When love must die; Ben Hardy.

Capítulo XXXIV.

Ben estaba acomodando la mesa y poniendo todo para el desayuno cuando llegó Zoe cargando una gran caja.

–Déjame ayudarte con eso.–Dijo tomando la caja.

–Gracias cariño. Bueno esta es mi vida de pequeña, que la disfrutes.

Ambos sonrieron y se sentaron para desayunar y para que Zoe le mostrara todo.
La chica le mostraba fotos de cuando era bebé, de cuando vivía en casa de su padre, algunos dibujos que hacía y demás.

Ben la miraba atentamente cuando le contaba la historia de cada objeto que sacaba, veía ese énfasis que le daba a cada detalle de las historias, no había chica más perfecta en el mundo que ella.

–Y ahora llegamos a mi parte favorita: mis discos de Queen.–Su mirada comenzó a brillar, le gustaba mucho la banda, ser la hija del baterista fue algo que la impulsó a seguirla, algo que fue bastante bueno.

–Vaya, esto si que es una colección.–Dijo Ben al ver todos los discos de la banda ahí reunidos.

Mientras Zoe buscaba en la caja, vió algo que la dejó maravillada; encontró su disco favorito. Quiso ponerlo en el tocadiscos de la sala pero pensó que sería mucho rollo  buscar la canción que quería en ese momento. Solo tomó su teléfono, abrió Spotify, buscó el disco y seleccionó la canción que amaba: "One year of love".

La voz de Freddie encendió algo dentro de ella, fue por su chico y lo invitó a a bailar con ella a la "pista de baile", lo que vendría siendo la sala de su madre.

"Just one year of love
Is better than a lifetime alone
One sentimental moment in your arms
Is like a shooting star right through my heart
It's always a rainy day without you
I'm a prisoner of love inside you
I'm falling apart all around you."

Estaban bailando de una manera tan delicada y armoniosa que era de espectáculo, Zoe puso su cabeza sobre el pecho del chico, se sentía tan bien hacerlo. Era como estar en el paraíso.

La canción estaba por acabar, Ben acercó a la chica para sentarse en el sofá que estaba detrás de ellos, la sentó sobre sus piernas y le dió un suave y largo beso en los labios mientras la abrazaba con la misma fuerza con la que un niño defiende su juguete favorito.

–Zoe, te amo muchísimo.–Le dijo mirándola fijamente a los ojos, sonrieron tiernamente.

–Yo también te amo Ben, estar contigo es lo que mejor que me ha pasado.

–Sé mi novia, necesito a alguien como tú a mi lado. No quiero perderte nunca.–Sus ojos comenzaron a cristalizarse, jamás pensó en sentir algo así por una chica.–Quédate por siempre, para siempre amarnos.

–Si.–Dijo rápido.–No quisiera dejar a alguien como tú, a quien amo demasiado.

Unieron sus labios, entre risas comenzaron a llorar, lágrimas de felicidad que sabían a amor. Se quedaron abrazados ahí en el sillón, era más que precioso estar así con la persona que amas.