Cara era divertida, quizás se la presentaría a Georgi, un revuelo se escuchaba adentro, unos pasos apresurados se escucharon llegar al patio
-Hey tu anciano ven enseguida Yuuri te necesita
A penas termino la frase y Víctor corría al interior de la casa y descubrí la razón del escándalo, Yuuri danzaba hipnóticamente sobre la mesa varios alfas lo tocaban él se veía hermoso, pero su usual y hermosa mirada, no era cálida, se veía perdida, su lobo era casi inexistente aun para él.
El joven alfa estaba realmente enojado sus fuertes feromonas doblegaban a cada invitado de la fiesta, cuando al fin estuvo frente a él, el gutural sonido que emano de él alejo a los alfas que aun trataban de tocar a su omega, cuando lo toco este se desvaneció, lo cargo y lo llevo a la habitación que le habían prestado, el joven omega de verde ojos iba tras el pese al temor que le tenía pero necesitaba saber que su hermano estuviera bien, el joven alfa lo dejo en la cama cuando sintió a alguien siguiéndolo le gruño al joven omega este se alejó.
-mío...
-solo quiero saber que estará bien- lloraba el joven omega
Con el poco autocontrol que quedaba este llego a su hermano, con la mirada del alfa sobre él, se sentía intimidado pero tenía que ser fuerte por él, tomo su pulso y era firme pero lento, la cantidad de alcohol era el problema
-hare que expulse el alcohol, tu consigue jugo de frutas para que se reponga- corrió lo más rápido que pudo, cuando regreso Yuuri se encontraba en la cama le había lavado la cara y los dientes y se veía más delgado y ojerosos de lo que jamás lo vio alguna vez, le dieron a tomar el jugo y ambos se sentaron a su lado
-ya había pasado esto por la forma que actuaste no es la primera vez que lo haces
-lo he hecho algunas veces mientras estuvimos en Moscú, cuando nos fuimos se descontrolo, llamare a Luka para que venga por nosotros
-el no ira a ningún lado
-si quieres cuidarlo, más te vale no dejarlo solo, le diré a Luka que pase por mí pero necesito que me avises cuando despierta, y si se torna más frio llama a una ambulancia.
-no le importara a su alfa que lo dejes aquí conmigo
-deberías hablar con él- el pequeño omega se quedó recostado junto a su hermano hasta que le llamaron, con mucho pesar se fue y Víctor cerró la puerta, solo quería estar abrazado a Yuuri evitando que su cuerpo se enfriara
-duele
-aquí estoy, que te duele
-Víctor- sus ojos se abrían pero Yuuri lo veía todo atreves de una bruma
Para Víctor el sentir sus delgados dedos recorrían la cara, su cuerpo se movió y lo abrazo
-no me dejes, te amo- sus delicados dedos recorrían mi rostro con tanto amor que corto su respiración, poco a poco comenzó a pasarlos alrededor de mi mandíbula siguiendo el contorno de mi cuello pasando a través de su clavícula, con cada toque se aceleraba su corazón.
Víctor de un rápido movimiento lo volteo y quedo sobre el Yuuri, él seguía delineando su cuerpo por sobre la ropa, poco a poco se acercó a él, llevaba tanto tiempo ocultando lo mucho que lo necesitaba, necesitaba hacerlo, sentir sus labios, su dulce aroma envolviéndole...
Víctor veía a Yuuri bajo él, su rostro ya no mostraba la palidez de hace un rato, un ligero sonrojo cubría sus delgadas mejillas, la yema de sus dedos se deslizaba atreves de su rostro, extrañaba la anterior textura de su rostro siempre lozano y suave, sus adorables mejillas que lo invitaban a morderlas siempre que le era posible habían desaparecido, su piel se sentía fría, su cintura era más fina que nunca.
Las manos de Yuuri recorrían cada centímetro de él, sus labios se acercaron a su cuello, para Víctor fue una sensación que ya había olvidado, la calidez de su piel, su sutil aroma, sus suaves dedos recorriendo la piel expuesta de él, la manos de Víctor comenzaron a hacer el recorrido que muchas veces había hecho, sus dedos se deslizaron bajo la blusa blanca dándole acceso a la tersa piel de su abdomen, recorría con la otra su espalda, sus labios buscan su hipnotizante aroma, Yuuri mostro su cuello, con total sumisión a su alfa, su lengua preso esa zona que le producía suaves jadeos a su omega, haciendo que se aferrara a su camisa, la ropa fue desapareciendo, con cada jadeo de sus labios.
Para Víctor, no existía una imagen más perfecta que Yuuri desnudo bajo él, su piel teñida por un leve rubor, una fina capa de sudor que hacia brillar cual delicada joya, su cabello hacia atrás, dejando ver sus enormes ojos, esa era una imagen que lo acompañaba cada vez que cerraba sus ojos, esa hermosa imagen que había tenido la dicha de ver unas cuantas ocasiones, cuando a través de tímidas caricias se dedicaban a conocer sus cuerpos.
Pero la imagen frente a él, no era la de sus recuerdos, su piel era de un blanco enfermizo, su delgadez marcaba cada hueso de su anatomía, la imagen frente a él, rompió una parte de su corazón, su abalanzo sobre él sosteniéndolo como si fuera el más fino cristal que con solo tocarlo lo haría desaparecer, y lloro sobre su pecho, toda la tristeza, remordimiento e impotencia se filtró a través de sus ojos, cada gruesa lagrima que llevaba un tiempo reprimiendo la dejo filtrar, junta al dolor de saber que quizás, la pérdida del amor de su vida estaría más cerca de lo que, se quiso admitirse a sí mismo, los suaves dedos de Yuuri recorrían su espalda tratando de calmar su llanto, su aroma era tan tranquilizador, se dejó ir atreves del re confortable calor que ambas pieles se transmitían, se dejaron llevar a través de la bruma del sueño que hace tiempo ninguno disfrutaba, la paz y el sosiego que solo tenían al estar en brazos del otro.
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Betterswett Memories
FanfictionEstábamos destinados a encontrarnos, pero ¿Quien dijo que era para estar juntos? Todos los derechos de Yuri!!! On ice pertenecen a MAPPA a Sayo Yamamoto y a Mitsuro Kuro