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Actualización nueva 1/03/2022.

Ha pasado una semana y no he hablado con el castaño, solo nos cruzamos pero no me habla y por supuesto mi orgullo no me deja hacerlo tampoco.

Así que solo nos lanzamos miradas fulminantes y ya.

Aunque a decir verdad no he estado muy pendiente de él, solo en ese momento cuando nos cruzamos, ya que, tengo muchas cosas en mi cabeza acerca de mis estudios, que a decir verdad creo que me van a volver loca y más con mi proyecto final.

Estudiar medicina no ha sido fácil para mi, tanto que aprender, tanto que hacer, que a veces me entran las dudas existenciales y solo pienso que si soy buena para estudiar medicina.  Debo admitir que el castaño siempre ha estado para mi cuando entro en duda, pero ahora que no me habla siento que tantas cosas me van a volver loca.

Estoy frustrada.

Vaya que lo estoy...

Se que soy fuerte para pasar esto, pero justo hoy que mi increíble tutora de proyecto, solo dijo que mi compañero y yo no íbamos por buen camino, ya que no le gustaba lo que estábamos haciendo, sólo me desarmó todo y yo sólo quiero la perfección…. Y también quiero ahogarla a ella por no aceptar las mejoras que ella misma nos mando a hacer la vez anterior a nuestro proyecto.

Juro que  Mart y yo pensamos que ese era el buen camino, pero esa bruja digo profesora me jodió la paciencia a decir que casi todo estaba malo.

Enserio estaba a punto de mandarla al demonio, pero tuve compostura y solo acepte sus criticas destructivas con una sonrisa forzada y un “está bien”…. Tampoco tenemos el tiempo suficiente por que al jurado se le ocurrió la brillante idea de adelantar nuestra presentación. Cuando me entere solo me puse histérica, casi lloré, pero soy fuerte.  No he dormido en días, solo he tomado litros de café para mantenerme despierta y poder continuar, aunque se que no dormir es muy dañino para la salud. Pero debo admitir que parezco un zombi, arrastrándome por la vida, literalmente.

Estoy enojada conmigo misma, por no ser capaz de soportar presión.

Sigo ida en mis pensamientos, hasta que veo al castaño venir hacia mi.

Ya creo que la falta de sueño me afecta mucho porque enserio lo estoy viendo venir hacia mi. Hago una mueca de confusión, creí que no me hablaría por una semana más.

—¡Hey! Estoy hablando contigo, Sky —Vuelvo en si y veo que de verdad me está hablando a mi… y yo tan perdida, otra vez, en mis pensamientos que no le presté atención.

—¿Qué pasa? —Respondo y lo detalló de pies a cabeza, de verdad hoy lo veo más guapo. Su cabello está más largo, me imagino halando de él y me sonrojo. Sonrío por mi pensamiento mientras me como a Tae con la mirada. Va vestido de negro completamente y le sienta muy bien.

—¿Me escuchaste verdad? —Lo detallo otra vez y supe que me estaba diciendo algo, pero no escuche en lo absoluto por haberlo violado con la mirada. Mis mejillas se tiñeron de rojo de nuevo y negué. Sonríe despreocupado y un suspiro sale de mi de repente.. Si lo necesite mucho.

>> ¿Te pregunte que cuanto has dormido? —Eso si lo escuche —Pero, ni caso me hiciste porque me comías con la mirada, me siento usado. —Finge indignación y me hace reír porqué se que le gusta que lo mire así —Enserio Sky se te ven unas ojeras terribles ¿Qué te pasa? —Lo miro incrédula y asiento.

—¿Tan terrible me veo para que te acercaras a hablarme? —Asiente y yo jadeo. Necesito dormir, pero no tengo tiempo.

—Lo siento por eso, pero estaba esperando que me pidieras disculpa por lo que le hiciste a mi amigo. Pero mujer eres orgullosa, solo me acerque porque tengo días viéndote arrastrándote. Por eso se que no has dormido —Espera mi respuesta y yo solo sonrío. Si, estoy lenta también.

—Es que he estado muy ocupada y no me ha dado tiempo de pensar en ti —Como él es dramático, se hace el ofendido. Yo sonrió de nuevo y es curioso que lo haga a cada rato cuando estoy con él —Estás loco, pero te perdono. Ahora me tengo que ir. Necesito estudiar, permiso.

Estoy dispuesta a irme,  pero como siempre se interpone en mi camino, entrelazando nuestras manos y caminando a mi lado. Lo observo esperando una respuesta de su parte, pero solo se encoje de hombros.

—No te vas sin mi, pero vas a dormir primero y después yo te ayudo —Niego, y ya sabia mi respuesta porque añade algo después —Y ni se te ocurra contradecirme señorita.

—Tu sabes muy bien que no soy señorita —Sonríe maliciosamente —Además, de verdad necesito estudiar, Tae —Hablo como una niña caprichosa, pero niega. Puto Tae. No me va a dejar cumplir mi cometido temprano. Es imposible.

—No me vas a hacer cambiar de parecer, te ves terrible. Así no me dan ganas que me comas, mejor dicho me va a dar miedo porque pensaré que me va a comer un zombi… y pensándolo bien lo que voy a hacer es correr por mi vida —Se carcajea en pleno pasillo y me es imposible no hacer lo mismo… ¿De dónde saca tantas ocurrencias?

—Te odio, Tae —Ríe y se detiene para pegarme a él… su mirada intensa se fija en mis ojos y ahí se queda.

—No princesa, tú no me odias, tú me deseas que es diferente —Jadeo y me alejo rápido.

—Vámonos ya —Suelta otra carcajada —Contigo es imposible hablar, todo lo que te digo lo tomas como chiste.

—No, no princesa. No es un chiste para mi… Cuando estoy dentro de ti y tú sólo gimes mi nombre, eso no me da risa para nada –Su tono de voz es seductor y juro que voy a morir cuando acerca su boca a la mía, y de repente se aleja y sonríe con victoria.

Denme fuerza de voluntad, por favor.

¡Qué difícil es esto!

Mis mejillas se tiñen de rojo y sigo caminando más apresurada dejando a Tae atrás.

En todo el camino a mi apartamento él castaño sólo me agarró para burla, preguntándome si esperaba un beso cuando se acercó. De verdad que si lo quería y el sólo jugo conmigo; mi increíble respuesta fue sacarle el dedo corazón.

Cuando entramos Tae se dispuso a hacer algo de comer mientras yo tomaba una ducha, aunque quería ayudarlo y sólo gane un azote en mi trasero por llevarle la contraria.

Salí envuelta en una toalla media hora después, y Tae ya me esperaba en la habitación con la comida hecha.

Busco algo para vestirme, sabiendo que él castaño me observaba desde una esquina de la habitación. Sonreí por lo que se me ocurrió de repente, y quito la toalla para vestirme… Me sobresalto al sentir las manos de Tae en mi vientre; pega su erección a mi trasero y jadeo al sentirlo tan duro. Reparte besos cortos y húmedos en mi cuello, mientras que yo, sigo con mi respiración acelerada y queriendo más.

—Eres una provocadora —Nietos y trato de zafarme de su agarré pero no me deja. Me frotó en su erección y aprieta su agarré para que no me siga moviendo.

—Como si no fueras visto todo esto ya.

—Si lo he hecho, pero cada vez que te veo desnuda o te doy un beso, no me puedo controlar —Diciendo esto se aleja y yo quedo indignada, porqué quería que él me tocará. Si, estoy frustrada.

—¿Por qué te alejaste? —Cruza sus brazos y su mirada intensa me eriza la piel.

—Porque necesitas dormir, así que come y vas a dormir. Pero cuando lo hagas y tengas toda la energía suficiente no te salvas de que este dentro de ti como te gusta –Me visto rápido y comenzamos a comer los dos en un silencio cómodo.

—Gracias por alimentarme —Me recuesto al lado de él y lo paso un brazo por su abdomen.

—No hay de que, igual después eso me las pagas —Suelta una carcajada a igual que yo.

—Tú todo él tiempo, Tae —Bostezo y cierro mis ojos, de verdad necesito descansar.

—Vamos a dormir. Ven —Me acerca  más a él acomodando mi cabeza en su pecho y subo una pierna encima buscando más comodidad. Me abraza y yo también lo hago, siento calidez y me gusta mucho.

Tantas veces que él castaño y yo nos habíamos abrazado y dormido juntos no se había sentido como está vez, enserio que no. No se que cambio, pero se siente increíble estar así abrazados y el haciéndome cariños en mi cabello. Y por un momento me asusto, si lo hago, me aterra pensar que estoy cayendo por Tae, pero ahora no puedo evitar lo que él me hace sentir. Y se que si me enamoró,  perdería nuestro juego. Y tal vez nuestra amistad no será la misma tampoco.

Entonces mi corazón se acelera cuando el da un beso en mi cabello.

—¿Cuándo despierte vas a estar aquí conmigo? —Susurró con un tono de esperanza en mi voz.

—Si princesa, siempre —Caí ante el castaño, sólo puedo pensar que estoy perdida.

Y así cierro mis ojos y caigo rendida ante el sueño.

Daddy Kink [+18] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora