•ू♡Fifty Six

2.7K 279 43
                                    

Hace dos semanas se habían enterado del embarazo de Izuku y los rumores se esparcieron bastante rápido, hablando todo tipo de cosas que los hacían quedar mal como familia.
Inko al enterarse buscó todas las cosas que su hijo utilizó cuando era pequeño y cuando tuvo todo, le pidió que la visitase, ya que habían cosas en muy buen estado que los padres primerizos podrían usar con su bebé.
Shoto y él habían cambiado sus horarios de trabajo ya que Izuku aún no tenía su prenatal, así que para estar pendiente de que no le ocurriese nada, trabajaban juntos. Y si, el semi albino también lo había hecho porque no quería que nadie más estuviese cerca de su omega y su bebé, mucho menos Sakimoto.

-Shō, ¿Puedes ir con All Might a comprar los ingredientes que faltan para la comida?- al alfa de ojos bicolor no le agradó la idea. -Estamos en casa de mi madre, lo peor que podría pasarme aquí sería golpearme un dedo con la mesa-
-Está bien, trataré de no tardar mucho- dejó un beso en la frente de su omega, pasando su mano por el estómago de este luego de abrazarlo por la cintura y pegarlo a su cuerpo. -¿Quieres que te traiga algo?-
-Sabes que tengo una dieta que no puedo romper en mi embarazo, no me tientes- hizo círculos en el pecho de su marido.
-Sabes que quiero mimarte- ronroneó. -¿Seguro que no quieres un trozo de pastel?-
-No, no, no, amor, deja de tentarme- intentó alejarlo, sin ganas porque realmente no quería tenerlo lejos. -Mejor me traes fresas y kiwi para hacerme un carpaccio de frutas-
-Como desees, mi pastelito- el pecoso rió.
-Ya, ya, All Might debe estar esperándote, vete- dejó un último beso en los labios de su esposo, siendo soltado poco después. -Te amo mucho-
-Yo también te amo mucho- se dio media vuelta, sorprendiéndose al sentir una mano chocar en su trasero. -¡Izuku!-
-Tienes un buen trasero, no me culpes- le guiñó un ojo. -Ahora si, vete, vete-

Él y su madre se despidieron de sus parejas, caminando después hasta la antigua habitación del pecoso, en la cual se encontraba una caja con las pertenencias que había adquirido durante su vida. Después de sacar varias camisetas con inscripciones que usaba en su adolescencia —y que ahora no le cabían debido a su masa muscular—, encontró aquello que tanto había adorado cuando tenía cuatro años: su traje de "Small Might".

-¿Realmente era así de pequeño?- preguntó a su madre, quien levantó la vista de los dibujos en sus manos. -Recuerdo cuando jugaba a rescatarte...-
-No importa cuanto crezcas, Izuku, siempre seguirás siendo mi bebé- la omega de canoso cabello acarició la mejilla de su hijo.
-¿Puedo llevarme esto? Quiero heredárselo a mi hijo- ella asintió con una sonrisa pequeña en sus labios. -Me sorprende el buen estado en el que se encuentra después de todos estos años-
-Es importante para ambos y me alegra mucho que se lo vayas a dar a mi nieto-
-Estamos en casa- ambos escucharon la voz del hombre rubio, por lo que ordenaron las cosas que habían sacado para luego abandonar la habitación.

Izuku llevó la prenda para poder mostrársela a su marido y pedirle su opinión, así que se dirigió hasta la cocina donde lo encontró colocándose uno de los delantales de cocina que habían en ese lugar.

-Amor, mira lo que encontramos- estiró la prenda, enseñándole la misma con una sonrisa. -¿Crees que se vea bien en nuestro pequeño?-

Miró al semi albino, notando los ojos humedecidos de este. Cabe mencionar que habían veces en las que Shoto era afectado por las hormonas de embarazo de su omega y al parecer, eso estaba mostrándose en ese momento.

-Shō-
-Ya quiero que esté en nuestros brazos- ronroneó cuando el rizado se le acercó. -Esto se verá precioso en él-
-Cambiando de tema, ¿Me trajiste lo que te pedí?- el semi albino asintió. -Oh, no me digas que...-
-Me has pillado-
-Shoto, deja de mimarme tanto- le acarició la mejilla, negando levemente al descubrir que su pareja le había comprado un trozo de pastel. -¿Estás tratando de convertirme en una pelota?-
-¿Qué...?- el alfa soltó una risa más nasal que cualquier otra cosa.
-No te rías- el menor se había puesto serio. -Es en serio, Shoto-
-Lo siento, lo siento, fue tan espontáneo que no pude evitarlo-
-¿Ustedes dos van a cocinar o seguirán hablando aquí?- ambos miraron a Toshinori. -Si no van a ayudar por lo menos permitan que Inko y yo usemos la cocina-
-Ah, yo...-
-Ustedes trabajan duro a diario, siéntense a descansar- invitó la mujer.
-Vamos, Izuku-

Izuku's Dilemma 「ABO!Tododeku AU」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora