When love must die; Ben Hardy.

Capítulo XLIV.

El doctor salió del cuarto yendo hacía los familiares de Zoe para decirles que todo había salido bien y que ella había despertado.

–¿Familia de Zoe Taylor?–Dijo en cuanto llegó a la pequeña sala de espera donde estaban. Ben se levantó rápido de la silla donde estaba sentando, estaba ansioso; no sabía que esperar de la boca del doctor.–He venido a decirles que la cirugía ha sido un éxito; Zoe se encuentra estable y está despierta.

Al escuchar eso todos dieron un suspiro de alivio, Roger y Elena comenzaron a llorar de felicidad, su hija estaba bien. Ben dejó salir una que otra lágrima y Rufus al notarlo lo abrazó.

–En unos momentos se le harán análisis para verificar que todo ha salido bien en su sistema.–Siguió el doctor.–Después de eso podrán visitarla.

–Muchas gracias doctor.–Dijo Roger de la mano de Elena.–Gracias por salvar a mi pequeña.

Todos se sentían mejor, incluso Lily. Hubiera sido duro para ella si su hermana hubiera muerto sin haberse disculpado con ella por ser una idiota, al parecer había recapacitado.

Ben se sentía tranquilo, sabía que Zoe era alguien fuerte y que lo superaría. Avisó que iría a casa a arreglarse un poco, no había hecho otra cosa más que estar en el hospital. Salió del hospital, fue a casa a tratar de poder dormir un poco. Después se dió una ducha, estaba feliz de que su novia estuviera bien y a salvo. Una idea loca pasó por su mente, estaba claro que no quería perderla así que esa idea loca era una idea perfecta.

Salió de la ducha, se vistió y rápido salió de casa. No iba a ir al hospital, aún.

Se dirigió a un centro comercial, sí, su idea era una perfecta loca idea.