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—Deben hacerlo—dijo mi padre.
Suspiré, agachando la mirada.
La agencia había caído. Nos encontrábamos todos en el cuartel, a punto de hacer algo que cambiaría todo.
Debíamos borrar todos nuestros recuerdos, los que involucraban a JEI.
—Gilbert...
—Lo sé, borrarán prácticamente toda nuestra historia. Pero es lo mejor para todos. No puedes seguir con aquellos oscuros momentos del pasado, Grace.
Tomé su mano y el la acarició.
—Te olvidaré—susurré.
—Se que nos volveremos a encontrar.
Nos dimos un pequeño beso, lleno de lagrimas.
—Debo hacer algo primero—anuncié.
Agarré dos pequeños pedazos de papel de mi mochila y los guardé en mi bolsillo. No debían saberlo. Había algo en mi que no quería olvidar esos dos trozos de vida.
Regresé con ellos y abracé a mi hermana. Visualizando por última vez nuestros recuerdos de aquella vida de mentiras, de Avonlea, de nuestras pequeñas aventuras como espías. A Anne, a Josie. Miss Stacy y Mary Stuart... Gilbert Blythe.
Ni siquiera tuve el valor de mirarlo una vez más. Addison me sonrió con tristeza e indicó que era mi turno.
Adiós, espía mentirosa.
—Te aseguro, es la mejor cafetería de todas—insistió Addison.
Nos empujó a Noah y a mí. Fruncí el ceño al ver el nombre "Speranza", ¿qué clase de nombre es ese para una cafetería? Entramos y el olor a pastel recién horneado inundó mi nariz.
—Gracie—sostuvo mi mano, Noah—. Allá hay asientos libres junto a la ventana.
Adds resopló al escuchar el apodo que utilizó mi novio al llamarme. Según ella solo nosotras podíamos decirnos así. Nos sentamos, y al instante la sentí incómoda, como una tercer rueda. Pero no quería que eso sea así. Quería que sigamos siendo amigos, a pesar de que ahora este con Noah.
Si, luego de un tiempo de que me guste, decidí confesarme ante él, y terminó siendo que sentía lo mismo que yo. A mi hermana Rose no le agradaba el hecho de que esté junto a él y no me quiere decir la razón.
—¿Qué les sirvo?—preguntó un chico llegando a nuestra mesa.
Era el mesero del lugar. "Gilbert" leí en su etiqueta. Sonreí inconscientemente, sin razón.
Los alumnos de Avonlea se encontraban en el bosque. Fueron a la escuela pero no habían encontrado a la profesora Stacy. Ni a Gilbert y Grace.
Anne afirmó que debían investigar qué pasó.
—No quiero ser chismoso pero escuché que Gilbert y Grace están juntos—dijo Moody.
Ruby sonrió, ya no le afectaba aquello. En cambio Anne se debatía si estar feliz por su amiga o enojada, porque estaba claro que ella sentía algo por el chico desde hace mucho tiempo.
El grupo de chismosos paró la caminata al ver como Diana encontraba algo en el suelo.
—Parece un reloj—susurró.
—¡Déjame ver!—exclamó Anne.
Los chicos comenzaron a pelear por quien sostenía el extraño reloj, causando que este caiga al suelo. Se abrió un portal enorme cerca de ellos.
¡¿Qué habían hecho?!
tremendo final mandé, pero no creían que termina todo allí, ¿o si?
