|21|

507 59 22
                                    

Comentes, please :'v

—¿Enserio piensas que estaré bien sabiendo que te perdí?.—masculló contra la almohada.—Me creí el maldito cuento solo mía para siempre.

Pues sí, quedaste como estúpida pero aún se te quiere.

—No debiste hacerlo.—contesté continuando dándole mimos en su cabello.

—Es lo peor de todo, sigues teniendo tu vida desastrosa y lo peor es que con alguien que no soy yo.—escuché como su voz se quebró.

Lo volteé para que sus bonitos ojos me miraran, los noté cristalizados. Solté un suspiro y acaricié su mejilla.

—¿Tú conocías a Nino, cierto?

Por favor, que diga que ellos eran amantes.

Él asintió.

—Le di guardia un tiempo en el internado de hombres cuando tenía quince años pero él siempre se burlaba de mí por ser menor y no tener su mismo estilo de vida, mejor opción no pudiste elegir para poder fastidiarme.

En primer lugar yo no tenía la culpa de que Nino este tan bueno como el pan con queso. 

Y no sé porque pero me imaginé una historia bien gay entre ellos dos, el BL me había cambiado.

—Adrien yo te quiero mucho pero no puede haber entre nosotros porque.—detuve mi explicación debido al enorme nudo que tenía en la garganta.

Porque sería muy egoísta haber hecho mi vida con Nino para dejarlo para ir contigo, es decir Lahiffe era apasionado pero aún así no llenó el vacío de estar sin Adrien. Quiero quedarme pero no sé si es lo correcto.

Aunque sería más cruel de mi parte salir con alguien que no amo.

—Porque lo amas.—musitó, yo asentí con pesar.—¿Podrías probármelo?

—¿Qué?.—arqueé una ceja debido a la confusión.

—Muéstrame con tu cuerpo lo que siente tu corazón.—dijo con firmeza, en cambio yo balbuceé algunas palabras sin sentido.—Eso mismo, eso podrá convencerme que ya no sientes nada por mí. Si compruebo que ya no me amas te dejaré libre pero si sientes algo por mí todavía juro que me quedaré a tu lado, ¿aceptas?

Fruta que ofertón digo piensa en la biblia.

Mi respuesta inmediata sería "sí" pero no podía hacerlo porque traicionaría a la única persona que me apoyó, que me aceptó tal como soy y comprendió que no soy un jodido capricho. Obviamente moría por caer en brazos de Adrien.

Me confesaría y todo pero luego me pregunto ¿a Onodera le gustaría verme así?

—La verdad es que ya no me importas, lo nuestro ya no existe ni siquiera siento algo por ti. Ni ganas tengo de tenerte en una cama porque ni eso necesito de ti.

Así es amigos no todo en la vida es sexo.

—Veo que no has cambiado, sigues igual de fría.

Oí como sorbió su nariz y me sentí triste, incluso más depresiva que al ver la muerte de Mufasa.

Mierda, lo estaba empeorando. Buen trabajo, señorita hago todo mal.

—¿Entonces ya no significo nada para ti?.—escuché su masculina voz hecha pedazos, negué con la cabeza.—Bien.

Y siguiendo mi estupidez me despedí de él con la mano para luego desaparecer de su vista, las primeras personas que pensé en visitar en Londres fue Lila y Kagami, y para mi suerte sabía la dirección de su apartamento.

Smoke Girl [Adrinette]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora