Capitulo editado y actualizado el 19/12/2021.
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El castaño estaciono el auto frente la farmacia y suspiro antes de mirarme.
—Espera aquí, ya regreso —Asentí mientras veía como salía del auto, dejándome sola.Un suspiro largo sale de mi mientras espero, odio esperar. Se me da muy mal.
Pasan minutos tras minutos y nada que aparece. Necesito tomar aire, por eso abro la puerta y salgo quedando de pie recostada en el auto.
¿Cómo es posible que las cosas cambien tan rápido? En un día estábamos siendo los mejores amigos y ahora, somos amigos con derechos, follando sin compromiso, todo se volvió un juego… tanto para él, como para mi.
Y solo espero que siga así… aquí no puede haber un margen de error.
No se puede.
Simplemente, no quiero que se nos arruine la amistad por algo que salga mal de este juego… sólo recuerdo lo bien que nos la pasábamos cuando éramos más chicos en este pueblo y no, no se si podría aguantar perderlo.
El castaño y yo crecimos juntos desde muy pequeños, siempre estuve ahí cuando su madre lo abandono a él y a su hermano pequeño cuando el pobre bebé tenía 3 años apenas, dejándolos a cargo de su padre y abuelos. Por eso hoy en día, ve a su abuela como su madre. Aunque tenía la esperanza de que volvería a verla, pero con el pasar del tiempo fue creciendo y esas esperanzas se vinieron abajo. Desde ese momento Tae se centró en las cosas positivas que le brindo la vida aprovechando todas las oportunidades para ser mejor persona y lo logro.
Su padre antes de morir le dijo que siempre donde este estará orgulloso de él y que siempre cuidara de su hermano pequeño, porque al final solo se iban a tener ellos dos cuando sus abuelos murieran.
Matías ese era el nombre del padre del castaño, enfermo de leucemia cuando Tae tenía 15 años. Cuando lograron detectar el cáncer ya estaba muy avanzado, por lo que los médicos no pudieron hacer mucho y si había posibilidades Matías ya había decidido que no quería ningún tratamiento, que quería morir en paz y sin sufrir. Por lo que su familia tuvo que aceptar su decisión e hicieron sus últimos días de vida muy alegre para él, aun así fue algo muy doloroso tanto para él como para las personas que estaban apoyándolo.
Después de eso Tae y Jonsung quedaron a cargo de sus abuelos, que con mucho dolor y recuerdos continuaron su vida, siempre recordando a su padre que fue un ejemplo a seguir. Sus abuelos los criaron con amor, le enseñaron el respeto, a ser responsables y perseverante con lo que quieren, y sobretodo a seguir que aunque caigan tienen que volver a levantarse y llegar a la meta.
Cuando nos mudamos a Seúl juntos, todos esos recuerdos quedaron con Tae y así siempre será.
Como extraño a mis padres, hace días fui a visitarlos, aunque no m quede con ellos porque Tae me necesitaba, fue bueno verlos, nunca me he acostumbrado a estar lejos. Al principio cuando tomé mi decisión de irme lejos porque había conseguido la mitad de la beca de medicina mis padres no querían que me fuera, porque no querían que su única hija los dejara, pero ya era una decisión que había tomado y al final la aceptaron, y sólo me apoyaron en todo. Desde pequeña quise ser una buena digo la mejor pediatra, pero en este pueblo no iba a lograr mucho, por lo que siempre tuve enfocada en nuevos horizontes...
—¡Heyyy! —Estaba tan metida en mis pensamientos, que no me di cuenta de que Tae ya había regresado —Sky, regresa a la vida.
Lo miré y sonreí.
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Daddy Kink [+18]
Teen Fiction"Quiero perderme en el sur de tu cuerpo y después entrar en lo más profundo de tu alma, PRINCESA" [........] -¿A qué le tienes miedo? -Me susurra tan cerca de mis labios que mi piel se eriza. -A nada... -Susurro de regreso. -¿Y por qué no quieres j...