W-ire [JooKyun]

;Rescate (pt.1)

Se acomodó las gafas, suspiró y volvió a su cama, donde su laptop se encontraba abierta y en el mismo programa de recabación de datos desde hacía una hora. Otro día había pasado y no tenían un plan lo suficientemente sólido para ir a rescatar a ChangKyun por fin; había enormes ojeras bajo sus ojos y estaba seguro de que había bajado de peso por la preocupación que le daba el no tener noticias, pero trataba de no darle importancia, los chicos esperaban una orden y él no la tenía. ¿Su trabajo como líder acababa ahí?

Un rayo de esperanza llegó cuando consiguió armar algo conciso y que funcionaría para todo su equipo al ver unas coordenadas en la computadora, por lo que, sonriente y emocionado, salió de su habitación rumbo a la planta baja, esperando hallar a los demás viendo televisión o entrenando (rezaba por que fuese la segunda opción). Mas, por desgracia, se detuvo en la sala principal, donde todos estaban merendando y viendo alguna serie.

-¿Qué pasa, JooHeon? -KiHyun tomó un puñado de palomitas y las comió poco a poco.

-Chicos, necesito que usen los trajes. Nuestra nave buscada está sobre Jeju, no se ha movido de ahí, tenemos que ir ahora antes de que la perdamos de vista -explicó con rapidez mientras intercalaba su mirada en los cinco.

-¿Tienes una idea de lo que haremos? -preguntó con su usual curiosidad MinHyuk, obteniendo nada más que un asentimiento por parte del chico de gafas.

Inmediatamente, el rubio volvió escaleras arriba y se adentró a su habitación, buscando el traje del equipo para colocárselo; quería que las cosas funcionaran como lo meditó, quería poder sacar de ese tormento al pelinegro y a Jackson, ilesos.

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Gracias a su contacto con el presidente de la nación, los seis habían conseguido una avioneta que los llevaría hasta la isla, esta sobrevolaría la nave y ellos tendrían que arrojarse en paracaídas para llegar a ella. JooHeon trató de explicárselos lo más resumido posible, pero no pasó por alto los rostros llenos de duda e incertidumbre de la mayoría. Lo observaban como si de pronto se hubiese vuelto loco, cosa que al final le resultó bastante graciosa, pues era el plan mejor argumentado que se le había ocurrido.

-Entonces... ¿dices que hay que saltar en veinte minutos?

-De hecho, HyungWon... Ahora que lo preguntas, quiero que MinHyuk y tú vayan hasta el aeropuerto con el piloto y consigan un bote que se mantenga a la orilla de las rocas. Si las cosas no resultan de acuerdo a lo planeado, tendremos que recurrir a saltar al mar.

-¿Saltar al mar? -HoSeok cuestionó con incredulidad exagerada. -Saltar sobre la nave con paracaídas está bien, pero... ¡¿acaso quieres que nos suicidemos?!

-Escuadrón Suicida -murmuró el pelirrojo, causando que él y HyungWon rieran por lo bajo.

-MinHyuk, cierra la boca o te mataré yo mismo... ¿Y por qué ellos no van? Quiero quedarme aquí -espetó el fornido de piel clara.

-Ey, tú eres más importante en esta misión, HyungWon y MinHyuk no podrían servirme de mucho.

-¡Oye! -se quejaron los mencionados. KiHyun rio sin poderlo evitar.

-WonHo -cuando el chico volteó a verle, el bajo le mostró una sonrisa -, tu miedo a las alturas debe desaparecer, trata de enfocarte en traer a Fueguito de vuelta.

Y, con un suspiro, HoSeok asintió, toqueteando como método de distracción las correas que lo mantenían en su asiento.

JooHeon se sintió feliz de nueva cuenta, pues saber que la cercanía entre todos había mejorado estos últimos días le quitaba un peso de encima al respecto, había ocasiones en que no sabía exactamente qué hacer para que los demás se toleraran, pero eso se había solucionado sin intervención de nadie, y la creía una razón más para considerar a su equipo una absoluta maravilla. En ese momento, quienes se veían menos angustiados eran MinHyuk y HyungWon, y los comprendía, el trabajo que les había asignado no era dificultoso en realidad, sin embargo, era algo importante que había considerado por si había algún fallo una vez que el resto y él se adentraran a rescatar a Im.
Sus piernas temblaron al levantarse cuando llegó el tiempo de comenzar con el plan, volteó a ver a los otros y asintió en su dirección, haciendo de aquella una señal para hacerles saber que todo estaría bien con ellos, que aseguraba no permitir que les pasara algo.