CAPÍTULO XIII

1 0 0
                                    


Una llamada la sacó de sus pensamientos mientras se encontraba dentro del taxi. Sé impresionó al ver que era Calixto, la persona en quien tanto pensaba. Atendió y se dedicó a escuchar.

-Elysha, quiero que sepas qué lo siento mucho por todo lo que te dije el otro día, y también por llevarte a ese lugar horrible...-Dijo él con una voz muy triste.

-Calixto sabes qué te perdono, y lo lamento mucho por alejarme de esa manera. Me estoy dirigiendo a tú casa, si me permites quiero visitarte un rato.-

-¡NO!, no vengas por favor... No quiero ver a nadie. Déjame solo, ya no quiero seguir con esto. Solo quería irme disculpándome de ti, pero olvídame que yo estaré en mi mundo de dónde nadie me podrá sacar jamás...-Comentó antes de que se cortara la llamada abruptamente.

Ella no sé convenció de lo que él le dijo, sabía que algo le estaba pasando, por lo que no se rendiría. Cómo había mucho tráfico, le pagó al taxista y comenzó a correr por varias calles para llegar más rápido. Después de diez minutos corriendo sin parar, llamando la atención de más de una persona, llegó al edificio dónde vivía su amigo. Sé adentro subiendo las escaleras ya que el ascensor nunca llegó a la planta baja. Casi sin aliento logró llegar al piso siete y empezó a buscar la puerta número setenta y cuatro al final del pasillo.Al tocar la puerta desesperadamente sé dio cuenta que estaba estaba entreabierta, lo que le hizo preocuparse aún más. Sé adentro y lo que vio le impactó, pues toda la casa estaba hecha un desastre. Parece que hubo una fiesta anoche pero muy descontrolada. Con botellas por todo el suelo, restos de comida por todas partes, varios adornos rotos y todos los muebles tirados fuera de su lugar. Intentó caminar con cuidado de no resbalarse con nada, no veía indicios que indicaran el paradero de su amigo, por lo que comenzó a llamarlo por su nombre por todo el departamento.

Al llegar a su habitación, observó que el desastre continuaba, pero además encontró un portarretrato roto a un lado de la cama, y en la foto salía su amigo junto con la que supuso que era su madre, una mujer de tez morena, regordeta y de cabello corto oscuro. Empezó a imaginarse que él había tenido una noche bastante alocada y luego entró en una profunda depresión, inmediatamente temió por la vida de él, relacionándolo con su pesadilla. Sacó su celular y se apresuró a marcar el número de él. Esperó unos segundos hasta que escuchó el sonido del teléfono proveniente del baño. Sé acercó hasta tocar la manilla, sin embargo, al girarla comprobó que estaba cerrada. Decidió tocarla y llamarlo por su nombre, pero al no obtener respuesta alguna supuso que verdaderamente algo malo le había sucedido. Busco varias herramientas para tumbar la cerradura. Dio varios golpes fuertes hasta que lo logró. La escena que visualizo la dejó en shock completamente paralizandola. Calixto estaba tirado en el piso, sin camisa ni zapatos. Ella se acercó despacio hasta tocar su cuello para comprobar si este respiraba, al no obtener respuesta, visualizo junto a él un frasco de píldoras completamente vacío. No podía creerlo, su amigo sé había intentado suicidar. No permitió que el miedo la detuviera. Sabía que no tenía mucho tiempo, por lo que marcó al novecientos once y pidió una ambulancia lo más rápido posible. Luego trató de sacarlo del baño para que el rescate fuera más sencillo, lo arrastró como pudo. Al verlo en ese estado comenzó a llorar y a pedirle a Dios con todas sus fuerzas que le diera vida, qué no sé lo llevará aún. El ruido de una camilla entrando le interrumpió, indico dónde se encontraban. Inmediatamente los paramédicos lo auxiliaron, subiéndolo a la camilla y llevándolo hasta la ambulancia. Ella sé subió junto con ellos, pues él no tenía a ningún familiar cerca, no pensaba separarse de él bajo ninguna circunstancia.

Al llegar al hospital, lo atendieron de emergencia, los doctores corrían para salvarle la vida. Elysha sé tuvo que quedar en la sala de espera, con mucha angustia y preocupación de lo que estaba aconteciendo. Le pidieron información sobre la familia de Calixto, pero ella no los conocía para avisarles, por lo que entendía él estaba solo en el país. Pasaban las horas y la mortificación aumentaba, por lo que se le ocurrió llamar a las personas que estaban con ella en el grupo de oración para que pidieran por su amigo para que Dios le diera vida. Ella empezó a clamar en su mente, por el bienestar de aquel joven, pedía al Señor que le diera una nueva oportunidad de vida. Pensó que cuando él saliera de esto, ella se encargaría de ayudarlo y cuidarlo. No le importaba hasta mudarse para estar cerca de él y no permitir que cometiera otra locura. Era casi entrando a la noche, cuando un doctor se le acercó para explicarle la situación de su amigo. Le habían realizado un lavado de estomacal por la cantidad de medicamentos que ingirió, casi lo pierden en el proceso, además de que una úlcera gástrica se revento, causándole una hemorragia interna importante. Se encontraba estable y en cuidados intensivos, donde pasaría toda la noche. Únicamente le permitían verlo por cinco minutos.

Elysha se adentro por los pasillos hasta que atravesó la puerta de *UCI. Se colocó los implementos esenciales para ingresar, y luego busco la última cama del fondo dónde estaba su amigo. Observó cómo su rostro moreno estaba algo pálido, sin expresiones. Sus ojos estaban cerrados, y al parecer dormía plácidamente. Aún no lograba reaccionar, estaba inconsciente. Le sujetó la mano suavemente y en ese mismo lugar hizo lo único que sabía que podía ayudarle, oro por él para que ocurriera un milagro y sé sanará. Cuándo pasó el tiempo estimado tuvo que retirarse, pero regresaría por el temprano. Sin más se marchó a casa a descansar.

 Sin más se marchó a casa a descansar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

*UCI: Unidad de Cuidados Intensivos 

Propósitos  -(En Creación)-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora