tembló bruscamente, estando el "epicentro" a unos cuantos metros de ella, dentro del pequeño patio que había entre los edificios. Por curiosidad que era compartida con su hijo, se acercó hacia el lugar exacto, encontrando a su Izuku con su héroe favorito. Se emocionó al ver la sonrisa de su pequeño hijo, que era provocada por su admiración y que se expandía más a medida que hablaban. Se preocupó en el instante en que el joven se acercó al héroe quien había comenzado a toser sangre. Su sorpresa fue total cuando el cuerpo musculoso del Símbolo de la Paz despareció, dejando ver a un hombre delgado que de inmediato reconoció como Toshinori.
Soltó sus cosas, llamando la atención de los otros presentes, quienes quedaron helados al verla ahí. Ya no podían ocultarlo, ella lo había visto todo.

-Inko...- el rubio se acercó a su pareja, quien rechazó el contacto, estaba pálida y en cualquier momento se desmayaría, así que entre los dos la ayudaron a llegar al departamento.
-Mamá, yo... N-No sé como explicarlo- tartamudeó, poniéndose frente a su madre luego de sentarla en el sofá.
-Inko, lo siento por no contarte esto antes- Izuku se hizo a un lado y Toshinori puso sus manos sobre los hombros de la mujer, mirándola a los ojos. -Ya lo sabes, así que creo que tendré que explicarte el porqué no te lo dije-

La mujer de cabello verdoso escuchó todas las palabras que salían de la boca de su pareja, cambiando de expresión y pensamiento rápidamente con cada minuto que pasaba. Finalmente, el rubio volvió a disculparse, arrodillándose sobre el suelo, llevando su disculpa más allá.

-Sabía que conocía de algún lado los ojos de All Might- tanto el adolescente como el hombre miraron a la mujer sin saber a que venían esas palabras. -No estoy molesta, pero necesito un tiempo para aceptar esto-

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-Mierda- gruñó. Sus nudillos estaban sangrando, no debería haber golpeado la pared en un arranque de ira.

Su maldito viejo iría a verlo al festival deportivo. Era obvio que lo haría, pero Shoto no quería que estuviese ahí presente. Congeló las heridas de su mano para bajar la hinchazón que se comenzaba a notar, tratando de enfriar su mente de todos aquellos pensamientos. Mañana sería otro día.

Caminó por el pasillo de la academia hasta que llegó a la sala de espera que le correspondía. Estaba tenso y no podía evitar gruñir mientras más lo pensaba. Evitó la conversación con todos los demás de su clase durante el primer evento, y trató de no hablar demasiado con ninguno en el segundo para no derramar su ira. Congelaría a cualquiera que cruzase una sola palabra con él cuando entrase a la sala de espera.
Respiró profundo para no lucir tan estresado antes de entrar en el cuarto en que se hallaba la clase 1-A.

-Todoroki- su fría mirada chocó con la alegre de Izuku. Gruñó una vez más, tensándose de nuevo.

Agarró el brazo del omega con fuerza y lo sacó a rastras de la sala, llevándolo hacia uno de los vacíos pasillos que daban con el exterior.

-¡Todoroki! ¡Me haces daño!- se detuvo, volviendo en sí. Soltó el brazo del pecoso y cambiando de ánimo rápidamente, lo abrazó. -¿T-Todoroki?-
-Lo siento- se disculpó, respirando fuerte y agitado, soltándolo pronto. -Mi maldito viejo está aquí, mirándome, no puedo soportarlo, saber que mi lado izquierdo es heredado de él me enoja, no seré la herramienta de una escoria como él-
-Te lo dije una vez, ¿Recuerdas? Tu lado izquierdo...- trató de tomar la mano del semi albino, pero este se alejó antes de que pudiese rozarlo.
-Hoy no estamos aquí para jugar a los amigos o lo que sea, Midoriya, soy obviamente más fuerte que tú- el omega se sintió ofendido. -No sé como lo hiciste para tener los ojos de All Might puestos en ti, no tengo intención de meterme en eso, pero voy a derrotarte-
-N-No sé porqué me estas diciendo estas palabras tan rudas, sé que eres obviamente más fuerte que yo y no sólo por tu dinámica, sé que tengo que esforzarme más que cualquier otro... Aún así, viendo como todos están dando lo mejor de cada uno, no puedo permitirme quedar atrás- llevó su mano hacia el brazo que Shoto había dañado y la otra la hizo puño. -¡Así que iré a por ello con todas mis fuerzas!-

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Gracias por los 3k de leídas, perdón por hacerles sufrir de aquí en adelante y por los capítulos muy cortos(?~