ROMANCE DE OFICINA

Capitulo 4

Narra Elena Weber

- Elena Weber...

- ¡¿Que?!

Me levanto de mi asiento llamando la atención de todos. ¿En que momento me había convertido en su pareja? ¿en que momento  había cambiado nuestra relación?

- Mi amor, ven acércate - mas que una petición sonó como una orden, ¿Como Black podía estar tan relajado?

¿El habría planeado esto?

-Claro - Me costo decirlo sin tartamudear. Ya seria mi turno para pedir explicaciones.

Tan pronto llego a su lado le doy una mirado de desconcierto, Black hace caso omiso y me toma de la cintura, a lo cual yo suelto un pequeño gruñido.

- Les presento a la mujer de mi vida, Elena Weber, se que en este momento están llenos de preguntas, pero no se preocupen poco a poco se irán resolviendo. En fin esta era la razón de la junta, y como no hay otro motivo por el cual estar aquí, pueden retirarse, gracias por venir - Dice Black al mismo tiempo que sale de la sala de juntas  tomándome de la cintura. No le importo dejar a los empresarios o a su padre ahí, llenos de preguntas.

Estando en su oficina parece todo normal, Black volvió a sus deberes dejándome con miles de preguntas en mi cabeza.

- ¡¿Que rayos paso haya adentro!?- Cuestiono alterada, mi cabeza no procesaba nada de lo ocurrido, solo pasaban las palabras , pareja, relación  ¡¡Ascenso!!

- Eres mi pareja, eso es lo que ocurre - Dice dándome una sonrisa inocente.

- ¡¿En que momento!? Yo nunca acepte, nunca me propusiste ser tu pareja, es una maldita farsa - Grito desesperada ante la situación, jamás en la vida me había pasado algo así, ciertamente estaba en Shock.

- Relájate ¿Quieres? - Contesta de lo mas normal, se veía tan relajado, tan feliz, mientras yo estaba desesperada por saber que pasaba a mi alrededor.

- ¡Merezco una jodida explicación! - estaba llegando a mi limite - ¡Si tu no me la das la buscare de tu padre, por que al parecer el esta muy bien enterado...IMBECIL! - Grito como nunca, juraría que se escuchaba todo a través de la puerta, pero, no me importaba.

A punto de abrir la puerta Black me toma del brazo y con fuerza me arroja a su silla, nunca lo había visto así, lo había hecho enojar, lo podía ver en sus ojos.

-¡¿Quieres saber que pasa?! De acuerdo... Por tu estupidez eres mi esposa.

Analizaba cada palabra que salía de su boca...había dicho esposa...¿Como había terminado en esta situación?

-Para hacer tu "Esposa" debemos estar casados, así que ni en tus mejores sueños.

-No estés tan segura "Mi amor" - que me haya llamado de esa manera me provoco nauseas, era desagradable para mi que mi jefe me llamara así - has firmado el contrato sin leerlo, ni siquiera lo observaste y gracias a tu idiotez eres mía, tu y mi gran herencia.

- ¿Me has usado? - Digo soportando las ganas de llorar,  tenia que ser fuerte en un momento así.

- ¡No balbucees que no entiendo lo que dices! - Dice Black cruzando los brazos.

- ¡ Me has usado maldito imbécil, hijo de pu...! - No termine la oración cuando mi mano ya estaba sobre el rostro de Black, no me di cuenta de la fuerza que use hasta ver su labio sangrando.

- Sabes, así me agredas, llores o patalees, este acuerdo es imposible de romper, así que acostúmbrate - Dice Black abriendo la puerta, listo para dejarme.

- Otra cosa, Como mi mujer, vivirás conmigo, así que prepara tus cosas, tienes dos horas- Estaba a punto de salir cuando se freno en seco, mirándome fijamente dijo - Otra cosa, La próxima que alguien te de un ascenso - Uso las comillas- lee el contrato, quien sabe que intensiones ocultas este dentro - Y sin mas salió azotando la puerta.


¡¡IDIOTA!! - fue lo ultimo que pude gritar antes de entrar en llanto.

Aproveche ese momento para llorar, intente sacar todo lo que sentía, pero no daba resultado, así llorara todo el día no alcanzaría para sacar todo lo que tenia dentro, así que busque otro método, lo primero que vi para arrojar fueron los lápices del escritorio, lo segundo fue el portapapeles, cientos de ellos salieron volando, el ultimo objeto del cual dude fue la laptop, después de un rato vi como se destruía en cientos de pedazos.

Ya mas tranquila salgo de la oficina, ya no había ni un empresario, era bueno, no quería dar explicaciones, solo quería ir a casa pero no estaba en condiciones de manejar, pediría un Uber para que me llevara. Estando en el estacionamiento esperando veo a Black saliendo muy tranquilo, verlo así, hizo que mis  ojos se inundaran de lagrimas de nuevo...me había arruinado la vida.

En parte yo tenia la culpa, confié ciegamente en el y no leí el contrato, lo que me estaba pasando, era consecuencia de mis acciones.

Aproximadamente 10 minutos después llego el Uber, le pedí que me llevara a mi casa, necesitaba estar un rato a solas.

De camino a ella, mis pensamientos me decían lo estúpida que era al haber firmado ese contrato sin leerlo, la codicia de querer mas me cegó, y ahora estaba en esta desagradable situación.

- Señorita hemos llegado, son 12 dólares - Dice el chofer esperando mi respuesta.

- Si esta bien, le doy 15 dólares al no tener cambio - sin mas me bajo y le digo que se quede con el resto.

Abro la puerta de mi hogar, me pone melancólica ver todo, ¿seria la ultima vez que pisara este piso?, ¿la ultima vez viviendo aquí?

Nuevamente las lagrimas recorrían mis mejillas, cierro la puerta de mala gana y voy a mi habitación, tenia que encontrar una manera de distraerme, sentía que mis pensamientos harían que mi cabeza explotara.

Sin pensarlo demasiado, me dirigí al baño y abrí la regadera, quería un baño caliente, me vendría bien.



Estando listo mi baño me desnudo y entro en el, se sentía bien, por unos minutos me calmo, o talvez horas, no se cuanto tiempo me quede adentro, pero se que había sido mucho, me di cuenta por lo arrugados que estaban mis dedos...

Una vez tranquila tomo la toalla y busco algo cómodo que ponerme, una pijama seria la mejor opción.

Cuando por fin estaba decidida a relajarme y dejar pasar este mal trago, alguien decidido a arruinar mi momento se propuso a tocar la puerta excesivamente, parecía un loco.

Rápidamente me dirigí a ella, no tenia ánimos pero podía ser importante. Al abrir esta Black sonriente, verlo fuera de mi casa, hizo que recordara el suceso de esta mañana, mis ojos nuevamente se inundaron de lagrimas, soporte no derramar ni una frente a el de nuevo, así que sin importarme le cierre la puerta en la cara...


¡¡HOLA!!

¿Qué les pareció?

¡¡Ya el capitulo 4!! Pronto subiré uno nuevo...solo tengan un poco de paciencia...😊

¿Qué pasara con Elena y Black?

¿Habrá aprendido la lección?

¿Creen que Elena haga algo para salir de esa situación?

Si tienen alguna duda o sugerencia con gusto se las contesto, no olviden comentar📱 y dejar una estrella si les gusto el capitulo 🌟