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Capitulo editado y publicado 24/10/2021.

Que lo disfruten.

♥♥♥♥♥

Toque dos veces con los nudillos de mi mano aquella puerta color marrón, esperando respuesta, respuesta que nunca llegó de parte de mi amigo. Solté un pesado suspiro para luego abrir la puerta sin su permiso.


—Tae, ¿Puedo pasar? —Pregunto de la forma más suave que puedo, y no volví a recibir respuesta. Así que opte por pasar, encontrándome con el castaño boca abajo jugando con las sabanas —¿Cómo te sientes? —Me acosté a su lado enrollando mis dedos en su cabellera, haciendo caricias suaves en él.


—Mi héroe, siempre fue mi abuelo. Desde pequeño siempre quise ser como él —Soltó una sonrisa melancólica para luego llorar y aferrarse a mi camisa.  El tiempo paso y con eso Tae se durmió hipando debido a su llanto. Debía admitir que sentí ternura pero a la vez algo en mi hizo que me sintiera mal, incomodidad, ni idea. Me acomodó mejor para dormir junto a él y cuando despierte me encuentre aquí, a su lado.


[……]

Me remuevo incómoda sintiendo un peso en mi estómago y una mirada en mi.  Abro los ojos perezosamente y me encuentro con la mirada del castaño en mi, mirándome como si fuera algo demasiado preciado para él, como si fuera más de lo que debería.

—Tienes una expresión muy peculiar —Comenté tocando sus mejillas para desviar mi incomodidad por su mirada tan intensa.


—Debo parecer un muerto —Aunque sus ojeras sean muy notables y su expresión triste; sigue siendo el hombre guapo que roba muchos suspiro a las chicas, sobretodo a mi cuando está en modo pervertido.


—¿Quieres la verdad? —Niega.


—Suficiente con la realidad —Suelta un suspiro y mi corazón se encoje.


—Deberías tomar una ducha, eso te despejara un poco. Y te tengo un regalo.


—¿Un regalo? —Me pregunto con un cierto brillo en sus ojos, ese brillo que no quería que desapareciera —¿Qué es?


—Una sorpresa, así que levántate y toma una ducha.


—Lo hago nada más, porque quiero saber cual es la sorpresa, no porque tu me mandas —Dijo como un niño haciendo berrinches, para luego quitarse la chamarra y posicionar la toalla en su hombro e irse al baño, haciéndome reír y negar con la cabeza.


Baje, para dirigirme a la cocina y buscar lo que necesito y rogando que esté. Abro el congelador y busco su helado favorito… ¡bingo! Si hay.


Subí de nuevo a la habitación y Tae aun no sale… Por eso, me entretengo en un programa que encontré mientras espero. Diez minutos después sale del baño con un short holgado, sin camisa y con su cabello húmedo pegado a su frente haciéndolo ver exquisito. Medio me sonríe y toma asiento a mi lado, dándome un beso sonoro en mi coronilla.


—Aquí esta tu sorpresa —Moví el helado de un lado para otro y suelta una sonrisa que me hace querer más de eso.  Quita el helado de mis manos con la alegría de un niño pequeño.


—¡Ron con pasa! —Exclamó con alegría y destapándolo de un sopetón —Mi favorito.


—Hey, yo también quiero —Proteste, al ver como degusta el helado sin mi.
Me da una sonrisa de boca cerrada y m saca de balance en el momento que junta su lengua con helado y se acerca peligrosamente a mi. No hace falta una señal más para acercarme, lo hago sin pensarlo. Termino de acortar la distancia entre nosotros y me siento en su regazo, cosa que lo sorprende un poco.  Lo atraigo hacia mi y lo beso, lento, húmedo y profundo. Introduzco mi lengua en su boca saboreando mejor el helado y el beso se torna más atrevido. 

Daddy Kink [+18] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora