Capítulo 29.- "¿prometes no hacer ninguna locura?"

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___________.

Hace un ademán de tomar la bolsa provocando que SeHun sonría orgulloso. Cree que ya está todo ganado, pero no es así. JungKook tuerce el gesto lentamente y me guiña un ojo antes de mirar a la puerta. Me está indicando que corra en cuanto él actuara, aunque no me parece buena idea dejarlo solo. Haré lo que él me pide. JungKook es fuerte, ágil y sabe perfectamente cómo actuar en una situación así.
Me maldigo por haber entrado en el cementerio, solo he empeorado las cosas porque ahora no solo corro peligro yo, sino también él y todo el plan. Aunque, por otro lado, siento crecer una fuerza arrolladora en mi interior; quizá es verdad que guardo en mi interior a una mafiosa...
Me gustaba la sensación que se estaba apoderando de mí.

SeHun se remueve al notar la tardanza de JungKook. Aquel descuido es perfecto para arremeter. JungKook le da un codazo en la nariz y se gira para tomarlo del cuello. La pistola cae al suelo y pienso en tomarla, pero no sé cómo utilizarla.
Me sentí inútil mirando cómo JungKook reduce a SeHun increíblemente rápido.

-¡Corre, ______! ¡Ya!

Esa es la única forma de ayuda que puedo ofrecer en ese momento. No puedo golpear a SeHun, eso solo va a traer más problemas y no sé disparar; solo huir con rapidez.
Estamos a unos metros de la salida. Al principio no me lograba percatarme de que me están siguiendo y de que lo hacen a buena velocidad, pero yo corro aún más rápido. Tan rápido que ni siquiera percibo a JungKook corriendo entre ellos. Cuando me doy cuenta, me detengo y les miro decidida. Ellos no se detienen, continúan corriendo hacia a mí cargando sus armas y preparándose para dispararme. JungKook hace lo mismo, pero se para, solamente apunta y dispara sin pensar (incluso sin prepararse) a los tres hombres que me siguen. Ni siquiera parpadeo. Debería sentir miedo al ver a JungKook dispararles de aquella forma. Aunque ya lo he visto empuñar un arma, no lo había visto matar. Y está acostumbrado a hacerlo, se nota en su destreza y puntería. Camina hacia uno de los hombres que aún se remueve en el suelo, lo observa con una mueca en la cara y vuelve a disparar con frialdad. Lentamente, levanta sus ojos del suelo y me mira, muy serio. Tengo delante de mí al verdadero Jeon JungKook.
Le sostengo la mirada con compostura. Nunca he sentido esa clase de seguridad en mí misma. La firmeza y la templanza se van extendiendo como una telaraña por todo mí ser. Avanza hacia mí buscando algo en el bolsillo de su chaqueta. Cuando me alcanza, saca la mano con algo entre los dedos y me atrae hacia su pecho. Puedo ver pequeñas heridas en su bello rostro. Me mira compasivo, pero enseguida cambia la expresión al ver que en mis ojos no hay ningún reproche.

-Quiero que vuelvas a la reja, salgas y le digas a Taehyung que te saque de aquí, ¿entendido?
Su voz se entremezcla con el sonido de un trueno. Niego con la cabeza y me acerco aún más, rozando sus labios.
-No me iré sin saber que estás a salvo.- Mi negativa no parece gustarle.
-___________, por favor.
-¡No! ¡No pienso dejarte aquí e irme sin saber cómo va a terminar todo esto!
-¡No puedes hacer nada aquí! ¡Solo pondrías tú vida en peligro!
-¿Y la tuya? ¿Acaso no importa?
-Eso es lo que estoy haciendo, poner mi vida a salvo.- Mis ojos se abren y un ligero rubor se pone en mis mejillas. Lo miro con todo el amor que siento. Agacho la cabeza y me apoyo en su pecho, deseando besarle. Acaricia mi cabello apoyando su barbilla en mi cabeza-. Por favor...-Asiento lentamente, mirándole-. Yo iré detrás de ti-. Miro mi mano y vie el reloj-. Escóndelo ¿de acuerdo?-. En mis manos está poniendo a recaudo todo el proyecto y ni siquiera vacila al hacerlo. Sin esa tarjeta, el ojo no vale para nada. Asiento con la cabeza antes de que intentara darme un beso. Varias balas rebotan en nuestros pies impidiéndolo y JungKook me lanza hacia delante. Nos escondemos tras un mausoleo, pero aquello no parece ser suficiente para él. Me tumba en el suelo y se coloca encima, como escudo, para protegerme. Me toma del brazo y me levanta del suelo luego de unos segundos. Los disparos continúan, pero no en nuestra dirección. -¡Corre!
Salgo disparada intentando mantener mi respiración regulada. Corro lo suficiente hasta que veo la reja abierta y el Mercedes frente.
-¡Déjame manejar, déjame manejar!- grito repetidamente a Taehyung.- Salte y déjame manejar.
-¡¿Qué demonios ha pasado?!- pregunta él fuera del coche.
-¡Ve al otro asiento y súbete!- grito al pisar el asfalto.
Al poco JiMin y JungKook se encuentran detrás de mi. El sonido de un disparo se hace presente y vi como JungKook se lleva la mano al brazo. JiMin se acerca a ayudarle.
-Estoy bien, solo es un rasguño.
Mi garganta se hace un nudo. Me subo al asiento del piloto, empiezo a acelerar sin soltar el freno de mano. El sonido del motor me hace perder lo que estaba pensando. En ese momento noto que la antigua ___________ que queda en mí, ruge. He dejado de tener miedo y me concentro únicamente en salir de aquí cagando leches. Nos sacaré de aquí.
-¿Qué mierda?!- grita JungKook- ¡Taehyung! _______ Bájate del maldito auto y deja que Taehyung maneje.

Negativo más negativo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora