Trying It [The King 2/4] BORRADOR

Capítulo Cuarenta

Capítulo Cuarenta.

Punto de vista de Kyler.

Tengo a mí hijo durmiendo sobre mí pecho, acarició su espalda mientras veo la televisión. Espero a que Daya salga de bañarse, desde hace unos días ha estado actuando extraña.

Desde ese día que fue con Wilson.

He intentado hablar con ella, hacer que me cuente lo que le preocupa, pero parecía no haber caso está vez. Se lo guardaba para ella y no permitía que la ayude.

- Tu mami es una cabeza dura, pero debemos amarla. - Susurro apenas.

El noticiero pasa al sector de prensa rosa y suspiro al darme cuenta que The King está en las noticias para dar. A veces me divierte al escuchar unas noticias absurdas que nos inventan.

Pero en este caso, no es una noticia absurda, muestran la foto que he subido ayer de mí hijo durmiendo conmigo.

Luego pasan a hablar sobre Jasson ya que en un mismo día se lo ha visto salir con dos mujeres y al día siguiente con Stayce.

Cuando Daya pasa por delante de la televisión me mira. Se acerca y verifica que nuestro pequeño rubio está dormido. Lo toma con cuidado y lo mete en el huevo móvil para que descanse ahí. Luego se sienta a mí lado y se acurruca. Tira de la manta y nos cubre. Yo aprovecho y la abrazo.

- Saca esto. - Me pide y toma el control remoto mientras abre la aplicación de Netflix y pone la serie que hemos comenzado a ver anoche. Altamar.
- Jasson en un día y medio salió con tres mujeres. - Le cuento y ella me mira.
- Está peor que tú. - Me dice y yo pongo los ojos en blanco.
- Yo no soy un puto. - Me quejo y ella rie. - He estado contigo en una relación... Luego Sarah... Y tú.
- Y las chicas antes de Sarah. - Dice y yo suspiro. Nunca jamás lo olvidará.
- Vale, pero no tenía una distinta todas las noches.  Una de las chicas era Stayce. - Le cuento y vuelvo a llamar su atención.
-¿Si? Pensé que ella ya estaba en una relación... Tenía entendido eso.
- Bueno, a veces, sucede...
- Mejor calla y abrázame. Tengo frío. - Me dice y yo le hago caso. Mientras la abrazo acarició su abdomen ya casi plano. Es raro ver cómo vuelve a ser como era antes.
-¿Estás bien? - Pregunto y la escucho bostezar.
- Si. Tengo sueño. - Susurra mirándome. - A las seis tengo turno con el médico. Debe revisar mí cuerpo.
-¿Porque? - Pregunto. Ella me sonríe.
- Es un control. Y... Me dirá si hay luz verde. Sé que lo extrañas.
- ¿Que cosa? - Preguntó sin entender.
- El sexo...
-Oh. No he estado pensando mucho en sexo. - Miento. Ella sonríe y me besa. Y yo me dejó besar con ganas. Se acomoda en mí regazo mientras echa sus manos en mis hombros. - Vale. Mentira. - admito. - Si, extraño hacerte el amor. Pero lo entiendo.
- Desde que regresamos lo hemos hecho dos veces. - Dice ella y yo asiento. Y en un solo día. Luego vino la operación.

Nos quedamos callados, ella está en mí regazo aún. Pongo mis manos en su cintura y la acarició.

- Nena. - La llamo, ella me mira con atención. -¿Porque te has alejado? - Pregunto mirándola. Ella suspira.

Intenta bajarse de mí regazo pero yo me reuso a dejarla. Acaricia mí mejilla y besa mí barbilla.
- Creo que haré algo que no te agradará. - Susurra ella. Intenta bajar una vez más y yo acepto. La miro.
-¿Que cosa? - Pregunto mirándola.
- He estado viendo departamentos... Porque creo que me mudare.
- Si, definitivamente no va a gustarme. - Concuerdo con el ceño fruncido. -¿Porque lo harás? ¡Estoy haciéndolo bien!
- Es otra cosa. - Susurra. Yo frunzo aún más el ceño.
- ¿Y que haré con Austin? No quiero no vivir con él. Es injusto.
- Es que... Necesito... Hacer algo, Kyler. - Susurra y noto como sus ojos se humedecen.
-¿Que? - Pregunto, noto que mí pregunta sale un poco brusca. Ella me mira y juega con sus manos nerviosa.
- Seré mamá otra vez. - dice y ahora además de molesto estoy confundido.
-¿De que hablas? - Pregunto y paso las manos por mí pelo.
- Intento adoptar a un niño. - Susurra y me pongo de pie. Esta mujer se volvió loca.
-¿Adoptar? ¿Porque adoptarías? Tenemos un bebé de dos meses.

Ella suspira y también se pone de pie, me mira mientras sujeta su cabello rubio en una cola de caballo.

- Tu no lo entenderás Kyler. No lo diré por mala pero tú has tenido una buena infancia... Y yo quiero darle una buena infancia a un niño.
-¿Y de dónde sacaste esa idea? - Pregunto, cruzandome de brazos.
- Fue mí idea. La saqué de mi. Quiero adoptar a ese niño y lo haré. Estoy decidida.
-¿Y lo harías sin mí? - Pregunto un poco dolido. Ella no me tuvo en cuenta.
- No quería comprometerte. Es mí desición Kyler. Tu no tienes que ver en ella.
- ¿Y que? ¿Vas a mudarte con mí hijo porque quieres adoptar uno? - Pregunto molesto. Ella me mira. -¿Que si no quiero vivir distanciado de mí hijo?
- El debe estar conmigo, Kyler. - Me dice, toma mí mano. - Podrás verlo siempre que quieras.
-¿Y que? ¿Terminas nuestra relación o que significa? - Pregunto y ella suspira. - ¿Es eso?
- No. - responde. - No quiero que termine... Pero si eso es lo que quieres.
- No Daya. No quiero nada de eso. - Admito bruscamente. - No quiero vivir lejos de mí hijo, no quiero dormir lejos tuyo... No quiero que adoptes a un niño.

Ella se aleja y me da la espalda. Toma dónde está Austin y lo lleva a su habitación. Minutos después regresa, tiene sus manos en su cadera.

- Adoptare a ese niño. - Me dice decidida. - He programado la entrevista.
- ¿No importa lo que yo quiero? - Pregunta y ella suspira.
- Sabía que esto podría traer dificultad a la pareja. - Me dice y yo la miro.
-¿Entonces porque? ¿Porque ahora?
- Porque ese niño merece una persona que lo quiera, cuide y mime. Ya sufrió lo suficiente. Quiero darle el resto de su infancia como se merece, ayudarlo a superar las cosas malas y seguir adelante.
-¿Porque no me tienes en cuenta? ¿No pensaste que quizás si me contabas todo, yo podría apoyarte?
- No creí que lo hicieras, Kyler. Para empezar tu no querías ser padre. Y tienes ese lío con Sarah.
- Tu no querías ser madre. - Le recrimino.
- Pero quiero ser su madre, Kyle. Por eso decidí. - Con Austin... El fue una sorpresa... Pero quiero ser la madre de ese niño. Quiero darle el amor que jamás le dieron. - Dice yendo hacia su bolso y tomando una foto.

Luego la veo caminar hacia mí y me la tiende. La miro. Es un niño, de no se qué edad, pero no se ve grande. Su cabello castaño claro está largo, cubre bastante de su cara. Sus mejillas están sonrojadas y su labios una mueca hacia abajo.

- Su padre lo maltrataba y su madre era una adicta que también lo maltrataba. Ese niño posiblemente nunca conoció el amor de un hogar, de una madre. Vio a su madre morir y convivió con su cadáver.
-¿Que?
- El estuvo junto al cadáver de su madre por más de una semana. Los vecinos llamaron por el olor y encontraron al niño.
- Que horror. - Digo sorprendido.
- Debo hacerlo. - Susurra en un hilo de voz.
- ¿Es lo que sucedió cuando fuiste a ver a Wilson, verdad? - Pregunto ella asiente.

La veo acercarse a mí y acariciar mí mejilla con ternura.

- Quiero seguir siendo tu novia. - Me dice en un hilo de voz. - Que adopte a ese niño, no significa que debamos dejarlo.
- Me duele que no hayas confiado en mí antes. - Admito.  - Pude apoyarte.
- No quería que se arruinara esto. - Susurra y yo asiento.
- Yo planeo casarme contigo, Daya. - Confieso también. - Si tú quieres adoptar, yo te apoyare. Si quieres ser su madre, yo seré su padre.
-¿Que? - Dice confundida. Tomo su rostro entre mis manos.
- Aún no llegas a comprender lo que yo te amo. - Susurro en voz baja. - Haría cualquier cosa por ti. Eres mí vida.
-¿Lo harías? - Pregunta con lágrimas saliendo de sus ojos.
- Claro que si.
-¿Y lo querrás? ¿Le darás tu amor?
- Será mí hijo, Daya. Lo querré.
- Oh Kyler. - dice ella abrazándome con fuerza. - No sabes cuánto te amo.
- No lo dices seguido, pero lo sé.
-¿No te arrepentirás? - Pregunta y yo niego. Miro la foto nuevamente.
- El merece una familia y nosotros seremos capaces. Y no te mudaras. Aquí hay suficiente espacio. Sé que te dije que no viviríamos aquí siempre, pero hasta que no atrapen al maldito que te acecha, este será nuestro hogar.