One-Shots Brallon.

I don't know you.

But I love you.

Despertó, y al encontrarse con una habitación que le resultaba totalmente desconocida, entró en pánico, se sentó en la cama y miró al rededor. La cama a su lado estaba desecha, era obvio que alguien había estado ahí. Miró por debajo de las sábanas, seguía vestido, suspiró en alivio. Se dedicó a registrar la habitación, pero al no reconocer nada, no logró calmarse del todo. Decidió levantarse a registrar donde estaba, a ver si así algo le resultaba familiar, tal vez su cabeza le estaba jugando una mala broma. Pasó por un pasillo con dos puertas además de la que acababa de cerrar, y bajó la escalera, para luego voltear y encontrarse con la cocina de la casa. Entró, y vio a un muchacho sentado mientras bebía de su taza, no supo reconocer si era té o café, pero eso no importaba, el sujeto no le sonaba de nada.

—Buenos días—Sonrió el extraño—, pareces asustado ¿Pasa algo malo?—Dallon no dijo nada, a lo que el sujeto rió un poco y bajó la mirada mientras dejaba su taza a un lado—De verdad no te suena nada ¿Verdad?

Dallon negó con la cabeza, el sujeto, por el contrario, asintió.

—Claro—Soltó, para luego levantarse, y abrir un cajón.

Dallon se le acercó, obviamente curioso. Sea lo que sea que hubiera ocurrido, esperaba que no saliera de entre el desconocido y él.

—Ten—Dijo el desconocido, entregándole una libreta claramente usada al más alto.

El mayor la miró unos segundos antes de tomarla, y abrirla en la primera hoja para leer su contenido.

"Hola, Dallon, por favor no te asustes, nada malo está ocurriendo. Sé que nada de aquí te suena, y que no sabes quién soy. Mi nombre es Brendon Urie, un gusto." Dallon levantó la cabeza, y se encontró con el sujeto que ahora recibía el nombre de Brendon sentado de vuelta en su lugar con la taza en sus manos, haciéndole un gesto con la cabeza para que siguiera leyendo. "Te sonará loco, lo sé, pero tú y yo somos novios desde que tienes dieciocho años. Dallon, tienes Alzheimer desde un accidente del que luego te contaré si así lo quieres. todos los días amaneces sin recordar nada de tu vida, y al ver que cada mañana tuve que presentarme nuevamente, decidí hacer que escribieras aquí lo que ocurría durante tu día, para que lo leyeras al día siguiente, así que, adelante, lee todo lo que quieras, puedo esperarte."

Antes de pasar a la siguiente hoja, volvió a levantar la mirada hacia Brendon ¿De verdad era su novio? Porque si así era, vaya, ¿cómo un idiota como él podría haber conseguido a alguien tan lindo como el muchacho que tenía en frente?

—... ¿Brendon?—Llamó, recibiendo así la mirada y la sonrisa del menor.

—¿Sí?

—¿Esto no...? No es un juego ¿Verdad?

Brendon rió un poco—Qué gracia, preguntaste lo mismo ayer—Comentó mientras negaba la cabeza—, no, Dallon, no es un juego ¿No quieres seguir leyendo?

Dallon no respondió, solo pasó de página y siguió leyendo.

"7 de Febrero, 2019.
Hoy, como siempre, desperté sin recordar nada. Brendon estaba a mi lado cuando desperté, y notó que estaba asustado, así que me explicó todo. Decidió darme esta libreta para saber qué he estado haciendo, y yo creo que es bastante útil.
He estado mirando a Brendon todo el día, me parece muy lindo, y por cada minuto que pasa, más sentido me hace eso de que es mi novio, porque es la persona más dulce de la tierra, o al menos eso creo, por lo que he visto hoy."

Avanzó unas cuantas páginas.

"15 de Marzo, 2019.
Sigo sin recordar nada, Brendon dice que no importa, que tampoco espera que recuerde algo, pero siento que le hago daño, según lo que he leído, cada mañana me pregunta si pasa algo malo, y cuando nota que sigo sin recordar, aparta la mirada. Hoy lo hizo otra vez, y ahora que sé que es cosa de todos los días, me hace sentir mal. Desearía hacerlo feliz y poder cuidarlo como he visto que él me cuida a mí.
Me pregunto qué clase de persona habré sido antes de perder la memoria como para haber conseguido un novio tan fantástico como él."