Capítulo Cuarenta y Cuatro

4.5K 369 21
                                    

Capítulo Cuarenta y Cuatro

Punto de vista de Kyler.

Observó a Jack dibujar en las hojas que le di hace unos minutos, Austin está demasiado despierto pero permanece tranquilo mientras disfruto de la tranquilidad de mí hogar.

Daya llegaría dentro de una hora y yo había sobrevivido a la perfección la tarde como papá. Nunca suelo estar solo, casi siempre ella está, pero tuvo un trabajo y yo me quedé a cargo.

Bastante bien para ser la primera vez.

El timbre de la casa suena y Jack me mira señalando la puerta. Yo me río y me pongo de pie acariciando la espalda de mí pequeño niño.

Camino hacia la puerta y al abrirla, me sorprendo cuando me encuentro a Sarah. Su mirada está fija en mí hijo, no me agrada tenerlo cerca de ella. Ella últimamente parece maniaca.

-¿Que haces aquí? - Pregunto, notando también, que su vientre ya luce plano.
- Quiero recuperarte. - Me dice, yo frunzo el ceño. - No me importa tu hijo, te necesito.
- Sarah, no. - Le digo rápidamente. - Estoy bien con mí vida de ahora.
- Kyler, por favor. - Súplica. - Ni siquiera me importaría ser la otra. Fuiste infiel una vez, hazlo de nuevo.

Suelto un suspiro, depósito un beso en el cabello rubio de mí hijo, necesito tranquilizarme, temo hablarle mal. No quiero ser responsable de alguna locura.

- Sarah, amo a mí novia. Daya, la mamá de mis hijos. No le seré infiel, cometí un error y ella lo perdono, no volveré a cometerlo.
-¿Hijos? - Pregunta confundida.
-¿Dónde está tu hijo, Sarah? - Pregunto dando por finalizada mí duda.
- Te dije que no lo tendría ...
-¿ Que hiciste?
- No iba a ser madre si tú no eras el padre. Kyler te amo.
- No, detente. Estas loca. - Digo molesto. - Si quisiste terminar con la vida de ese bebé no me hagas responsable de tu desición. No era mío.
- No. - Acepta. Yo suspiro.
- Debes irte. - Le sugiero, ella niega con la cabeza, intenta tocar a mí hijo pero me aparto. - Si o llamaré a seguridad. Haz tu vida de nuevo, yo ya he hecho la mía.
- Kyler. - Me llama la voz del pequeño Jack. Lo miro y el mira a Sarah. - Tengo sueño.
- Ya vamos a dormir campeón. Espera un momento. - Le digo y el asiente.

Mí ex novia parece debatirse entre irse o quedarse, finalmente opta la mejor opción y se aleja. Aliviado, cierro la puerta y tomo la mano de Jack y lo guió hacia mí habitación.

Lo acuesto en la cama y también acuesto a Austin quién ya no está tan despierto, acarició su mejilla y me regala una pequeña sonrisa.

-¿Cuánto tiempo estade aqui? - Me pregunta y yo lo miro confundido.
-¿Aquí? ¿En la cama?
- Con ustedes...
- Espero que siempre, Jack. ¿Tu quieres irte?
- No, me guta.
- Queremos ser tus papás, campeón. Y lo haremos si sale todo bien.
-¿Papas? - Pregunta y yo asiento. Beso su frente y lo cubro con la manta.
- Duerme Jack, descansa un rato.

Me despierto porque escucho un ruido en la sala, me pongo de pie y salgo de la habitación, me encuentro a mí novia hablando con un tipo, de no más de veinticinco años. Ella se ríe.

- Daya. - La llamo, me mira y camina hacia mí.
- Hola Kyler. - Me saluda, me da un beso corto en los labios. -¿Cómo están los niños?
- Bien... Dormíamos.
- Mis tres chicos. Si, fui a verlos en cuanto llegue. ¿Pero están bien?
- Si. Estábamos con sueño...
- Oh. - Parece entender de mí mirada. - Amor el es Keith, mí primo.
- Mucho gusto, no te conocía. - Le digo al chico que me tiende la mano. - Soy el novio. El papá de los niños...
- Si, al parecer mí prima no habla mucho de mí. Pero si de sus chicos, así que se de ti. - Dice el haciéndome reír.
- Keith vino a la ciudad unos días. Lo invite a cenar.
- Perfecto, ¿Dónde te estás quedando? - Pregunto y mí novia vuelve a besarme tomándome por sorpresa. Sonrió cuando se aleja y la veo ir hacia la cocina.
- Parece que ella te tiene tonto. - Dice Keith a mí lado, yo río.
- No parece. Me tiene. ¿Quieres algo de beber? - Pregunto y el asiente.
- Una soda estaría bien.

Voy hacia el refrigerador y tomo una soda, miro a mí novia que está con su teléfono. La abrazo por la cintura y beso su cuello.

-¿Que tal te fue? - Pregunto.
- Bien, me gusta haber vuelto. Aunque me sentía incómoda, siento que mí cuerpo cambio y debo acostumbrarme.
- No veo muchos cambios, Day. Eres hermosa, realmente hermosa, sexy y no debes sentirte insegura.
- Te amo Kyler. - Me dice girándose entre mis brazos y acariciando mí mejilla. - No te lo digo seguido, pero espero que sepas, te amo mucho. - Me dice y yo sonrio.
- También te amo, Daya. Y no quiero ocultarte las cosas así que te diré, Sarah vino aquí hoy.
- ¿Que?
- Vino, hablamos. Fue una conversación estúpida pero confirmo que no era mí hijo ... No nació.
- Lo lamento.
- No pasa nada, me pidio volver, dije que no. Pidió ser mí amante, dije que no. Luego se marchó.
- Estúpida miserable. - Dice enojada. Yo beso sus labios y me aparto.
- Es un capítulo terminado, solo debía decirtelo. Quiero evitar un drama innecesario.

Cuando estamos de regreso en la sala con su primo, se escucha el llanto de Austin y minuto después el de Jack.

- Yo iré, extraño a mis niños. - Dice ella poniéndose de pie y yendo hacia la habitación.
- Es sorprenderte ver a mí prima así. No la veía hace unos años, cambio mucho.
- Ha crecido...
- Es feliz. Me alegra eso, ella lo merece. El otro tipo, con el que se iba a casar, no la hacia feliz, me alegré cuando cancelo la boda.
- Si. Espero hacerla lo suficientemente feliz para que no cancele la nuestra.
-¿Se casaran? - Pregunta sorprendido y yo me río.
- Algún día, espero. Cuando se lo pida. Pero ambos sabemos que sucederá.
- Si la haces feliz y la amas, espero que así sea. También espero conocer a esos dos bebés que mí prima tanto habla.
- Jack no es un bebé, es un niño de cuatro años. Bastante inteligente.
- Si, me contó que están en proceso de adopción. Me sorprendió, acaban de ser padres hace poco.
- Si, Austin es bastante pequeño pero no importa, lo estamos haciendo bien con ambos. Nos hacen felices.

Cuando Keith se va luego de la cena, mí chica me espera en la habitación mientras yo termino de arropar a Jack.

-¿Hay que llamalos papá y mama? - Pregunta mientras lo cubro bien para que no tenga frío.
- Solo si quieres y cuando te sientas listo amiguito.
- Hata manana. - Me dice él y yo beso su frente.
- Hasta mañana campeón. Descansa.

Cuando salgo de la habitación, camino a la mía y sonrió al ver a mí chica viéndose al espejo con un conjunto de algodón negro. Camino hacia ella y abrazo su cuerpo solo con ropa interior.

- Eres demasiado sexy, Daya.
- ¿Quieres hacerme el amor? - Pregunta ella entre mis brazos. Yo sonrio y tiro de su cuerpo hacia arriba obligando a enredar sus piernas en mí cintura.
- Siempre querré hacerte el amor, nena.
- Usa condón. - Me dice cuando la dejo sobre la cama y yo río.
- Si, no más hijos fuera del matrimonio.

Trying It [The King 2/4] BORRADOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora