Daddy Kink [+18]

18

Capitulo actualizado y editado 7/02/2022.

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—Hola, Daddy —Mi voz sale en un susurro ronco. Hago un lado mi cabello lentamente, así tipo sensual.

—Sky… —Susurra apenas y suelta un suspiro. Recorre mi cuerpo de pies a cabeza con deseo… su mirada hace que me sienta completamente desnuda.

Esa mirada está llena de aprobación, deseo y me gusta… Me gusta sentirme deseada por él.

Hoy decidí llevar ropa interior muy pequeña de encaje y transparente, con unas medias pantis que me llegan a mitad de los muslos y los ligueros para completar el conjunto… Mis pezones duros se transparenta en la tela de encaje y su vista se fija más que todo ahí. Todo lo que llevo puesto es de color rojo, igual que mis tacones. Solté mi cabello y lo ondule para que me diera un aspecto salvaje. Mientras, que el maquillaje es sencillo, solo utilicé mascara para pestañas y un labial rojo.

Y al final quede satisfecha con el resultado y más al ver como él me mira.

Bien jugada, Sky.

Él entra y cierra la puerta sin quitarme la mirada de encima… Da unos pasos hacia mi, pero yo lo detengo a mitad de camino.

—Detente. Hoy te pedí que vinieras solo para que me ayudes con una clase, es que no los entiendo y creo que voy a suspender esa materia —Hago un puchero y me observa con curiosidad, yo solo me encojo de hombros mirándolo con inocencia. Este fue una idea maravillosa que se me ocurrió en plena clases. Y la excusa que me ayudará a estudiar también fue otra idea, porqué cuando no entiendo una clase siempre me ayuda, o me hace las tareas a cambio de algo por supuesto… Aunque estudiemos dos cosas muy diferentes, él siempre se las ha ingeniado para ayudarme.

—¿Por qué estas vestida así? o mejor dicho ¿por qué estas casi desnuda? —Sonrío y paso un mechón de mi cabello detrás de mi oreja… No se pierde ese movimiento para nada.

—Porque vivo aquí… Porque puedo vestirme como quiera y porque hoy hace calor. ¿Tú no tienes? Además tú solo viniste a ayudarme a estudiar, así que siéntate, por favor —Le señalo donde se va a sentar y hace caso sin rechistar… En la mesa que está al frente del sofá están todos mis cuadernos para que no tenga excusa de quitarme de su lado para que vaya a buscar algo. Si, planee todo muy bien y se que el castaño no va a aguantar tanto.

Cuando me rechazo la ultima vez que estuvimos apunto de tener sexo, me sentí frustrada, pero está semana he estado peor, sin contar lo insoportable que estoy… hasta hice enojar a Emma y me mandó al diablo, ni me habla desde hoy en la mañana. Por eso, que Tae sufra lo mismo que yo toda está semana o hasta peor.

—Bien. ¿Qué no entiendes? —Tomo asiento también, pero lo hago a su lado, muy cerca de él. Nuestros hombros chocan y Tae suspira. Se muy bien que sabe lo que quiero y planeo, por eso no ha hecho unos de sus comentarios traviesos, él sabe que puede perder contra mi.

—¿No te molesta ayudarme, Daddy? —Comento muy cerca de su rostro y un mechón de mi cabello choca en su rostro… Sus ojos se intercalan de mis ojos a mi boca.

Esa mirada de deseo que me vuelve loca es excitante.
Lame su labio inferior y sonríe de lado, porque sabe que eso me afecta y en mis pezones está la evidencia. Miro a su entrepierna y sonrió porque se marca su erección en el pantalón… me contengo porque quiero tocarlo.

No está siendo difícil solo para ti, Daddy.

—¿Qué pretendes Sky? —Paso mi mano por su pierna y lo acaricio… se tensa. Sonrío. Acerco más mi rostro al suyo, solo quedando un pequeño espacio entre los dos… Muerdo mi labio inferior con mucha mala intención de que se rinda de una vez por todas ante mi. Tae solo observa, pero no se aleja y no quita mi mano de su pierna.