LA LUZ QUE IRRADIA UN MILAGRO

Mi sacrificio valio la pena!!!

Pov Calle

Recamara en penumbras, alumbrada por una tenue luz, el sonido del mar pegando a lo lejos, el silencio de la noche y nuestros cuerpo entrelazados después de hacer el amor, había besos, caricias y palabras hermosas, no había fin para ellas, ellas es todo lo que yo amo y sé que ella me ama con la misma intensidad que yo la amo, la observo dormir, con esa paz que siempre tuvo al dormir, ella es mi vida y prometo amarla por siempre.

Me levanto de la cama y salgo hacia la terraza, el cielo se ve tachoneado de estrellas, lo veo y suspiro, internamente pronuncio un -"gracias Matu" y veo hacia el mar y me pregunto que será de Paula, donde estará y que estará pensando ahora, sentí cierto frio así que cerré la puerta corrediza y volví a mi lugar con mi esposa.

TRES AÑOS DESPUES...

Pov Poché

-¿Es hermoso no crees? -me dijo mi esposa, yo asentí mirando al bebé de ojos azules que tenía en sus brazos, los admire y la escena me encantaba, pensé que me hubiera gustado así verla cuando nació Andrea, pero bueno eso ya era cosa del pasado, trataba de no pensar en el pasado, trataba de disfrutar cada momento que pasaba con mi familia, con mis amigos, con mi esposa

-Si es hermoso, pero cuando llora me altera un poco los nervios, creo que ya estoy vieja para esas cosas -le dije aun mirándolo mientras comenzaba a dormirse en los brazos que lo mecían

-¿Enserio? Uy yo que quería otro -me dijo sonriendo entre picara y divertida, le sonreí de la misma manera

-Bueno amor entonces empecemos a practicar para aumentar la familia -le guiñe un ojo y me acerque a besarle, el pequeño bebé rubio comenzó a llorar, solo suspire pesadamente a lo que mi esposa rio

-y ¿donde es que se encuentran sus madres? -dije tratando de divisar a Manuela o a natalia pero a ninguna veía

-Déjalas que se diviertan amor, no te casas todos los días -tenía razón, pero quería que se hicieran cargo de su hijo por un momento para que yo pudiera disfrutar de la boda con mi esposa, justo cuando parecía que por fin iba a poder disfrutar la fiesta en compañía de mi esposa, me interrumpió Mario, diciéndome que era hora, me tuve que ir a donde estaba tocando la orquesta, era hora de devolverle el favor...

Si, seria la maestra de ceremonias de su boda, se había casado con Juliana, había sido el mismo día que Natalia y Manuela, ellos habían decidido que fuera así, me divertí bastante como maestra de ceremonias y con todo el ritual de una boda, por fin me toco sentarme y poder disfrutar de la boda con mi esposa, pero ella quería disfrutar también conmigo, me pidió que bailáramos, la música era romántica, estaba disfrutando del momento cuando sentí que alguien toco mi espalda y me voltee sonriente para ver quien había sido y la sonrisa se me desvaneció al ver la seriedad en su cara

-Ho...hola Paula -le dije quedándome parada ya sin bailar

-Hola Poché -me dijo aun seria, no sabía cómo reaccionar había pasado algunos años, como reaccionar después de todo lo que paso? No sabía, me perdi en mis pensamientos, hasta que escuche nuevamente su voz 

-veo que eres feliz, al menos mi sacrificio valió la pena -me dijo mirándome

-Sí, soy feliz, gracias...gracias a ti Paula, y me pregunto, ¿tú eres feliz? -agacho la cabeza y se quedo unos largos segundos así y levanto la cara para darme una gran sonrisa, lo cual me desconcertó y de repente dio media vuelta y pensé que se iría pero vi que le tomo la mano a alguien, una mujer morenita, de una hermosa sonrisa, la joven volteo y se dejo guiar por Paula

-Si Poché soy feliz, ella me hace feliz -miro a la chica y la chica le sonrió dulce y amorosamente

-te la presento, se llama Camila Jiménez y ella es el amor de mi vida, lo supe cuando la vi aquella tarde en aquella playa venezolana, tan solitaria como aquella playa privada de aguas tan cristalinas,pensé que era una bella aparición, pensé que quizá aquella playa en Los Roques tenía algo mágico y era una bella aparición, pero no, era real -la chica me extendió la mano

-¿Así que venezolana eh? Mucho gusto María José Garzón, pero dime poché, me da un gusto enorme que Paula sea feliz- le dije y era verdad, ellas se miraron y vi que había amor, me daba mucho gusto que eso pasara, me daba gusto que fuera feliz como yo lo era, sentí una mano en mi espalda, voltee y era mi esposa, que al ver a Paula le brindo una sonrisa y Paula se la devolvió, me di cuenta que aunque habían pasado muchas cosas esa amistad no se iba a romper, nos despedimos de ellas porque apenas habían llegado y aun tenían que felicitar alos novios.

La boda transcurrió sin mayores complicaciones, ya casi se acababa la fiesta, algunos ya estaban agotados, otros con tragos encima, algunos ya se retiraban, la fiesta había sido todo un éxito, yo hablaba con algunos trabajadores de la empresa, que había sido invitados, cuando me acordé que no veía a mi esposa por ningún lado, me disculpe de todos ellos y la busqué, estaba mas allá de donde estaba el improvisado salón que era al aire libre, estaba recargada en una pequeña barda, la noche era fresca y ella miraba al cielo tachoneado de estrellas, me acerca y la abrace por la espalda y bese su hombro descubierto debido al vestido que portaba, ella no volteo a verme,pero supe que sonrió

-¿Que haces mi amor? -le susurre al oído

-Miro el cielo -sonreí

-¿Y porque miras el cielo? -ella giro quedando frente a mí y me sonrió, me miro a los ojos y con su mano acaricio dulcemente mi mejilla

-Porque alguien alguna vez me dijo que cada vez que lo hiciera me acordaría de lo que me dijo y tal vez con ello llevaría la suplica para volver a ver su esposa, chance y se cumplía el milagro ¿no? -me dijo regalándome una tierna sonrisa

-Pues entonces gracias, porque a ti se ha cumplido el milagro, gracias amor -me acerque a darle un pequeño beso

-¿Gracias porque amor? -me dijo extrañada

-Por todo,por amarme como lo haces, por hacerme tan feliz, por haber regresado, por Haberme regresado a la vida, porque tú eres mi luz, la luz que ilumina mi camino, una luz que se apago cuando tu falleciste, pero que cuando apareciste volvió a encender a mi corazón -ella me sonrió y me acerque a besarle contodo el amor que siento por ella, por esa mujer que me remueve todo dentro de mí, por esa mujer que daría mi vida, por esa mujer que fue capaz de romper las barreras de la muerte y regresar para hacerme feliz el resto de mi vida, esa mujer que sin planearlo regreso para volver a ser una nueva luz en mi camino, la luz que irradia un milagro.
10/10

Muchas gracias por el apoyo brindado, los amooo y cuéntenme qué tal les pareció y así como todos lo querían, paula fue feliz 🥰🥰