ROMANCE DE OFICINA

Capitulo 36

Narra Cristopher Black

Cada que cierro mis ojos imagino mi futuro con Elena y mis hijos. Desde que nos dieron la noticia de que seríamos padres una sensación tan emotiva invadió todo mi ser, ahora me levanto con más motivación, hago con alegría mis tareas diarias en la empresa, que bueno, desde el embarazo de Elena hago el trabajo en casa.

Ahora el poder ayudar a mi esposa en todo lo que ella necesite era mi prioridad, lo que más amaba en el mundo. Durante el tiempo que quedara de este proceso iba a cumplir un objetivo, me lo había planteado desde que me enamore de Elena. Admito que hubo un tiempo donde lo olvidé por completo y dejé de lado, pero ahora más que nunca sabía lo que quería y cuando lo quería.

Hacer feliz a Elena, apoyarla, amarla sobre todas las cosas, así mi madre se interpusiera entre nosotros no la dejaría de lado cual cosa sin usar.

En ocasiones me partía en mil pedazos en corazón que la mujer que se hace llamar mi "Madre" fuera tan dura con las decisiones que tomaba. Me hubiera gustado que mi madre me me diera consejos, me ayudara a tomar decisiones importantes en mi vida, pues una madre está para ayudar a su hijo, pero, aun así no me arrepentía pues había tenido a la mujer perfecta parada frente a mi durante seis años y no me había dado cuenta de lo valiosa que era.

-  ¿En qué piensas tanto amor? - me saco de mis hermosos pensamientos Elena.

Ella y yo teníamos unas ganas enormes de regresar un par de días a la casa donde la magia sucedió, que hayamos ido por un tiempo le brindaría paz, relajación y tranquilidad a Elena, eso sería perfecto para ella.

Ciertamente no era recomemdable que mi madre supiera de esto aún, ella no procesaba que estuviera casado con Elena, si le decía que sería abuela no tenía idea de cómo iba a reaccionar, pero algo en mi corazón me decía que ella no podía ser tan cruel y de corazón frío sabiendo que en poco tiempo tendría a una criatura en casa a la cual cuidar, abrazar, besar, jugar, entre otras cosas.

- En el futuro - sonreí al ver a Elena con las mejillas rojas, esta vez no estaba sonrojada, los rayos de sol que recibió fue la causante de aquello.

Ella estaba acostada en la arena blanca, el mar de frente, uno muy azul, las tiras del bikini que usaba ya estaban marcadas en su piel por aquel tono rojo en su cuerpo.

Estaba ligeramente bronceada, pero aún se miraba hermosa.

- ¿Qué ocurre en tu futuro? - Me cuestionó Elena adoptando una posición más cómoda.

Sus manos estaban recargadas sobre la arena, su espalda recta con la cabeza hacia atrás y las piernas un poco dobladas.

Cualquiera que la mirara podía ver que Elena era una diosa. Por más que ya tuviera 3 meses de embarazo yo no podía ver nada en su abdomen, estaba perfecto. Tal vez era muy malo para apreciar que su cuerpo había cambiado.

- Imagino las cosas infinitas que podré hacer con lo que este ahí - Señale el vientre de Elena con el dedo.

Cuando la ginecóloga nos diga el sexo del bebé lo primero que haré será comprar miles de regalos para él o ella, que ese bebé que viene en camino sepa que desde el primer momento fue muy querido.

- ¿ Si es niño que harás? - cuestionó Elena mirándome con curiosidad y una gran sonrisa en su rostro.

No pude evitar pensar en colores azules, amarillos, verdes, en juguetes como pelota, trenes, carros, incluso aviones.

Imagine el día en que mi hijo sea un casanova igual que su padre en su juventud, el día en que llegue a casa con su primera novia, o que sea el más deseado en toda la preparatoria.

Sin pensarlo deje salir una sonrisa de orgullo.

- Amarlo demasiado, jugár con él lo que él quiera, apoyarlo en todas sus decisiones...que nunca le falte nada - Las palabras salieron solas, pero tuve que omitir la parte del casanova, no quería morir antes de conocer a mi hijo.

- ¿Si fuera niña? - los ojos de Elena cada vez estaban más abiertos ante mis posibles respuestas.

Cuando comencé a imaginar que sería de mi hija si eso fuera, la sonrisa que tenía hace unos segundos desapareció por un rostro serio y frustrado.

Ahora tenía que vivir pensando que si tuviera una hija debería cuidarla demasiado para que nadie la lastime, que nadie juegue con ella.

El solo hecho de imaginar que un día ella podría llegar a presentarme a un novio, el día que llore un día entero en su cuarto por que un desgraciado sin piedad la lastimó o cuando pidan su mano me llenaba de un sentimiento desconocido.

Tenía amigos cercanos que ta tenían hijos adolescentes, cuentan ellos que tubieron la misma sensación, la describieron como "Celos".

- No la dejaré salir, será mi princesa, debo cuidarla de todos los malditos bastardos que quieran aprovecharse de ella, tendrá novio hasta los 40 años si es necesario, cuando ella pueda pensar y razonar perfectamente que quiere.

No se en que momento me puse de pie, podría decir que el tema me había alterado.

Elena no pudo evitar reír, se burlaba de mí, en mi propia cara, justo frente a mi.

- No es gracioso cariño - La mire con una mirada de desaprobación.

- Lo que tu digas, tendrá novio hasta los cuarenta y será virgen hasta los 50 - Elena dijo esto y se levantó para ir a la orilla del mar dejándome pensativo.

Tenía muchos temas que investigar antes de la llegada del bebé, el primero sería sobre sexualidad, se que todavía tenía como 15 años aproximadamente antes de que pasara eso pero un padre precavido valía por mil. La frase quedaba mejor si era a mi favor.

Cuando me gire para ver a Elena quien estaba en la orilla del mar pude notar su belleza, ese color de piel tostado en todo dorado hacia que luciera extremadamente sexy.

Cuando ella se giro de perfil pude notar su silueta, tanto de adelante como de atrás, pero había algo que llamó mi atención.

Era diminuta la diferencia pero existía, un pequeño levantamiento en el abdomen bajo de Elena. Sería que mi hija estaba creciendo o era que Elena había subido de peso por los antojos. No lo sabía, pero aún así no pude dejar escapar una lagrima de felicidad, dicha felicidad que me brindaban Elena y lo que fuera que estuviera en camino.

Nuevo capítulo chic@s ❤️

Desde el punto de vista de Cristopher 🤗.

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