21. Cayendo Como Alicia

340 32 52
                                    

Hubo una vez, una pequeñísima vez en que ambos eran cercanos, pero era tan lejano aquello que ni siquiera en todo eso que recordó de golpe estaba ese recuerdo nítido.

Ya después de todo esto no sabía quién era en realidad el malo de la historia.

Fue una caída larga, realmente larga, se sintió como ese cuento que había leído hace ya un tiempo, donde la niñita rubia corría en busca del conejo blanco y cae por un hoyo.

Solo que Hayden no iba camino al País de las Maravillas.

Abrió los ojos casi saltando, estuvo segura de que seguía cayendo, quizás, en su momento de inconsciencia lo soñó, al igual que cuando golpeaba a Maddy en la cara.

Se incorporó, soltando varios quejidos de dolor, se había golpeado la sien al caer, asi que le sangraba un poco, miró hacia arriba, podía ver la inmensa "O" brillante por donde cayó, la cual se estaba cerrando.

Primero un cuarto, luego una media luna, luego una pequeña rayita de sol y luego nada.

Oscuridad.

Lo único que brillaba era su mechón azul, débil, tenue, casi apagándose.

Ella no se sentía bien.

Se acostó de nuevo, ahora bocarriba, mirando hacia donde el inmenso hoyo estaba hace un segundo, una lágrima corrió por su mejilla izquierda y la sien le dolía, tenía el presentimiento de que no vería la superficie por mucho tiempo.

También estaba segura de que esa no era su casa.

Si algún día llego a desaparecer —empezó a decir con voz quebradiza— díganle a mi padre que de todos modos el reino nunca desee.

Luego cerró los ojos, como cascadas, las lágrimas caían mientras ella trataba de entender el porqué de todas esas cosas que le estaban pasando.

De repente, una risa malvada y estrepitosa la sacó bruscamente de sus pensamientos, haciendo que se incorporara de golpe, mirando hacia todos lados, su mechón aumentó la intensidad, la risa era un eco en las paredes, la luz azul del fuego que ella creaba se volvió verde, pero no por ella sino por quien estaba detrás.

Hayden volteó a mirarla, pero no se asustó en lo absoluto, se levantó y se limpió el traje, sin dejar de mirarla hizo una mueca de medio lado, lo más cercano que pudo a una sonrisa.

—Hola, Mamá —dijo Hayden.

El Hada Malvada sonrió y se acercó a ella, colocando un mechón castaño detrás de su oreja.

—No seas tan seria, querida —Dijo Maléfica.

Hayden sintió la necesidad de abrazarla, pero era una villana y no hacían tal cosa, así que solo se contuvo.

Maléfica tomó su mano, guindola hacia algún lugar en la oscuridad, pero Hayden ya no se sentía perdida o asustada.

—Debo admitir que has sido muy lista al deducirlo —declaró el Hada— ¿Cómo lo supiste?

—Es cosa de familia —dijo Hayden.

Maléfica soltó una malévola risa nasal y mientras caminaban, Hayden sentía como algo dentro de ella iba cambiando, o más bien regresando.

Miradas del Inframundo [An Under Disney Descendants Story] "TERMINADA"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora