v e i n t e

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Bueno, creo que si tenías el mínimo de inteligencia sabrías que lo más probable era que la chica de la que estaba hablando la madre de Jungkook era yo; pero me confundía, porque la pregunta podría venir con chanfle y estarme diciendo que le gusta otra que no soy yo y si eso fuera verdad, déjenme decirles que mi corazón se partiría en dos.

Tal vez no me cueste aceptar que me gustan muchos de los gestos de Jungkook, pero sí me cuesta aceptar que él me gusta.

—ya estoy listo, ¿nos vamos?

Jungkook apareció en la puerta de la cocina. La mujer miró a su hijo y sonrió.

—¿no invitas a tu hermosa novia a cenar? Pueden venir después de su cita.

Y ahí va el ardor de mis mejillas y las malditas avispas africanas en el estómago. Jungkook rió y asintió con la cabeza.

—si no regresamos tarde, Saeron se queda a cenar.—dijo y tomó mi brazo—. Ya nos vamos, ma'.

—cuídense, niños.

Salimos del departamento de Jungkook y caminamos hasta la estación de trenes. Aún no sabía qué tenía pensado hacer este chico conmigo, pero supongo que no sería nada del otro mundo. No iríamos a robar aliens del área 51, pero todavía me preguntaba si era una cita, parte de su plan para darle una oportunidad o si realmente me invitó como una amiga y nada más.

—tu madre es increíble.

Jungkook me miró y rió ante mi comentario. Supongo que le hacía gracia que me cayera bien su madre, sobretodo porque no se parece en nada a él. Tal vez un poco físicamente, dado que las facciones de Jungkook son perfectamente una mezcla de ambos de sus padres, pero en cuanto a su personalidad, creo que Jugkook no es exactamente parecido a ella.

—me alegra que se lleven bien.—mencionó contento.—. Quiero creer que siempre sería así si viviéramos juntos, pero tal vez se comporta de esa manera porque no me ha visto en mucho tiempo.

—esta vez reí yo—. Bueno mis padres harían lo mismo, no te sientas mal.

Sí, era cierto, al igual que la madre de Jungkook, podrían portarse conmigo como si fuera el presidente si llegara a visitarlos en estos días o en vacaciones. Llevo dos años o tres seguidos sin verlos, a menos que hayamos tenido llamadas telefónicas o videollamadas.

—cambiando de tema...¿a donde me llevas?

—bueno, hay muchas cosas que podemos hacer. Pero personalmente, me gustaría ir al cine.—mencionó colocando la palma de su mano en su pecho. Reí por su sugerencia de actividad. Y es que pude haberme emocionado por estar a solas en un lugar obscuro viendo una película con Jungkook, pero yo sabía muy bien por qué quería ir al cine.

—adivinaré, —pasé mi lengua por mi mejilla— ¿veremos End Game?—Jungkook hizo un intento por no reírse pero falló, soltó su risa mientras sus mejillas se adornaban con un hermoso rubor.

—me descubriste.

—adivinaré de nuevo...¿le agregaron minutos?—volvió a reír nerviosamente—. Jungkook, son tres horas de película. ¿De verdad me pediste salir para ver eso? ¿Inclusive cuando ya la he visto como tres veces?

—sólo era una sugerencia—se encogió de hombros—. Podemos hacer otra cosa, lo que tú quieras.

—¿lo que yo quiera?

Jungkook asintió con la cabeza sin saber lo que se me estaba ocurriendo que hiciéramos en ese momento.


[....]

L'échange; J.jkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora