C A P Í T U L O #33#

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Narra Hobi





" Llegaste para iluminar toda mi vida,
le diste un nuevo sentido,
juro que lucharé con todas mis fuerzas
con toda mi mente también,
para que juntos salgamos de esta pesadilla. "

Una pequeña pero significativa lágrima cayó al cuaderno de Jimin, todos sus poemas eran arte, Park Jimin era arte.

Ya estaba harto de esperar, necesitaba ver sus ojos ya..

Una estúpida semana con Jimin inconsciente, ya era mucho, No?, la pelea con su mamá le había hecho muy mal y al desmayarse no despertó.



" A veces me gustaría cambiar el destino,
decirle que tengo a alguien con quien...
aprendí a ser feliz; es injusto,
no debería existir la muerte, el dolor,
para las personas buenas que se aman,
a veces me gustaría cambiar el destino. "


- A mi también Chimmi- acaricie el cuaderno y la almohada que tenían el olor de mi querido paciente impregnado.

Quería su sonrisa de vuelta...

Dejé los objetos a un lado y me levanté del sillón para contemplar a Jimin.

Su rostro estaba pálido, su cuerpo conectado a muchos cables, y su respiración tranquila.

- Despierta, por favor- desde que había caído en ese estado tan deplorable, yo no me cansaba de repetirle esas palabras.

Ya me había encariñado demasiado con mi paciente, al punto de enamorarme.

Escuché la puerta abrirse pero no le di importancia, luego sentí una mano en mi hombro, me voltee y miré hacia los cálidos y tristes ojos de Jungkook, quien me miraba con dolor.

- N-no hay n-ningún cambio?- su voz temblorosa me rompió el corazón, todos estábamos sufriendo.

- Al p-parecer no- le sonreí tristemente y el apretó un poco más mi hombro, como gesto de apoyo.

- Y-ya va a despertar, no te preocupes- sin quererlo bostecé, ya hacia tres noches que no dormía bien pensando en cuando despertaria Jimin, Kookie lo notó y sonrió- Ve a descansar Hobi, necesitas dormir, yo me puedo quedar con mi hermano.

- No, p-pero y s-si..

- Pero nada, estas muy cansado, y no creo que quieras que Jimin te vea con esas tremendas ojeras cuando despierte, o si?

- E-está bien- me puse mi abrigo ya que la mañana había empezado helada, tomé las llaves de mi auto, el cuaderno de Jimin  y le sonreí a Jungkookie- Gracias, cualquier cosa me llamas- él asintió y me pide ir tranquilo.

Pasé por mi oficina para buscar la mochila en donde traía todas mis pertenencias, en eso escuché la puerta de la misma abrirse y los pasos de dos personas.

- Tío Hobi!!- la voz cantarina de Suni me hizo sonreír al instante, esta niña me podía hacer reír aún cuando lo estaba pasando mal.

- Hola,preciosa, Como estás?- le di un beso en la frente a la pequeña, y le sonreí con agradecimiento a Jisoo, quien venía con ella.

- Creo que bien, pero parece que el tío Jimin no- su sonrisa se convirtió en un puchero, yo la abracé para consolarla.

- Él se va a mejorar, no te preocupes linda- la sonrisa volvió un poco a su rostro, pero no del todo.

- Cierta pequeña estaba volviendo loco al tío Suga, Cierto?- me reí por la mueca que puso Suni.

- No! Se llama Tío abuelo Azúcar- Su voz me hizo reír aún más- y no me quería dar de su chocolate- se cruzó de brazos y yo me hice el ofendido.

- Pero que se cree ese Min, no darle chocolate a esta dulzura- le empecé a hacer cosquillas mientras Jisoo nos veía sonriendo.

- Yaya, paren los dos, nosotras nos tenemos que ir al cuarto para tomar los remedios, cierto Suni?- la pequeña asintió efusivamente, así que me despedí de las dos y bajé al primer piso del hospital para después salir y manejar mi auto a casa.

Seguía teniendo miedo, no sabía que hacer si Jimin se....

No, Hoseok..calma, él va a salir de ésta, va a estar todo bien, Okey?...


















Narra Jungkook





Me acuerdo de cuando Jimin y yo éramos pequeños y hacíamos algunas travesuras, él siempre abogaba por mi, me encubria y decía que yo no hacia nada.

Y ahora estando en esa fría e incómoda camilla, yo no podía devolverle todos los favores que él hizo por mi en el pasado.

Yo no podía hacer nada, me sentía realmente inútil.

¿Qué pasaba si él no despertaba?

¿Yo que haría? Si Jimin siempre estuvo ahí para mi, con sus consejos, su sobre protección, con esas sonrisas que alegraban mis días.

Yo no soportaría perder a mi hermano.

- C-con mi padre n-no fue suficiente? A-ahora te quieres llevar a Jimin?- dos horribles y saladas lágrimas cayeron por mis mejillas.

Lo único que tenía claro era que la vida era muy injusta, que podía pasar cualquier cosa, y yo no podría evitarlo.

La puerta de la habitación se abrió muy lentamente, pero le reste importancia pensando que seria simplemente una enfermera.


- Sook me dijo que estabas aquí- su voz me hizo temblar, voltee la mirada encontrando la de Yoongi, su rostro estaba serio, volteó la mirada hacia Jimin y me miró de nuevo.

- Y-yoongi...- me tiré a sus reconfortantes brazos y saque todo lo que tenia dentro por medio de lágrimas, él me recibió gustoso y me abrazó fuertemente.

- Él va a estar bien- dijo en mi oído, refiriéndose a Jimin.

Yo quería creer eso.

Pero...

- Tengo miedo- confesé con dolor y él me separó un poco de su cuerpo para mirarme a los ojos.

- Tu más que nadie sabes que Jimin es fuerte, no te puedo jurar que Jimin mejorará, pero esta mierda va a pasar- después dejó un pequeño beso en mis labios y me siguió abrazando.

Jimin es fuerte, si.

Jimin, tu eres fuerte, entonces ¿Por qué no despiertas?...



































" Juro no haber conocido una persona tan fuerte como tu, que has sabido salir adelante aún con tantos obstáculos, tanto dolor... "




I love you forever ▪︎Hopemin▪︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora