Oficina

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Salí corriendo de la escuela hacia la parada del autobús donde se suponía que mi uber esperaba, a los 5 minutos ya estaba ahí, en un cuarto de hora me encontraba al pie del edificio, pagué por el traslado y entré por la enorme puerta de cristal hasta el lobby donde se encontraba la recepcionista.

-Hola buenas tardes, soy Tara la chica que hará el servicio social.

-Buenas tardes, un gusto, permíteme tu credencial escolar y en un segundo te indico que harás.- Me dijo amablemente y yo le mostré la credencial que previamente había sacado de mi cartera.

-Muy bien, como verás aquí la gente viene y va, con ello hay muchas cosas que hacer pero tu solo llevarás cafés, papeles y cosas por el estilo, con los días le agarrarás el ritmo y te será más fácil.- Me dijo con una sonrisa sincera y de confianza.

-Muchas gracias.-

-No es nada, por cierto necesito que vayas al último piso y le des estos papeles a la secretaria y le digas que el señor Fait debe firmarlos.- Dijo dándome una carpeta negra con el logotipo de la empresa.

-Bien, nos vemos luego.- Dije sonriendo y me di la media vuelta en busca del ascensor, presioné los botones y esperé a que subiera. No había nadie en el escritorio donde se suponía que debería de estar la secretaria así que toqué la puerta del director de la empresa para darle los papeles y luego irme a terminar otros trabajos que me dieron en el pasillo mientras llegaba.

-Adelante.- Se escuchó una voz grave y supuse que era un hombre, pasé y empecé a hablar.

-Buenas tardes, soy Tara, me mandaron a entregar estos papeles que debe firmar, se los iba a dar a la secretaria pero no estaba afuera, espero que no se moleste.- Dije con la mirada abajo fijándome que todos los papeles estuvieran en orden dentro de la carpeta y que no faltara ninguno.

-Ehm sí, déjalos sobre la mesa.- Dijo y yo levanté la mirada, era un chico de alrededor de 25 años, pelo oscuro y ojos profundos, una hermosa cabellera, definitivamente era muy apuesto y grande.

-¿Necesita algo más?- Dije acomodando la carpeta sobre la mesa.

-Busca a mi secretaria y dile que está despedida.- Dijo sin despegar los ojos de la computadora mientras tecleaba unas cosas.

-¿Despedida?, está bien, disculpe ¿Cuál es el nombre de su secretaria? es que soy nueva y no conozco al personal.- Digo disculpándome.

-¿Nueva?.- Dijo despegando los ojos de su computadora.- Ah tu eres la chica del servicio social, no te preocupes lo haré yo.- Dijo abriendo la carpeta que puse sobre la mesa hace unos minutos.

-Bien, yo me retiro, con permiso.- Dije dando la media vuelta.

Caminé por el pasillo recordando que la secretaria del 5to piso me pidió que le llevara un café, fui a prepararlo y se lo llevé, al parecer le caía bien a casi todo el mundo. Me asignaron un cubículo en la planta baja a un lado de la recepcionista donde tenía un teléfono con el cual todo el personal de la empresa se comunicaba conmigo para cualquier cosa o si la recepcionista no estaba yo la pudiera suplir.

Al no tener ningún pendiente en la empresa saqué mi cuaderno de finanzas y comencé a hacer mi tarea ya que el maestro era muy estricto y dejaba mil tareas para el día siguiente, escuché que alguien tocó la puerta y rápido cerré mi cuaderno pero ya habían entrado y solo logré que la extraña persona se acercara a ver que era lo que hacía.

-¿Así que haciendo tareas en horario de trabajo eh?- Dijo el señor Fait lo que me puso nerviosa porque yo sabía que estaba mal hacer tareas en este horario.

-Perdón señor Fait, no se volverá a repetir, lo prometo.- Dije y comencé a guardar mis libros.

-No te preocupes, a tu edad hacía lo mismo.- Dijo sonriendo al ver los apuntes de mi cuaderno.

-Entonces...¿Está bien hacer mi tarea si no tengo nada pendiente?- Le pregunté dudosa.

-Claro que sí, Tara. De hecho venía a decirte que ocupo que lleves unos papeles a otro edificio, yo te llevaré pero tu tendrás que bajar ya que no hay estacionamientos cerca y como te enteraste hace rato despedí a la secretaria.- Dijo viendo su reloj.

-Ehm sí, ¿ya?- Pregunto tomando mi teléfono del escritorio y metí las cosas a mi mochila.

-Sí, si quieres deja tu mochila aquí, volveremos en cuanto entregues los papeles, son las 18:00 hrs. debemos apurarnos.- Dijo saliendo del cubículo y le sigo por un lado.

Llegamos a su auto que hasta después noté que era un audi, impresionada subí y el subió después de abrirme la puerta. El trayecto duro como 30 minutos por el tráfico.

-Busca al señor Bruce, le das la carpeta y le dices que tiene que firmar, cuando los firme regresas y yo estaré aquí, cualquier cosa te llamaré.- Dijo todo rápido y bajé del carro pensando en como obtuvo mi numero pero tal vez fue al momento de mi pedido por hacer el servicio en su empresa.

Entré al edificio y busqué al señor Bruce, tardó unos 10 minutos leyendo y firmando, bajé por el elevador, el señor Fait estaba en la entrada y subí al auto entregándole los papeles.

-Listo.- Comenté y me abroché el cinturón de seguridad.

-Muy bien, vamos a la empresa, ya son las 7 y ya se pasó tu horario, llamale a tus padres, puede que estén preocupados.- Dijo mientras le bajaba a la radio y yo le explicaba a mamá que tuve que llevar unos papeles al otro lado de la ciudad y colgué.

-¿Señor Fait, podemos subirle a la radio?.- Le dije algo nerviosa, estaba sonando Sunflower de Post Malone y era mi canción favorita.

-Claro y no me digas señor, no soy tan viejo después de todo.- Dijo riéndose mientras subía el volumen.

-Gracias, Chase.- Dije y comencé a cantar en bajito mientras la ventana de mi lado iba abajo y el aire frío golpeaba mi rostro, la voz de Chase hizo aparición mientras cantaba, tenía una voz hermosa, si no fuera empresario podría ser cantante y de verdad que sería muy famoso.

Llegamos a la empresa riendo, cantar siempre alegra a las personas, el tiempo me lo ha demostrado.

-Hey, ya es tarde, te llevaré a casa, toma tus cosas.- Dijo entrando al edificio, ya quedaban muy pocas personas y todas eran de limpieza.

-No hay problema, puedo tomar un uber.- Dije desbloqueando mi teléfono para pedirlo.

-No te estoy pidiendo permiso ni autorización, sube al auto.- Dijo ofreciéndome una sonrisa.

-Eres un poco mandón, ¿no te parece?.- Dije abrochando el cinturón y viendo como el ponía la dirección de mi casa en su GPS.

-Algo, sí.- Encendió la radio y sonaba Sucker de los Jonas Brothers y de nuevo parecíamos niños pequeños cantando a todo pulmón y riendo cada que sonaba el instrumental.

-Y tienes buenos gustos.- Dije sonriendo de lado.

-Vaya que sí, llegamos.- Dijo bajando el volumen de la radio.

-Gracias por traerme, nos vemos mañana.- Dije tomando mi mochila que estaba en el asiento trasero.

-No es nada, gracias a ti por la ayuda, descansa, Tara.- Dijo y sonreí para luego cerrar la puerta y caminar hacia mi casa.

Entré a mi casa y mi mamá estaba haciendo la cena y papá se estaba bañando. Subí a mi recámara y me di una ducha, chequé un rato mi cel y me llegó un mensaje.

NUMERO DESCONOCIDO 21:48 hrs

Perdón la hora, ¿Podrías imprimir estos papeles?

ARCHIVO ADJUNTO

Soy Chase

Agregué su número y le respondí.

Sí, mañana los llevaré, descuida

Tengo que irme, descansa

Dejé el teléfono en la mesa y solo alcancé a ver un "ok, igualmente".

Bajé a cenar y platiqué un rato con mis padres sobre como estuvo mi día y al terminar de cenar lavé mi plato, cepillé mis dientes y fui a descansar.

¿Seremos Una Historia Cliché?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora