Cincuenta y Seis

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Capitulo Cincuenta y Seis

Cuando llego a casa luego de salir anoche, mi mama se encuentra en la sala de estar junto a Jack hablando sobre algo. Me acerco al pequeño y beso su frente, el me abraza y yo lo tomo en brazos y lo siento en mi regazo.

-Dormi bien papi. -Dice el sonriendo. Yo beso su mejilla.- ¿Mami ya volvera?-Pregunta y mi corazón se estruja.
-No se campeón.
-Extraño mucho. Ella me cantaba bonito tambien.
-Tambien yo... Yo tambien la extraño. -Admito. Miro a mi madre que hace una mueca.

Si bien las cosas entre Daya y mi madre no eran buenas, ella me ha apoyado mucho desde que me abandono. Se hace cargo mucho de Jackson y me viene a cocinar algunas veces porque sabe que no soy realmente bueno en eso. No ha dicho aún nada malo aunque se que tiene guardado algunos comentarios.

A este punto, hasta Adam tiene guardado comentarios.

Y es que una cosa es dejarme a mi, otra cosa es irse sin dar señales de vida, llevandose a mi bebe que deberia estar cumpliendo un año en estos días. ¿Y si no puedo pasar su cumpleaños con el?

Mi celular vibra en mi bolsillo y lo saco. Me sorprendo al ver de quien es el mensaje.

"¿Podemos hablar?"

Por un momento mi cerebro no reacciona, pero si es un mensaje de ella. Un mensaje que llevo esperando más de un mes recibir. Mi cuerpo tiembla y Jack me mira.

-¿Que dice papi?
-Es... Un mensaje del tio Adam. Me esta pidiendo ir a un lugar. ¿Lo puedes cuidar un rato más madre?
-Papi quiero ir contigo.
-Ahora no, campeón. -Digo besando su frente y dejandolo en el sofa.
-¿Adam hijo? -Me pregunta ella y yo la miro, niego con la cabeza y así de rapido salgo de mi casa.

Le doy a llamar pero no termino de llevar mi telefono a mi oido cuando la veo. Y la desgraciada luce igual de bien que siempre. Incluso podría decirse que más bella. ¿Como es posible que ella luzca tan bien cuando yo luzco tan demacrado?

-Aquí no. -Le digo tomandola del brazo para alejarla de la posible visión desde adentro.
-Quiero ver a Jackson.
-Eso a mi no me importa. -Digo con honestidad mientras camino hacia atras de la casa y nos meto al cobertizo. -¿Que haces aquí?
-Quiero ver a mi hijo.
-¿Con que cara? -Digo molesto. - ¿Con que cara te atreves al venir a decir eso despues de secuestrar a mi hijo por más de un mes?
-No lo secuestre. Es mio.
-¡Y mio! ¡Un bebé se hace de dos! -Le digo molesto, mi tono de voz es bastante fuerte. Debo calmarme un poco porque no quiero que vengan. - Te llevaste a mi hijo que tiene problemas de salud durante mas de un mes, Daya. No me dejaste saber de el. ¿Sabes que tan tortuoso era eso?
-No fue mi intención...
-No me vengas con esa mierda. Podría creer que no fue tu intención los primeros días, estabas en una mierda de shock o algo así. ¿Pero casi dos meses Daya? ¡No sabía si estaban vivos o muertos, si te habias ido por voluntad propia o te habian secuestrado! ¿Tanto odio me tenías?
-No te odio, te amo.
-No me digas esa mierda, Daya. No puedo creerte. Esto que hiciste...
-Tu me has engañado y estado con ella durante años. -Me recrimina y la miro sin poder reconocer quien es. No es la mujer que amo.
-¿Estas comparando eso con esto? -Digo atonito.
-¿Porque lo hice yo es imperdonable? -Me dice molesta.

¿De verdad tiene las agallas de molestarse?

-No me engañaste Daya. -Digo en voz baja. - No me dejaste por otro tipo...
-Lo se. Por eso lo tuyo sigue siendo peor.
-No. Tu me dejaste plantado donde nos casariamos. ¡Te llevaste a mi hijo sin darme señales de el en todo este tiempo. Me dejaste con Jackson que no dejaba de pensar que lo abandonaste por sus pesadillas y porque es defectuoso! No tenía fuerzas para salir adelante yo y tenia que consolar a un pobre niño que nuevamente era abandonado por quienes amaba.
-Por favor, dejame verlo.
-¿Donde esta Austin? -Le pregunto cruzandome de brazos.
-En el hotel con un amigo.
-Vete y traelo contigo, Daya.
-Dejame ver a mi hijo.
-Digo lo mismo. Yo no me he ido, tu si. Trae a Austin de vuelta y manejaremos como personas civilizadas sus tenencias.
-No me perdonaras. -Me dice y yo no respondo.
-Podría perdonarte que me seas infiel, que me dejes plantado, que hayas desaparecido unos días... ¿Pero tanto tiempo Daya? No me mandaste ni un mensaje diciendome que estaban bien, que mi bebé estaba bien.
-Lo siento.
-No, esto es... una mierda. Trae a Austin Daya.

Ella esta por salir del cobertizo pero analizo mejor la situación. Nada me asegura que ella volverá. Tomo su brazo y ella me mira.

-Ire contigo. - Declaro. Ella niega con la cabeza.
-No... Quiero ir sola.
-No confió en ti. -Admito.

Ella me mira con dolor, ¿Pero que esperaba? De todas formas, ella tampoco confio en mi en gran parte de nuestra relación.

Cuando salimos del cobertizo mi madre nos esta mirando. Niega con la cabeza y yo sujetandola del brazo nos guio rapido hacia el auto. Una vez dentro me permito unos minutos para acostumbrarme a la idea de tenerla al lado y no besarla o abrazarla.

-Si tanto querías saber de Austin ¿Porque no hiciste la denuncia?
-Porque confiaba en que ibas a aparecer pronto... ¿Mucha confianza te tuve,no?
-Lo haces ver como si todo fuera mi culpa...
-¿Es que acaso tengo culpabilidad en esto? No soy perfecto Daya, te he lastimado y lo se. Por eso en mi cabeza en muchos escenarios me hice una lista de las cosas que sería capaz de perdonar. Pero esto... Lo de huir así con nuestro hijo... Nunca siquiera me lo imagine.
-No quiero volver contigo. -Me dice ella y yo la miro. Vale eso si dolío. Otra vez. -Solo quiero que seamos... buenos copadres.
-Inicia siendolo tu. No fue un buen inicio el tuyo.
-Solo dejalo Kyler.

Me rio y enciendo el auto. Le pido la dirección y comienzo a manejar. ¿Solo dejarlo? Lo dice la misma chica que por años se aferro a que yo la engañe.

Cuando llegamos a donde ella me indico, caminamos en silencio hasta la suite donde se esta quedando. Desde el pasillo escucho el llanto de un bebé llorar y se que se trata de mi bebé. Ella abre la puerta y no soy caballero, entro sin pedir permiso y tomo al bebé que se encuentra llorando.

-Hola mi amor.-Digo besando su cabecita llena de cabello rubio. Lo apreto contra mi y no puedo evitar lagrimas de mi parte. Mi corazon se siente diferente ahora que tengo a este niño conmigo. -Papi esta aquí.
-Tiene hambre. -Dice Daya tendiendome sus brazos para que se lo de, maldición, no. No puedo.
-Le dare yo. -Digo tomando el biberon que tiene en sus manos.

El niño me mira y frunce sus labios como si tirara un beso yo sonrio y le doy un beso en la frente mientras le doy su biberon. Mi hijo, como lo extrañe.

-Te amo tanto, Austin.

Me quedo embelesado como bebe de su biberon, acaricio su mejilla y el sonrie un poco mientras continua bebiendo.

-¿Como has estado pequeño querubin?
-Oh, hola. -Escucho una voz masculina. Me giro y veo a un tipo de tez oscura, solo con una toalla cubriendo su cuerpo. Y por primera vez desde que estoy aquí, decido mirar la habitacion. Solo hay una cama, ropa en una silla. Esta no es habitación de una mujer solamente. Es una habitación compartida.
-Killian... El es Kyler... El padre de Austin y Jackson. -Dice ella incomoda.
-Mucho gusto conocerte. -Me sonrie el tipo. ¿Debo decir encantado? Solo asiento con la cabeza. - Tienen un hijo genial, es muy simpatico e inteligente. Es un placer pasar tiempo con el y se le tomo mucho cariño. Hasta me quiere y todo. Creo que este tiempo me vio como una figura paterna.
-Yo soy su padre. Y no tiene ni tendrá otro. -Lo corto de mala gana. -Si quieres un hijo, haz uno. El es mio.
-Disculpa. -Dice el y yo miro a mi ex novia. - Nena ire a cambiarme.

El se va al baño de nuevo y el ambiente esta tan tenso que es imposible hasta respirar. Austin termina su biberon y llora. Pero luego me sonrie y se acurruca en mi escondiendo su cabeza en mi cuello.

-¿Amigo? -Me atrevo a preguntar.
-No quería que te enteraras así...
-Ni dos meses Daya... ¿Menos de dos meses te bastaron para enamorarte de otro hombre?

Porque si solo era una aventura, no hubiese permitido que pase tiempo con Austin. Pero convivieron, mi hijo lo vio como una figura paterna... Ambos se encariñaron. Me excluyeron.

-Es reciente...
-Es decir, menos tiempo. Estabamos por casarnos...
-Hubiese sido un error Kyle...
-No me llames así.
-Sé que me equivoque, lo siento. No quería dañarte.
-No me dañaste, Daya. -Le digo con honestidad. - Me destruiste. Me llevaré a Austin. Estuvo mucho tiempo alejado de mi, tengo derecho a tenerlo hasta que pueda pensar un poco.
-Es mi hijo tambien.
-Yo sé eso. Nunca te hubiese apartado de él. Al menos ya se que estas viva y bien.

Salgo de la habitación ignorando sus llamados, no voy a llevarme a Austin lejos, no voy a prohibir que lo vea. Pero necesita reencontrarse conmigo, con su hermano, su familia. Lo voy a llevar a su hogar.

Anoche he estado con una mujer, bueno, no he estado completamente, si no, algo así. Pero yo me sentí como que engañaba a quien ya tenía una nueva pareja. ¿Es ilogico? Si.

Trying It [The King 2/4] BORRADOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora