ALBA
Son las siete de la tarde y estamos preparando la fiesta sorpresa de Natalia. Los del hotel nos han dejado una sala lo suficientemente grande como para que estemos todos cómodos, que tiene una terraza trasera ideal para salir a fumar. María y Marina pegan globos y adornos en las paredes mientras Dave y Noelia ponen en la mesa los canapés y las botellas. Yo pinto un gran mural de felicitación que sostendremos cuando Natalia entre en la sala.
- ¿Cómo va eso Reche? – pregunta María acercándose a mí.
- Aún falta un poco
- Pues date prisa que en media hora voy a por ella.
- ¿¡Media hora!?
- Sí, pero vaya que no te preocupes, yo ya lo veo perfecto
- Eres una artista hermana – apoya Marina llegando también a nuestra altura.
- Me gustaría tener más tiempo para perfeccionarlo – tuerzo el morro.
- Venga anda, que a Natalia le va a encantar.
El sonido de unos nudillos en la puerta provoca que mis ojos se agranden.
- ¿No será ella?
- Que no chiquilla, que se estaba duchando – interviene Dave
- ¿Quieres tranquilizarte? – pregunta mi hermana con sonrisa burlona
La puerta se abre ligeramente y Vanesa asoma la cabeza. Puedo ver el gesto de desagrado de María.
- Alba ¿puedo hablar contigo un momento?
- Pues me pillas bastante ocupada
- Es importante
Suspiro y miro el mural por última vez, supongo que no está tan mal.
- Pasa
Me levanto y salgo con Vanesa a la terraza.
- ¿Alguna confirmación importante?
- No... desgraciadamente no vengo a hablarte de trabajo
- ¿De qué entonces?
- De tu novia – suspiro
- Si vas a empezar otra vez con lo de siempre no quiero escucharte, enserio Vanesa, te aprecio y no me gustaría que intentaras meter mierda en mi relación. Soy feliz con ella.
- Precisamente porque yo también te aprecio necesito demostrarte que se está riendo de ti.
- ¿A si? ¿Y cómo vas a demostrarme eso, a ver?
Mete la mano en el bolsillo derecho de su cazadora y saca un teléfono móvil para empezar a buscar algo.
- Tienes que escuchar esto
Miro el móvil con miedo y trago saliva, esto no pinta nada bien. Vanesa le da al Play y enseguida reconozco la voz de María.
- ¿Os disteis los números no?
- Sí.
- ¿Y habéis hablado?
- No sabes las fotos que me ha mandado, Mary
- ¿Qué la camarera te ha mandado fotos guarras? ya me las estás enseñando.
- Alaaa cochina, que son privadas.
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Nuestra canción.
RomanceAlba y Natalia viven y estudian en Madrid. La música hace que se conozcan y tras descubrir el talento de la otra, deciden componer una canción juntas. Esto hará que se unan, construyendo una bonita relación de amistad y puede que algo más. Lo que e...