Una tarde como cualquier otra, hace ya algunos años, estaba con mi madre mirando el aterdecer en un muelle, todo el tiempo pasaba en un abrir y cerrar de ojos. Ese día le juré, que a pesar de las circunstancias, siempre lucharía por lo que amaba, que no me iba a rendir tan fácil. Siempre había tratado de cumplir esa promesa, incluso me parecía estúpido no hacerlo.
«Si lo amas, déjalo ir»
Jamás me había visto sentido a eso, es decir, si amas algo deberías luchar por ello, esa era mi ley. Sin embargo, lo pude entender con ese chico, que sin conocer mucho, se había robado por completo mi corazón. Lo más irónico era no poder hacer nada, tal vez le hubiera podido pedir que se quedara conmigo, pero entendí que sería más feliz con su novio. Yo no podía ofrecerle los mismos lujos, tampoco la misma historia de amor, y mucho menos un buen comienzo.
Erick tenía razón, él sería más feliz a su lado. Él se encargaría de sacar esos sentimientos que seguían guardados en el fondo de su corazón.
Aunque por un momento lo dudé, esa llamada me había hecho cambiar de opinión, aunque no fue suficiente, todo tuvo sentido cuando lo confirmé: él no creía ni confiaba en mí.
No era fácil, definitivamente era una tortura ver a la persona que amas en brazos de otro, a punto de tomar un maldito vuelo que lo alejaría de mi vida para siempre.
¿Por qué me dolia tanto si yo mismo lo decidí? Fácil, porque no era lo que yo realmente quería, sino lo correcto.
Saqué una pequeña hoja de mi bolsillo, mientras miraba de lejos a Joel, que parecía esperar algo con ansiedad. Tomé un bolígrafo y empecé a escribir lo que sentía en ese momento, pero nada logró convencerme. Quería dejarle claro que no mentía, aunque ya no podía lograr nada con eso, más que evitar ganarme su odio.
"Basta de mentiras, no puedo negar lo que siento, no puedo negar que me gustaría ser yo el que esté a tu lado en este preciso momento. Quise lo mejor para ti, y de todo corazón espero que seas feliz, aunque no sea conmigo.
Quiero que te des la oportunidad de volver a amar, que pienses bien lo que quieres para tu vida, porque lo mereces".
Decidí no ponerle nombre, ya que probablemente iba a verme. Busqué a un trabajador y le pedí el favor de que de la hiciera llegar, así lo hizo.
Vi la sonrisa que se formó en su rostro mientras leía, y como se iba transformando en una mueca de dolor. Levantó la vista y buscó por toda la sala, hasta que conectamos nuestras miradas.
Traté de descifrar lo quería decirme con ella, pero la desvío rápidamente con una expresión que no pude entender muy bien. Erick estaba concentrado en su celular, y en cierto momento se levantó para dirigirse al baño. Lo seguí, ya que habíamos quedado en eso, a pesar de que no parecía haber notado mi presencia.
—Erick —se detuvo en el pasillo y me miró con una pequeña sonrisa.
—Pensé que no vendrías, querido amigo —su tono sarcástico me irritaba.
Rodé los ojos al ver su actitud, era una persona demasiado hipócrita y eso no iba conmigo.
—¿Qué querías decirme? —fui directo, era lo único que me hacía quedarme ahí, pues no era muy bonito ver a Joel a punto de irse con él.
—Solo te quería agradecer, ya sabes, por dejar que me diera otra oportunidad.
—Yo solo pensé en lo que sería mejor para él, y creo que tú le puedes dar eso —sonreí con amargura.
—No te has equivocado —se acercó y puso su mano sobre mi hombro, apretando con algo de fuerza —, lo voy a hacer muy feliz.
—Eso espero —sonrió con arrogancia y quitó su mano, para luego extendermela como si fuera un negocio.
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Él No Te Ama ||Joerick / Virgato|| Terminada
FanfictionMuchas veces el amor no es suficiente para terminar con tantos años de felicidad, la costumbre es demasiado fuerte. ¿Se puede volver a amar cuando ya se ha roto una relación?, ¿puede alguien cambiar después de hacer tanto daño? Por otro lado, ¿es po...