Jackson
Jadeo, contenido, mientras me masturbo con el mero recuerdo de esa zorra. No me la puedo quitar de la cabeza y tampoco quiero hacerlo.
Es mía.
El recuerdo de su cuerpo me hace echar la cabeza hacia atrás, recuerdo su leve lloriqueo cuando me enterré en ella con tanta fuerza. La necesito más de lo que admito. No sé cómo fue que Eveline Morrison se volvió adictiva para mí, aún no sé muy bien qué es lo que me atrajo tanto; quizá todo. Tiene una belleza que no es como las demás. Es amena, pura, tiene un atisbo de inocencia que volvería loco a cualquier hombre. Será mía, no pienso resignarme.
Es mi fantasía desde la primera vez que la vi.
El éxtasis llega y me derramo con el vivo recuerdo de su cuerpo. Tiene que ser mía de nuevo. No puedo dejar que se me escape, no esta vez. Quiero tenerla a mi merced, que se arrodille y me suplique que la deje ir mientras que yo me deleito con su sufrimiento, sus lágrimas y su dolor. Quiero arruinarla. Pero tengo que ser paciente y esperar, por más que quiera tenerla, debo ser calculador y meticuloso.
Ya le dí un susto con las balas. Desafortunadamente, Wiliam Haste estaba de su lado para protegerla.
«Haste». El apellido queda intacto en mi cabeza. La familia Haste y yo tenemos trato desde hace décadas. Nunca hablé con ellos personalmente, pero mi padre lo hizo en su momento. Conozco a cada miembro de esa familia.
Me pongo de pie y me arreglo los pantalones antes de ir a servirme un trago. No puedo parar de pensar en esa mujer, nunca dejé de pensar en ella y mucho menos desde que la probé. Mi cuerpo la clama.
—¿Ideando un nuevo plan?
Nick se aparece en el marco de la puerta y avanza hacia mí para empezar a servirse un trago. No le doy mucha importancia.
»Te noto un poco ido. ¿En qué piensas?
—En Eveline Morrison.
—De nuevo con esa mujer... —murmura—. Creí que ya la habías olvidado. ¿Qué es lo que tiene de especial la famosa Eveline? No puedo esperar a conocerla.
—Paciencia y lo verás.
—¿Planeas tomarla?, creí que solo ibas a divertirte un poco.
Noto su sorpresa en su expresión y clavo mi mirada en la suya.
—Planeo tomar lo que es mío y me pertenece desde hace tiempo. Nadie ni nada va a evitarlo.
—¿Cuándo?
—No importa cuándo, solo ten garantizado que lo haré.
No importa a qué costo. Cualquiera que se interponga será daño colateral porque Eveline Morrison me pertenece.
Eveline
Cuando llego a la cocina, me encuentro con Carla y Lucas. Este último corre a abrazarme y me agacho para poder recibir sus brazos que me rodean.
—¿Cómo estás, cariño? —deposito un beso sobre su frente.
—Muy bien —sonríe—. Te extrañé mucho.
—Yo a ti también.
Me acerco a saludar a Carla y después de hablar un poco con Lucas —quien se queda merodeando por la cocina—, ayudo a Carla a preparar la cena y me tomo el tiempo de hablar un poco con ella.
—Mañana tengo un chequeo por mi embarazo —dice mientras corta las verduras con agilidad—. Saqué un turno, es por el mediodía. Te lo digo porque quizá quieras llamar a Harmony o... no sé, buscar a alguien, tal vez.
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Todo Por Mi Hijo
RomanceDUOLOGÍA TORMENTO - LIBRO I El dolor, la pena y la pérdida fueron inminentes protagonistas en la vida de Eveline Morrison durante años en los que sufrió al ser repudiada por las personas que más amó; su familia. Sin embargo, siguió adelante con su v...