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21 de Marzo del 2000.
—¿Este es tu pequeño?
La mujer que se encontraba recostada sobre la enorme cama asintió.—Acercate...
La otra mujer que la miraba, tomo a sus dos pequeños en brazos y se acercó a ellos.
La mujer recostada, que era la reina Hwang destapó un poco al recién nacido, así dejándolo a la vista de sus invitados.
La reina Bang se acercó y lo observó.—Es muy lindo.
La reina Hwang miró a su bebé.—Lo es...—Dijo empezando a acariciar su cabeza.
La reina Bang parada acercó a sus pequeños.—Miren amores, su nuevo amiguito.
Al acercar a sus bebés, su hijo mayor se acercó más, así estirando su pequeña manita, acarició la mejilla del recién nacido con suavidad.
—Sí... Suavecito.—La reina Bang dijo en voz baja para no despertar al recién nacido.
La reina Hwang miro al pequeño acariciar la mejilla de su recién nacido, causando un brillo en sus ojos, ternura recorriéndole.
La reina Bang se alejó y miro a su amiga, la reina Hwang.—Me alegro que todo haya pasado bien, al llegar la carta avisándonos de que tu bebé había nacido nos vinimos de inmediato.
La reina Hwang sonrió.—Muchas gracias, me alegro demasiado de que estuvieran aquí.
