|19|

486 74 43
                                    

Comenten para que el Adrinette sea real alv ;'3

¿Cómo demonios llegué a aceptar estas estúpidas reglas? Es decir, ¿qué demonios me pasó para aceptarlas? El acuerdo a que habíamos llegado era justo aunque también me daba lástima seguirlas sólo para olvidar a Adrien. Esas normas era para ambos.

1.-Seremos cómplice en todo, en público o frente a los demás, nos cubriremos las espaldas.

2.-Nos contaremos todo.

3.-Cero corazones rotos.

En esas condiciones ambos nos entendíamos porque teníamos miedo de salir heridos además de ello conocí muchas cosas de él como por ejemplo que Nino se había enamorado de Chloé pero luego perdió el interés cuando conoció su "Afecto" por las verduras.

Además de ello dejó de insistir cuando Bourgeois salió con Adrien.

Detallar lo que hice con Nino ese día me haría sentir una traidora a mis sentimientos, así que sólo resumiré los detalles diciendo que fui "suya". No hubo afecto, y no lo voy a negar, pensé en Adrien. En ese instante no me invadió el amor ni la pasión, sólo el deseo de olvidarlo.

Y en estos instantes estábamos con mis padres fingiendo que ya me había curado de mi supuesta enfermedad, por lo cual tenía que fingir que no mataría a la idiota de Tikki.

Cuantas ganas me daban de estrangularla.

Tuve que decir varias mentiras hasta que llegué a la parte más importante del plan, todo esto dependía de la actuación de Lahiffe y yo.

—Papá, mamá quiero decirles algo...¡me enamoré de Nino!.—el moreno ahogó una pequeña carcajada.—No pude evitarlo, pero él me dijo que no podíamos tener nada hasta que terminara mi terapia y sobretodo con el permiso de ustedes.

Ellos se quedaron pensativos por un instante lo que me hizo dudar de su respuesta.

—Claro que aceptamos, ¡que más queremos que a un doctor que curó a nuestra hija y estamos seguros que le dará una buena vida! ¡Bienvenido a la familia, Nino!

Hubiera sido bonito que esas palabras se las hubieran dicho a Adrien pero ahora no importaba, él estaba bien sin mí y yo sin él.

Quedé boquiabierta, mis padres lo abrazaron con cariño, felicitándolo por tener una "relación conmigo"

—¿Cuándo se mudan?.—preguntó de forma ansiosa mi madre.—Es decir lo de ustedes es un hecho. Ya me imagino las noticias, la hija de los empresarios Dupain Cheng se casa con un doctor.

Tragué en seco, creo que estaban exagerando.

—¿Casarnos? Ve más despacio, papá.—reí de forma nerviosa, aunque fingí lo incómoda que estaba.

—Toma.—mi padre me dio unos papeles, eran los permisos de salida, ya podía salir del país.—Los tenía preparados si esto funcionaba.

—Papá.—mencioné, sería muy mentirosa de mi parte si dijera que mis ojos no estaban brillando de la emoción.

—Te los ganaste, ve a empacar, tu madre y yo nos vamos de viaje durante dos meses, que bien que te deje en buenas manos.

Le agradecí con un abrazo de oso.

El moreno y yo nos dirigimos a mi habitación, justo cuando cerré la puerta me lancé hacia Nino para besarlo de forma deseosa.

—Se lo creyeron todo.—rió contra mis labios.—Oye, ¿puedo preguntarte algo?.—asentí con la cabeza, él me llevó hacia la cama.—Sé que somos muy malos y eso pero siendo honesto nunca había encontrado alguien como tú. Creo que olvidé una regla, la más importante...te quiero.

Smoke Girl [Adrinette]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora