Mi Muñeco de Porcelana [YM][COMPLETA]

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En la vida algunos piensan que ser amigo de alguien que amas sería doloroso y algo malo para ti mismo, si es que tú eres el enamorado y tú amigo o amiga la que no corresponde al sentimiento.

Pero hay ocasiones en las que una amistad perdura sin importar que sus sentimientos no sean correspondidos. Pues se supone que la amistad era una cosa y el amor otro. Y sabías las persianas que sepan separar eso.

— ¿JiMin?

— ¿Si, Hyung?

— ¿Cómo... Cómo vas con tu foto para el concurso?

— ¡Oh! Creo que he encontrado la indicada. ¿Quisiera verla Hyung?

— Me encantaría Minnie. — contesto con una sonrisa YoonGi viendo como los bonitos ojos de JiMin se iluminaban.

El menor camino hacia su mochila sacando su cámara en donde se guardaba la foto. Una vez sacada JiMin caminó de regreso sentándose más cerca del mayor para que él lo pudiera ver.

— Mire, es esta. — mostró la pantalla de la cámara en donde una foto de la playa se reflejaba. Y YoonGi recordó lo que había visto ese día. — A que es bonita.

— Hermoso. — dijo convencido viendo el perfil de JiMin.

— ¿E-eh? — el rubio volteó a verlo un tanto avergonzado notando que YoonGi lo veía atento.

YoonGi se dió cuenta de lo que había dicho sin pensar comenzando a sentirse un tanto acalorado, y no sabía si exactamente por haber dicho eso sin titubear a JiMin o que la distancia se empezaba a acortar entre ellos dos.

JiMin al notarlo de igual forma se empezó a hacer para atrás tratando de separarse lentamente, sin notar que la pared estaba justo detrás suya.

— A-ah... — y eso fue porque se había dado un cabezazo en la pared.

— ¿Estás bien? — sus manos viajaron rápido hacía la parte trasera de la cabeza del menor para revisarlo.

— S-si...

Pasando su mano acariciando lentamente la aparte golpeada dejo un pequeño beso en esta y después sus manos se dirigieron a las mejillas regordetas del menor que se encontraban un tanto rojas.

— Perdón...

— No te preocupes, Yoonie.

— ¿Te quedas a comer? ¿huh? — Dijo tomando la cámara viendo por última vez la hermosa foto que había retratado JiMin y se dispuso a guardar el aparato en la mochila del menor.

— Claro.

El tema de su relación era como algo tabú durante todo este tiempo, pues desde que el menor lo había confesado, ambos había quedado como en un pacto silencioso y nunca dicho para no hablar sobre ello. Era como si el hecho de que JiMin gustaba de el no existiera. Pero como dicen... La curiosidad mató al gato.

— Y... ¿Cómo es tu relación con SungWoon? — JiMin, el cual tenía agua tranquilamente sintió como está se iba chueca por la repentina pregunta haciéndolo toser. — ¡JiMin! ¿Estás bien?

El menor asintió pasándose un trozo de pan para calmarse un poco.

— Estoy bien... — respiró un poco y pensó en algo para poder responder la pregunta. — Eh... Bueno, SungWoon y yo vamos bien, es buena nuestra relación, si.

Continuó con si comida viendo como YoonGi apretaba parte de su cuchara.

— Me... Me alegro... ¿Te trata bien?

— Sip. — Dijo rápido y directo, pues sabía JiMin lo que estaba apunto de pasar queriendo cortar esto más lo más pronto posible.

— Eso está bien, bueno, sabemos que tú relación perfecta sería alguien que tratase bien. — tomó mejor su cuchara y decidió comer. — Bueno, SungWoon es buena persona si, tienen su pasado en la escuela y eso pero-

— ¿A qué viene esto Hyung?

El ambiente se volcó denso, y el silencio reino por algunos segundos provocando nerviosismo en ambos.

Y para ser sinceros, YoonGi no tenía la menor idea de porque había empezado a indagar en ese tipo de terrenos que el había puesto un límite de peligro.

No respondió. Pero en su mente se repetía la misa oración una y otra vez.

"Yo sólo quiero que no te pase nada, Minnie".

[...]

El parque en la tarde de los días de vacaciones se encontraban un tanto llenos, algunos caminaba hablando por teléfono a o otros con personas las cuales los acompañaban, personas con sus mascotas caminando tranquilamente al igual que algunos patinadores y personas en tablas se encontraban rondando por el lugar, algunos compitiendo y otras por diversión pura.

JiMin habia decidido ir al parque ha seguir con la sesión se fotos — al fin y al cabo no tenía nada que hacer durante la tarde —. Justo ahora SungWoon y Taehyung habían ido por algo de comer dejando a JiMin solo, y este diciéndoles que no le pasaría nada.

Sentado en una banca miraba todas las fotos que había tomado, revisando una que otra que YoonGi había tomado de él sin permiso tiempo antes. En las fotos se le apreciaba distraído brindó a la ventana sin darse cuenta que YoonGi le estaba tomando un montón de fotos.

Y eso era real, JiMin solia ser muy descuidado en ocasiones, cuando salía la mayoría de veces alguien lo acompañaba, y esas veces era YoonGi, el cual no se le despegaba alegando que no quería que le pasase algo. Ya había pasó una vez que JiMin se había despegado de su madre una vez por haber ido a ver una mariposa en una flor y la mujer había pegado el susto de su vida. Eso ocurrió cuando JiMin tenía 13 años, pero saben que las madres son muy paranoicas en ese tipo de cosas.

Peor bueno, una vez que YoonGi y él había terminado de comer, SungWoon pasó por el rubio para llevarlo al parque junto con Taehyung, pues SungWoon en los siguientes días podría estar un tanto ocupado por la visita de su novia, Sunmi.

JiMin vió como un pequeño perrito comenzaba a ladrar captandolo con su lentilla de la cámara. Rió y sacó unas cuantas fotos viendo como de tierno salía el pequeño gran danés en la fotografía. Caminó para llegar a el mientras guardaba en su estuche la cámara en su mochila, pero notó como uno de sus llaveros se había desprendido de su mochila parándose por completo.

Se agachó para tomarlo entre sus manitos para guárdalo en su bolsillo y en casa arreglarlo, todo iba bien hasta que escuchó como alguien gritaba un "¡Cuidado!" El cual captó toda su la atención del rubio, y en un abrir y cerrar de ojos se encontraba en el piso, sintiéndose como algo se rompía dentro de sí.

— Por dios, ¡JiMin!

Auch...

—Wendolen💜