Miradas del Inframundo [An Under Disney Descendants Story] "TERMINADA"

35. Break This Down

Hubiese querido llegar en una situación diferente, hubiese querido que todo lo que le estaba sucediendo fuese diferente, se preguntó por un momento cómo hubiesen sido las cosas si tan solo su padre no hubiera sido tan cruel con ella.

Todo hubiese sido muchísimo mejor.

Cheshire le estaba hablando, Astrid le decía algo, pero estaba tan hipnotizada con todo a su alrededor que casi no los escuchaba, todo era hermoso, así como mostraban en la televisión de la Isla: perfecto.

Algo la sacó de sus pensamientos, una canción, bastante alegre, escuchaba todo tipo de instrumentos, una banda completa, gente aplaudiendo, vitoreando, riendo, todos se oían realmente felices.

¿Por qué ella era la única que estaba asustada y melancólica?

—Eso es muy cerca de aquí —dijo Cheshire volando a su lado— ¿Por qué no vas a bailar un rato?

Hayden negó con la cabeza y lo echó para un lado, ella no había venido precisamente a divertirse, tenía muy poco tiempo antes de que el hechizo de Zeus se acabara y volviera a sentirse débil.

Se apresuró hasta unas enormes piedras y se escondió ahí, veía una fila de gente que bailaba con un montón de pancartas coloridas, gente de la Isla, gente de Auradon, todas en un mismo sitio, incluso pudo ver de lejos a Lady Tremaine sonriéndole a todos.

¿Qué mundo loco era ese?

Cheshire y Astrid estaban discutiendo del por qué ahora nadie la vería, solo él y Hayden, esta le preguntaba por qué y a lo que este respondía "cosas gatunas".

—¡Mira es Hades! —dijo Cheshire.

Hayden volteó a mirarle y efectivamente ahí estaba él, ahora Mal le abrazaba, se dijeron un par de cosas y luego este le hizo una seña de advertencia al Rey Ben, que ahora abrazaba a Mal.

Luego se unió a la celebración.

El Dr. Facilier, El señor Smee, ambos también estaban ahí con sus respectivos descendientes, lo que a Hayden le dio tristeza y celos ¿Era mucho pedir algo así? Parece que sí.

El hechizo se acabó y volvió a sentir un pinchazo ahora en el estómago, se encorvó un poco, Astrid la llamó, Hayden se volvió a quejar.

—¿Crees que puedas esperar hasta que acabe la celebración y todos se dispersen? —Preguntó As sujetándola— No falta mucho para ello, luego seguirán en la noche estoy segura.

Hayden asintió con la cabeza y trató de incorporarse, tuvieron que esperar más de media hora para que acabara todo, cuando por fin no había nadie empezó a moverse, pero luego los escuchó a los cuatro:

—¡El último en llegar es una Manzana Podrida!

Los vio corriendo felices hacia la Isla, quizás, para visitar a sus madres y padre (en el caso de Jay) y cuando ya no pudo verlos desapareció de ahí con cierta melancolía y curiosa de saber qué le diría Maléfica a Mal cuando la viera.

Se cruzó con un par de Perdidos que no le dijeron absolutamente nada, todos estaban felices hablando entre ellos, con algunos príncipes y princesas, todos mezclados.

Aparentemente, Cheshire tenía razón, nadie podía ver a Astrid a excepción de ellos dos (pues si alguien hubiese visto a la princesa flotante hubiesen salido huyendo).

Buscó a Hades con la mirada, estaba nerviosa, no había practicado cómo robarle la brasa ¿Se la pediría por favor o simplemente se la quitaría de un sopetón? Quizás podría golpearlo en la cara y salir corriendo, pero, la verdadera pregunta inundó su cabeza y la pusieron más nerviosa que antes: