20. Cuidate la Espalda

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Si en algún momento llego a desaparecer, El Reino mi hija jamás va a tener.

Hayden se lo repetía, una y otra vez desde que el recuerdo había golpeado en su cabeza, las preguntas la invadieron, el ácido en el pecho regresó, la incógnita más grande estaba dándole dificultades para respirar (y los ojos de Harold Hook en su nuca no ayudaban a que ella se concentrase).

Él le había que no era hermano de Harry, sino primo, pero a ella no le interesaba si incluso era su novio: era un Pirata, no tenía que haber más explicación.

Lo odió más justo cuando iba a córtale el cuello "sin querer" en plenas prácticas de espadas.

Maddy les había llevado a un edificio muy lejos de la sucia civilización de la Isla, estaba en su totalidad destruido, tenías que estar al tanto de que no te cayera un ladrillo en la cabeza.

Luego explicó, que la primera fase del plan era entrenar, puesto que en Auradon tenían muchísima seguridad, guardias expertos en darte dos espadazos y tirarte al suelo, incluso, la gente de Mal sabía cómo hacerlo (pues Hayden les había dicho cuando los vio luchando contra Uma), pero tenían tremendo problemón: Maddy NO sabía para nada cómo usar una espada, para Ginny era demasiado pesada y Anthony no quería ni tocarla (lo único que había hecho bien, había sido conseguirle un traje nuevo a Hayden ya que el otro quedó hecho jirones).

Este era el momento del día donde la cabeza de Hayden es influenciada por la Reina de corazones para cortar la de los demás.

—Son un desastre —jadeó Hayden lanzando la espada al suelo—. Me dan pena ajena.

—Tú eres el desastre —atacó Maddy—. No puedes pelear si te rebanan el cuello.

—Tú no puedes pelear si te auto-mutilas la mano.

—Por amor a Dios —intervino Anthony—. Por este tipo de cosas nunca saldremos de la Isla, primero lo haría...

—¡Uma! —Gritó alguien desde afuera del edificio— ¡Uma se ha escapado de la Isla!

Todo el grupo, se vio a la cara incrédulo y corrió hasta la ventana, el niñito que lo había gritado, los estaba vociferando emocionado por todo el lugar, aunque casi no hubiese nadie por esos lados.

—¡Qué bien! —Exclamó Maddy molesta— Hemos perdido todo este tiempo haciendo que te unas para nada, Uma se ha ido y ahora no somos nadie más que unos zopencos.

—Tú sola —respondió Hayden agresiva—. La única razón por la que me uní a este grupo de zopencos era porque necesitaba salir de aquí, y ahora se han detenido porque un pulpo salió primero.

Hayden empujó a Harold y caminó hasta la salida, cabía destacar que su cabello estaba azul hirviendo.

Salió del edificio, pero antes de que pudiera seguir caminando una punzada en el pecho la tumbó al suelo, chilló de dolor, no podía entender ¿Si había recordado todo por qué seguía teniendo esos ataques? Pero no era un recuerdo: Era una visión.

Era su padre, Hades estaba hablando de alguien, de su hija.

Pero no era de ella.

Volvió a chillar, ahora Hades estaba molesto, su cabello ardió, Hayden sostuvo su pecho y algo frente a ella la espantó.

El suelo comenzó a abrirse.

—¡Hayden! —gritó Harold desde arriba.

Todos bajaron, y la miraron en el medio de la calle, sufriendo, pero nadie hizo nada, el hoyo en el suelo parecía más interesante, especialmente para Maddy, que tuvo una idea realmente divertida, únicamente para ella , claro está.

En cuanto Hayden pudo ponerse de pie, corrió hacia ella y la empujó.

Hayden cayó al hoyo, sus gritos se escuchaban más y más lejos, hasta que solo reinó el silencio.

—Gothel —dijo Maddy tras volver al resto de los chicos—. Mano derecha de nuevo.

Ginny asintió aturdida, sin quitar la mirada del pozo.

Miradas del Inframundo [An Under Disney Descendants Story] "TERMINADA"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora