Pov Tae

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Capitulo editado y actualizado el 31/03/2022.

[.....]

(Anuncio viejo) ¡Holaaa! Llegue yo, no había actualizado porque estaba muy emocionada con una trilogía, es muy buena.

Espero que les guste.

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POV Tae


Dos meses y unos días antes (Para ser más exacto)

No estoy seguro de hacer esto, es algo muy arriesgado tanto para mi como para mi familia, pero si da resultado podré liberarme de Gael y su gente… aunque por donde lo miren es como si no tuviera ni opción.

Suelto un suspiro pesado y observo todo a mi alrededor… Tengo 10 minutos esperando al comandante Fernández, en un café algo alejado y él todavía no ha llegado. Es primera vez que vengo a este café, es lindo y bastante cálido… las ventanas dan vista a un hermoso parque que está cubierto con muchas flores de cerezo y todo aquí se siente familiar. El olor del café ligado con galletas me resulta delicioso.

Solo hay pocas personas a nuestro alrededor y cuando entre aquí me detallaron algo extraño, supongo que es porque tuve que cubrirme con un gorro y lentes, por si Gael me ha mandado a seguir y me asegure muy bien que nadie me seguía hasta llegar aquí, pero no debo de confiarme, por eso tengo rato observando todo a mi alrededor y trato de pasar desapercibido.

Por otro lado, Sky no sabe que voy a reunirme con el señor Fernández, fueron las indicaciones de él y lo preferí así también, no quiero que ella se involucre en nada de esto… todo tengo que solucionarlo yo.

Cuando nos reunimos la primera vez, le conté muchas cosas a él, todo lo que hice para pagar la deuda que había dejado su sobrino y él lo entendió… Todavía recuerdo muy bien eso.

—…. Tuve que pasar por todo eso para librarme por todo este tiempo, pero ahora volvieron otra vez —Fernández no me ha interrumpido mientras hablaba, sólo escuchaba y asentía. Mientras que Sky, tomaba mi mano para darme ánimos de seguir hablando.

Observó otra vez al comandante y hace algo que no me esperaba, se levanta y me abraza. Me quedo estático en mi lugar, porque es algo extraño esto. Aun así no me da tiempo de corresponderle porque se aleja y me observa con agradecimiento.

—Muchas gracias. Nunca supe todo lo que sufría mi sobrino. Siempre supe que detrás de su muerte había algo más… pero ya verás, vas a salir bien librado de esto, yo me encargaré de que así sea. 


La voz de Fernández me trae de regreso y prestó toda mi atención a él.

—¿Te aseguraste qué no te seguían? —Pregunta y yo asiento.

—Sí, ¿Por qué me cito aquí? —Sigo mirando todo a mi alrededor

—Porque es un lugar seguro, porque si te das cuenta es alejado y cálido —Asiento de acuerdo con lo que dice — En fin, a lo que vinimos… Tengo un plan para poder liberarte de todo esto. —Me siento más derecho dispuesto a hacer cualquier cosa para que todo me salga bien.

—Lo escucho.

—Bien. La seguridad que tiene Gael es bastante grande, por eso he estudiado todo acerca de él. Nuestro plan sería que entraras encubierto, aprovechando que él quiere que trabajes para él. Por otro lado, mi equipo y yo te estaremos vigilando de cerca para no perderte el rastro.

—¿Cómo van a hacer eso? Ellos no permiten que ningún nuevo entre con aparatos electrónicos, son muy desconfiados y astutos —Es algo loco todo este plan pero lo pienso bien y puede que funcione, lo único malo es que ellos no van a poder dar conmigo. Hay que pensar en algo. Tiene que funcionar.

—He hecho mis averiguaciones y si se puede. Solo hay que implantarte un microchips, son muy pocos conocidos, pero son muy efectivos. Así pasarás desapercibido de todos ellos.

—¿No lo notaran?

—No. Son pocos conocido y hasta ahora solo hay un aparato que da con ellos, pero tengo entendido que todavía eso no ha llegado a la mafia coreana, así que por esa parte vamos algo seguro.

—¿Y cómo van a conseguir ese chip?

—Hace un tiempo lo mandaron a traer de Rusia… pero como te digo, todavía creemos que no ha llegado a la mafia coreana, hemos tenido demasiado cuidado con eso. Aun así uno nunca sabe si el mercado negro no esté a nuestro favor.

—¿Entonces, sería así por suerte que no los tengan ya? —Asiente. Paso una mano por mi rostro, si lo descubren pueden matarme por traicionero. Carajo.

—¿Estás dispuesto? Trataré de hacer todo lo posible de que nada malo suceda, estarás vigilado cada momento.

—¿Y dónde me lo implantaran? —Hago la pregunta que tiene rato rondándome… ¿Ustedes también piensan que es algo descabellado?

—En el brazo para que no sea muy notorio ¿Aceptas?

—Si, no tengo otra opción. Ojalá y esto funcione —Me cruzo de brazos.

»¿Qué pasará con Sky?

—No te preocupes, nos aseguraremos que ella este bien cuidada. Sólo con una condición.

—¿Cuál? —Acomodó mis lentes, para bajarle un poco a  mi nerviosismo.

—Recuerda, ella no tiene que saber nada de esto. Entre menos sepan, mejor estarán —Asiento.

—Está bien, así será.

—Vamos, es hora de colocarte el microchips.

—¿Qué ya lo tienen? —Él asiente.

—Será rápido. 

[......]


Sobo mi brazo un poco, para aliviar el ardor… ya me implantaron el microchips, arde y duele un poco. El chips es demasiado pequeño casi ni se nota, y por eso lo implantaron rápido, pero no fue por encima, si no lo llevaron algo lejos por eso dolió. Después de eso, el señor Fernández me dejo a unas calles de mi apartamento, para que no corriera peligro y yo solo he caminado a paso lentos dejando la gorras y lentes botados por un basurero que estaba cerca. 

El plan ya esta trazado y no pienso fallar.

Mi celular suena con varias mensajes y llama mi atención es el número desconocido.

Desconocido:
Ya voy de camino a ver a tu mujercita. Espero y estés ahí, y si no, te esperó ahí ¿o quieres un incentivo?


¡Mierda!

No no no.

El imbécil de Gael me las va a pagar.

Trató de llamar a Sky y su celular sale apagado.

Demonios…

Bonito día, para tener el celular apagado. Piensa Tae, no te cierres, sigue el plan… Repito una y otra vez, para que mis ganas de matar a Gael no me nublen los pensamientos.

Tomo un Taxi que me lleve a donde vive Sky y poder solucionar todo esto.


[…….]


Presente

Cuando desperté lo primero que vi fue doctores a mi alrededor revisándome y una enfermera chequeando mi vía.. Todo se ve y se sienten tan confuso. Quería que cuando despertará ver a Sky, se que dormí horas, pero aun así por estar dos días lejos la he extrañado bastante. Trató de reincorporarme pero duele, escucho mis huesos sonar, como si tuviera años acostado y ya me estaba oxidando.

Me siento tan ido y fuera de si, ¿Por qué?

Lo último que recuerdo es alguien disparándome y de ahí todo se volvió oscuro.

—¿Te sientes bien? —El doctor a mi lado pregunta y yo asiento. No puedo gesticular palabra, siento la boca muy seca y estómago muy vacío. El doctor moja mis labios con algodón y ya no siento tanta sequedad, pero queda mucha todavía.

—¿Y Sky? —Mi voz sale ronca y rasposa… arde al hablar.

—Esta allá afuera con su abuela, ya les digo que entren —¿Mi abuela? ¿Qué hace nona aquí? Esto es muy confuso.

—No les diga que desperté... por favor, que ellas mismas lo vean —El doctor solo gesticula un está bien y sale. Mientras tanto, la enfermera me toma la presión y otra anota algo, estoy muy bien atendido. Siento un poco de ardor en el pecho; y todavía no pierdo la sensación de que estoy confundido.

Cuando estaba dormido, soñé o escuche, no se, que Sky y nona hablaban conmigo. Pidiendo que despertará, fue tan real y repetitivo a la vez que ahora que lo recuerdo es como si de verdad lo fuera vivido.

—¿Qué pasa con Tae? —Escucho la dulce voz de Sky y mi corazón salta de alegría…

Cuando veo entrar a Nona y a la mujer de mi vida, aunque ellas no me han visto todavía, siento que ha pasado una eternidad, joder como las amo… las observó a las dos y noto que están algo más delgadas y muy ojerosas, tal vez, no han dormido mucho.

Ahora soy el hombre más feliz del mundo.

Mejor dicho, ellas son mi mundo.

—Entren, véanlo ustedes —Cuando Sky fija su vista en mi, sus ojos se le llenan de lágrimas y prácticamente salta sobre mi para abrazarme.

—No me vuelvas a hacer eso por favor, sufrí mucho. Nana y yo sabía que no nos ibas a dejar —Me quejo porque me lastimó,  pero no quiero que se separe igual —Lo siento, lo siento estoy feliz. —Me sonríe mientras se seca las lágrimas.

—No podría dejarlas… nunca… —Me las arreglo para que mi voz no salga tan ronca y se entienda. Sonrió, lo hago, estoy muy feliz.

—Ohh mi niño hermoso, te amo tanto..  No me vuelvas a hacer eso —Mi hermosa nona llora y no me gusta verla así, la abrazo también a ella para que este tranquila.

—¿Doctor que pasa? —Miro a Sky que espera la respuesta del doctor.

—Sólo hay que hacerles algunos exámenes, para ver si está bien. Recibió el impacto de bala en una zona peligrosa y a estado dos meses en coma, hay que asegurarse que todo este en orden —Mi rostro se llena de confusión, ¿Dos meses? ¡Qué demonios!

—¿Cómo que dos meses? Apenas dormí horas —Todos me miran con incredulidad y me doy cuenta que estoy equivocado.

—No, has estado en coma por dos meses mi bebé.

—Ohh mierda.

Daddy Kink [+18] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora