Ocean Eyes »» Pietro Maximoff y Tu

Especiales

—entiendes? No puedes salir así como así sin pedir permiso—regañó mi madre, estaba picando lo que parecían ser zanahorias

—mamá solo fue una fiesta—recalqué mientras estaba sentada en uno de los bancos de la barra

—_____ son fiestas para adolescentes mas...afultos—dijo mientras colocaba las zanahorias en un gran caso, como esos que se utilizan para hacer algún caldo

—adolescentes que dejarán de ser adolescentes?—inquirir, ella ladeo la cabeza de izquierda a derecha, diciendo un "más o menos"—siento que de alguna extraña forma me estas diciendo inmadura—confesé, al ser la única hija me sobreprotegían en cierto aspecto

—sólo tienes diecisiete—aclaró

—casi dieciocho—reclamé, entonces ella se giró para verme, como diciendo "enserio? No quiero discutir ahora"

—iré a ver televisión en la sala—informé y salí de la cocina, me dirigí a la sala y una vez en el lugar tome asiento, en el sofá ya estaba Michi recostado, Michi era un pequeño gatito naranja que adoptamos hace tiempo, ustedes dirán, quien pitos le pone Michi a su gato? Pues yo, obvio, acaricie su cabeza y rasque su barbilla, dándole cariño. Seguido encendí la televisión y me puse a ver caricaturas, no tenía nada de malo ver caricaturas a tus diecisiete!

Derrepente se escucharon dos golpes en la puerta—mamá! Tocan!—le informé en un grito, con desgana, no era como oque hoy tuviera intención de algo productivo, o siquiera de hacer algo

—voy!—exclamó ella de forma que la lograrán escuchar hasta afuera, rápidamente cruzó la sala para poder llegar a la puerta, escuchaba sus voces más no distinguía de quien eran, por un momento pensé que era Megan que vendría a que le contará todo sobre la salida. Escuché una pequeña explosión, por lo cual me espante, pero después vi a mi hermano mayor saltar por el portal y caer en el piso

—mamá acaba de encerarlo? Está tan jodidamente resbaladizo!—se quejó mientras se levantaba adolorido

-si bueno, eso te pasa por ir saltando de portal en portal—justifiqué extendiéndole la mano para ayudarle a levantarse

—hay que aprovechar el bug—dijo tomando mi mano

—tú lo aprovechas demasiado Mateo—dije inclinandome un poco para ver a mi madre, la cual seguía hablando con alguien. Mateo captó inmediatamente lo extraño que era la situación, normalmente mamá los hubiera invitado a pasar y tomar un café o un té.
Los ojos de chocolate de Mateo pasaron de mi a mi madre, tenía el ceño fruncido, el también sospechaba que la situación no era nada buena

-y Adam?-preguntó refiriéndose al mayor de todos nosotros,

-con Clarie, ya sabes que hoy cumplen dos meses de novios-dije, la chica me agradaba, a diferencia de sus demás novias esta no era tan falsa

-y Spencer?-preguntó por el menor de toda la familia

-tiene seis años, está en la primaria-respondí con obviedad, las edades en mi familia eran como la de una algo seguidas Primero estaba Adam, el tenía diecinueve, después estaba Mateo, el tenía dieciocho, crecieron soportandose el uno al otro, y cuando pareció que ya todo estaba arreglado llegue yo, recuerdo que yo quería ser "una más en la manada" y que por lo general quería ser ruda como ellos, sin embargo, nuestros padres siempre digieron que debian jugar delicadamente conmigo, Mateo por lo general era mucho más obediente que nosotros dos juntos, hubo una etapa en la que sólo éramos nosotros tres, entre Mateo y Adam no había gran diferencia, ambos tenían el cabello rizado y castaño, aunque Adam lo tenía más oscuro, al igual que los ojos, Adam era un poco más pálido que Mateo, y unos cuantos centímetros más alto, Mateo tenía el cabello más claro al igual que sus ojos y una piel no tan blanca, como sí tuviera un toque de aperlades por ella, así como que tenía una pequeña abertura en sus dientes incicivos, cuando llegabas a mi, te dabas cuenta que yo no era muy parecida a ellos, mi piel era aperlada y mi cabello sólo tenía unas ondas, no era totalmente risado, pero era como el equilibrio de nuestros padres, Adam era muy parecido a papá y Mateo a mamá, pero yo tenía un 50% de cada uno, aunque la mayoría dice que parezco hija de Mateo y Adam era imposible y extraño, tenía los ojos de papá el cabello de mamá y demás de características y hasta el final estaba Spencer, el nos tomó por sorpresa, recuerdo que cuando nos dieron la noticia nos juntaron a todos en la sala, Adam ya lo sospechaba, Mateo sólo esperaba que fuera algo bueno y yo quería que fuera un perrito, papá nos empezó a dar un sermón pero mamá lo interrumpió y soltó un "estoy embarazada, tendrán un hermanito", Adam ya estaba acostumbrado, Mateo entró en crisis existencial y yo lo acompañe, cuando nació Spencer era tan inquieto y tenía que admitir que no me agradaba, parecía un bebé mimado, sólo lo podía cargar mamá porque sino lloraba, papá y mamá tenian que estar pegados con el todo el tiempo y por las noches sólo se dedicaba a llorar. Pero al final se ganó el cariño de todos nosotros.

Se escuchó que la puerta trasera se abría, así como varios pasos y sonidos de personas besándose, en unos treinta segundos pudimos ver a Adam y Clarie avanzar a la sala mientras se basaban, yo carraspie para llamar la atención de los dos lujuriosos

—a perdon, si quieres pudes seguir comiendotela—dije, Clarie no tenía ni la menor idea de nuestra...condición

—no tienes respeto por este hogar verdad?—bromeo Mateo, Clarie sonrió, y Adam solo le dio otro beso, pero este en la mejilla

—porque la cara de perros?—preguntó una vez que se dio cuenta de que no se trataba del ambiente para todo público que normalmente se vivía, Mateo ladeo la cabeza indicándole la situación de mamá, Adam se acercó a ver de que se trataba

—vete Clarie—le pedí, no lo hacía porque su presencia molestara, lo hacía porque, como ya dije, ella no sabía absolutamente nada sobre nuestro "problema" y porque podría terminar lastimada

—pero, porque?...Adam...—buscó apoyo con el pero sabía que Adam estaba de acuerdo, no perdería a su novia tan fácil

—que te vallas Clarie—dijo en un tono monótono, ella hizo una mueca al no entender, se despidio de todos y salio de casa. Adam se acercó a mamá y Mateo tomó mi mano, está ruta de escape la habiamos planeado desde hace mucho tiempo
Aguardamos hasta la señal de Adam, pero jamás apareció.

[...]

Una mujer y un hombre, una pelirroja y un rubio se encontraban interrogandonos

—escuchen no es la primera vez que nos pasa esto, ninguno hablará sin un abogado—dijo Adam parado frente a ellos

—somos los buenos Adam—dijo la chica

—cual dijiste que era tu nombre?—preguntó Mateo

—Natasha Romanoff—respondió ella

—bien, entonces, mire Natasha, creo que...y sin ofender, están de sobra—confesó mi hermano de brazos cruzados, creo que a ninguno dr los tres nos transmitían la confianza necesaria

—tranquilos, no les haremos daño, sólo necesitamos de su ayuda, su madre ya nos contó sobre ustedes sólo queremos ver lo que hacen por nuestros propios ojos—dijo el hombre, quien creo si nombre era Steve. Nos vimos entre nosotros, bien que era lo peor qur podía pasar? Adam pronto alzó una de sus manos, el arma de Natasha salió volando por los aires, llegando a la mano de mi hermano, pronto el arma se desarmó y armó, luego aplicó su segundo poder, si cuerpo se volvió de agua, después fuego, tierra y al final viento, siguió Mateo, este sólo se transportó pormedio de portales, y después a Adam con el, y al final yo, abrí un poco mis manos y una esfera azul apareció

—campos de fuerza, toquenlo—pedí

—no!—intervino Mateo cuando vio que Steve acercaba su dedo—se los cortará—advirtió, si bueno puede cortarlo, quemarlo, o desintegrarlo, desaparecí el campo, después dirigí mi mano a la alfombra, la abrí por completo y de ella salió una bola de "fuego" del mismo color que el campo de fuerza, dejo una gran mancha negra en la alfombra, dando a entender que está se había quemado

—y tengo estas amigas—abrí mis alas, pronto Steve y Natasha se miraron entre ellos, para después mostrar una gran sonrisa.