VIAJANDO A TU LADO 🚀 © COMPLETA [EDITANDO]

CAPÍTULO XVI.- VOLVIENDO A TI.

Al despertar estabas abrazándome, frente a frente miré tu rostro para luego tomarlo, lo acaricie con lentitud pasando desde tus mejillas hasta tus labios, acaricie tu cabello por varios minutos hasta que abriste tus ojos, sonreíste — Hola pequeña. — tomando mi rostro dejando un cálido beso en mis labios.

— Hola dormilón. — sonrío.

— ¿Qué hora es? — desconcertado.

— Me dirás tu porque yo tampoco lo sé. — río.

— Se me había olvidado entregarte tu celular. — levantándose.

— Espera, no te vayas. — deteniéndolo.

— Solo iré por ellos enseguida vengo. — retirándose del lugar.

Me levanto buscando que más ropa encuentro, sacando un suéter de peluche blanco demasiado grande -pues será esto. — tomo una camiseta de tirantes de Luka para ponérmelo abajo del suéter para cuando me salga de bañar.

— Disculpa fue lo que encontré en el camino por si te daba frío. — sonriendo — discúlpame.

— No seas tonto para la próxima procura avisarme. — le guiño el ojo.

— Claro. — ríe — toma aquí está el celular, más te vale darte prisa ya es un poco tarde.

Miro el celular — Las doce y media.

— Sí, así que date prisa. Bajaré a preparar algo para desayunar ¿te parece?

— Maravilloso.

— Bueno vete arreglando. — guiñe su ojo para luego salir de la habitación.

Tomó la ropa y la pongo sobre la cama — tendré que usar nuevamente este pantalón, que coraje. — entro al baño y tomó una relajante ducha, terminó y seco mi cuerpo con unas toallas, me pongo frente al tocador y comienzo a cepillar mi cabello para luego colocarles algunos pasadores que encontré en un cajoncillo con gel -solo espero que se hagan. — deje toda mi cabeza con el cabello hecho rollito.

Lave mi cara y tomé algunos maquillajes que traía en mi bolsa que por fin me regreso Luka, me vestí y me puse mis botas larga de tacón came, me recosté por un momento en la cama en lo que el cabello se secara —En estos días no he podido superar el sueño de aquel día, todo lo que he vivido me recuerda a ese hombre y en ese lugar tan extraño, el nombre de él era... Ya sé Amenadiel, que extraño nombre no sé por qué lo tengo tan grabado, mis sueños cada día me dejan más confundida con mi realidad, lo que sí sé, es de que tengo miedo a no cumplir la promesa con mi padre, esa venganza que juré cumplir y el día de hoy estoy dudando; solo quiero vivir con mi verdadero yo, no con esa falsa máscara que cargo a diario. En estos días Luka me ha enseñado bastantes cosas, que a pesar de las dificultades todo se puede si lo deseas con el corazón, él lo dejo todo por mí, por pasar este fin de semana a mi lado; pero yo, yo tengo miedo de dejar ese pasado, para entregarme completamente a él — ¿Quién podrá estar al lado de una TONTA? — tapando mis ojos con mis manos. Después de recordar a mi padre y esa promesa me dispuse a levantarme y reponerme el maquillaje, toqué mi cabello y estaba menos húmedo, solté uno por uno cada rol.

— Yelina, ya está preparado el desayuno. — gritando desde la cocina.

— Si, si ya voy. — quitando los roles más deprisa — bueno ya están — acomodando algunos y poniendo un gorrillo en mi cabeza.

Bajó a la cocina y la mesa estaba preparada con fruta picada y unos hotcakes en cada plato — será mejor que me acompañes a desayunar. — sacando una de las sillas para sentarme.